Las deudas dejan a la antigua Caja Segovia sin fondos y sin sede social

El consejo saliente de la Caja de Ahorros de Segovia, que presidi¨® el popular Atilano Soto, no le puso trabas a las prejubilaciones y planes de pensiones millonarios de sus directivos por unos 45 millones de euros pese a que ya era efectiva la integraci¨®n de la entidad en Bankia. Tampoco se opuso a la concesi¨®n de un cr¨¦dito de siete millones para hacer frente a una deuda con Hacienda pocos d¨ªas antes de cesar en sus funciones, en julio pasado, para lo que aport¨® como aval un emblem¨¢tico torre¨®n medieval, el de los Lozoya, pilar de la futura obra social de la entidad y que ahora se queda en el aire.

El nuevo consejo, que tiene como misi¨®n crear una funci¨®n para la obra social ¡ªen el que s¨®lo repite la popular Elena Garc¨ªa Gil, en representaci¨®n de la Federaci¨®n de las Mujeres Rurales¡ª, cuenta con una liquidez que ronda los 6,5 millones de euros para financiar sus actividades. Sin embargo, se ha encontrado con una deuda superior y, sobre todo, con la hipoteca de su activo principal, el torre¨®n de los Lozoya, donde se realizan importantes exposiciones y encuentros culturales.

Rafael Encinas, el nuevo presidente de la entidad, no acierta a comprender c¨®mo si Caja Segovia aport¨® cerca de 6.000 millones al Banco Financiero y de Ahorros, matriz de Bankia, no asumi¨® tambi¨¦n esta deuda de siete millones. Ahora, los directivos se encuentran con que se han quedado sin participaci¨®n en el grupo financiero, que se reduce al 2%, y por lo tanto no les repercutir¨¢n beneficios para destinarlos a obra social. Una falta de ingresos que se suma al hecho de que los ahorros est¨¢n hipotecados.

El origen del ¨²ltimo conflicto lo sit¨²a Encinas en 2011, cuando la Agencia Tributaria realiza una inspecci¨®n a la sociedad Navicoas Asturias, dedicada al sector inmobiliario, participada por Caja Segovia al 50%, a trav¨¦s de Inversiones y Desarrollo 2069. Esta sociedad estaba presidida por el exdirector de riesgos de la entidad, Oscar Javier Varas de la Fuente, actuando de secretario el que era vicepresidente del consejo de administraci¨®n, Manuel Agud¨ªez Calvo, exsenador socialista.

Antes de explotar la burbuja, en 2006, Navicoas compr¨® una sociedad propietaria de un solar en Gij¨®n. No obstante, la Agencia Tributaria entendi¨® que deber¨ªa haber liquidado fiscalmente la transmisi¨®n del terreno, lo que acab¨® atribuyendo a Caja Segovia. As¨ª las cosas, el consejo de la entidad, pocos d¨ªas antes de cesar, acord¨® pagar al fisco pidiendo un cr¨¦dito de siete millones a Bankia, que supuestamente era quien deber¨ªa haberse hecho cargo tambi¨¦n de la deuda desde un inicio porque Caja Segovia le hab¨ªa pasado ya todo el negocio.

La situaci¨®n en la que ha terminado la antigua caja de ahorros ha causado malestar entre muchos de los ciudadanos y clientes. Uno de los segovianos que hace patente su protesta es el exempleado Dami¨¢n Sanz, que sale a la calle con panfletos criticando la supuesta mala gesti¨®n del anterior consejo. Incluso espera a algunos a la puerta de su domicilio para reproch¨¢rselo a la cara, Tambi¨¦n el alcalde, Pedro Arahuetes, independiente en las listas del PSOE, ha expresado su verg¨¹enza y tristeza por el hecho de que el torre¨®n medieval sea el aval de un cr¨¦dito y d¨¦ al traste definitivamente a la obra social de la caja.