Las reformas laborales no son una panacea
"Mirar lo que se tiene delante
de los ojos requiere
un constante esfuerzo"
George Orwell
Millones de espa?oles, parados o a la espera de encontrar su primer empleo, tienen puestas sus esperanzas en las reformas del mercado laboral, pero tales reformas, aunque necesarias, no son y nunca ser¨¢n una "panacea" para resolver el masivo y vergonzoso problema que supone para Espa?a el desempleo.
En la actualidad, Alemania, con 82 millones de habitantes, tiene alrededor de 2,7 millones de parados (menos del 7% de la poblaci¨®n activa), el nivel m¨¢s bajo desde 1991, mientras que Espa?a, con 46 millones de habitantes, tiene m¨¢s de cinco en paro (el 23%), lo cual supone el nivel m¨¢s alto de los ¨²ltimos 15 a?os. La econom¨ªa espa?ola se contrajo entre 2007 y 2011 en t¨¦rminos similares al promedio de las de los 17 pa¨ªses de la eurozona, pero el ¨ªndice de paro espa?ol super¨® en m¨¢s de dos veces su tasa anterior, mientras que el de la eurozona se desliz¨® desde el 7,5% al 10,3%.
El desaf¨ªo radica en establecer una econom¨ªa m¨¢s diversificada
Algo funciona muy mal. El FMI tiene raz¨®n al calificar de disfuncional el mercado de trabajo espa?ol, pero tambi¨¦n hay que echarle la culpa a un descompensado modelo econ¨®mico, excesivamente basado en la construcci¨®n y el turismo, y a un sistema educativo incapaz de crear los cimientos de un modelo productivo m¨¢s pendiente del conocimiento que de los ladrillos y el mortero.
Una reciente visita a Las Palmas de Gran Canaria confirm¨® estas apreciaciones. En 2011, las islas Canarias, una reproducci¨®n a escala del conjunto de Espa?a, aunque de una forma extrema, disfrutaron de una temporada tur¨ªstica r¨¦cord, recibiendo 12 millones de visitantes; es decir, 1,5 m¨¢s que en 2010 (el 21% del total de Espa?a y seis veces la poblaci¨®n del archipi¨¦lago). Hace mucho tiempo que el turismo constituye el puntal econ¨®mico de las Canarias; sin embargo, su tasa de desempleo es del 30%, muy por encima de la media nacional y el segundo m¨¢s elevado despu¨¦s del de Andaluc¨ªa. ?Por qu¨¦ la tasa de paro es aqu¨ª tan elevada a pesar de haber tenido la mejor temporada tur¨ªstica de la ¨²ltima d¨¦cada? Principalmente, por el derrumbe del inflado sector inmobiliario, que ha hecho que las islas dependan todav¨ªa m¨¢s de un ¨²nico sector. Lo mismo puede decirse de gran parte de Espa?a.
En los hoteles de las islas cada vez hay m¨¢s extranjeros en puestos directivos, porque los canarios no saben hablar los idiomas que utilizan sus millones de visitantes. De manera que, por ejemplo, un hotel con una numerosa clientela alemana, en su recepci¨®n coloca a alemanes o a personas de otras nacionalidades que hablan alem¨¢n. Aunque hace ya unos 50 a?os que el turismo es la base de la econom¨ªa canaria, los colegios de las islas y de gran parte del resto de Espa?a han fracasado estrepitosamente en la ense?anza de lenguas extranjeras. No han ido m¨¢s all¨¢ de un nivel elemental, y a veces ni siquiera eso.
Como en el resto de las regiones, que se volvieron locas con la construcci¨®n, en las Canarias la tasa de abandono escolar temprano, la de quienes dejan las aulas a los 16 a?os para trabajar en el turismo y la construcci¨®n, es elevada. Los trabajadores de este sector, ahora en paro, poco m¨¢s saben hacer, y no tienen pr¨¢cticamente m¨¢s alternativa que volver a clase a retomar los estudios. Esto explica que el ¨ªndice de abandono escolar est¨¦ comenzando a reducirse.
Entretanto, en el otro extremo del ciclo educativo, las universidades contin¨²an produciendo ristras de licenciados que con frecuencia terminan en empleos para los que est¨¢n sobrecualificados, porque hasta la fecha el modelo productivo ha sido incapaz de crear un n¨²mero suficiente de empleos que demanden su preparaci¨®n. No es sorprendente que en 2011 una cifra considerable de espa?oles (62.611, seg¨²n el INE), muchos con t¨ªtulos universitarios, haya comenzado a emigrar, por primera vez en 30 a?os. Mis propios hijos, de 30 y 29 a?os, trabajaron inicialmente en Espa?a y ahora lo hacen en Londres y Berl¨ªn.
Durante la campa?a electoral de 2008, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero prometi¨® crear dos millones de puestos de trabajo y alcanzar el pleno empleo. Sin embargo, en los ¨²ltimos cuatro a?os se han perdido m¨¢s de dos millones de empleos. ?De d¨®nde van a salir los nuevos puestos de trabajo estables? Evidentemente, no de la construcci¨®n (se calcula que hay alrededor de 750.000 viviendas nuevas sin vender) y tampoco de las Administraciones p¨²blicas, que est¨¢n reduciendo la cantidad de puestos de trabajo.
Espa?a ha acometido innumerables reformas laborales desde 1984, cuando se introdujeron contratos temporales para tratar de fomentar la creaci¨®n de empleo, aunque esa medida acabara creando un mercado laboral completamente dual, formado por integrados (los que tienen contratos indefinidos) y excluidos (los que tienen contratos temporales).
Por s¨ª solas, las reformas laborales, al margen de lo liberalizadoras que sean, no crear¨¢n empleo. El desaf¨ªo radica en establecer una econom¨ªa m¨¢s diversificada que, basada en el conocimiento, dependa m¨¢s de las exportaciones. Para ello har¨¢ falta una d¨¦cada: Espa?a tendr¨¢ que soportar durante mucho tiempo un elevado ¨ªndice de desempleo.
William Chislett es autor de tres libros sobre Espa?a publicados por el Real Instituto Elcano. Traducci¨®n de Jes¨²s Cu¨¦llar Menezo.
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