?Ay... Macarena!
"Gracias, dios m¨ªo", susurr¨® desde el banquillo mirando al techo, transido ante la que hab¨ªa resultado una sentencia "como dios manda". Poco despu¨¦s, el no culpable por la gracia del alt¨ªsimo se presentaba en la Bas¨ªlica de Santa Mar¨ªa de la Esperanza Macarena de Sevilla. All¨ª, junto a la tumba del genocida violador Queipo de Llano (nunca antes una virgen hab¨ªa estado tan mal acompa?ada) ofrec¨ªa "las intenciones de una misa a la Sant¨ªsima Virgen por la que profesa una gran devoci¨®n y a la que se encomienda en los momentos de mayor necesidad", seg¨²n nota oficial de los cofrades. Completaba el cuadro costumbrista la genuflexi¨®n y besamantos del eterno candidato Javier Arenas, a ver si a la cuarta ya va la vencida.
Ignoramos si antes de esta peregrinaci¨®n bajo palio el curita Camps hab¨ªa pasado a presentar sus respetos a las mareded¨¦us locales, porque igual tambi¨¦n es presa de este auto-odio, esta condici¨®n de seguir siendo "los m¨¢s muelles" que impregna nuestro ser colectivo y nos impele a rendir pleites¨ªas forasteras. Si algo ha quedado sobradamente demostrado es que nuestros elegantes con poltrona, gorrones o no, encargan los trajes en Madrid y no en la calle de Col¨®n.
Puede que esa condici¨®n de ductilidad, una de nuestras anomal¨ªas como pueblo, haya jugado un importante papel en la benevolencia mayoritaria de aquel jurado que no hall¨® culpa pese al alud de pruebas y testimonios que indicaban lo contrario. "Los valores deciden m¨¢s en el voto que los hechos objetivos", advierte la catedr¨¢tica de ?tica Adela Cortina. Y si los mecanismos que explican el voto son complejos y cambiantes, si hace tiempo que el sufragio valenciano viene inclin¨¢ndose a la derecha, si el jurado era representativo de la sociedad... ego te absolvo, sin m¨¢s episodios rocambolescos. Por eso seg¨²n qu¨¦ juristas defienden la bondad de los tribunales profesionales, suponiendo (que es mucho suponer) que aplican mejor la ley sin contaminaciones ideol¨®gicas, psicol¨®gicas ni sociol¨®gicas.
Lo que pasa es que ahora los "hechos objetivos" nos est¨¢n aplastando irremediablemente, y que el colosal desastre econ¨®mico en que nos han sumido los Gobiernos del PP (no solo "los mercados") est¨¢ da?ando seriamente a las clases medias valencianas, donde la derecha tiene un tradicional caladero de votos que podr¨ªan darse a la fuga.
Hasta qu¨¦ punto el des¨¢nimo se convertir¨¢ en rearme articulado y eficaz est¨¢ por ver. En reflexi¨®n colectiva a convocatoria de Valencians pel Canvi, partidos de la izquierda, sindicatos y organizaciones sociales manifestaron la necesidad de volver a inventar alternativas de gobierno, estrategias plausibles con el horizonte de 2015. Se trata de recuperar valores, calidad democr¨¢tica y creatividad pol¨ªtica, de plasmar esa voluntad de entendimiento, de dar ¨¢nimo y esperanza a la ciudadan¨ªa. "Es urgente", se dijo, "quiz¨¢ nuestra ¨²ltima oportunidad".
Pero nada es para siempre, como explic¨® Rajoy. Mientras el poeta respond¨ªa: "Ha de ser posible vivir en dignidad".
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