¡°La industria de los fondos se recupera, pero la calidad de los productos es mala¡±
¡°Nuestro proyecto es a largo plazo. La idea de los socios es jubilarnos aqu¨ª¡±, se?ala Satr¨²stegui.
Santiago Satr¨²stegui (Madrid, 1964) es presidente y consejero delegado de Abante Asesores, la empresa de asesoramiento financiero que fund¨® junto a otros socios hace ya 12 a?os.
Pregunta. ?Qu¨¦ ofrece Abante a sus clientes?
Respuesta. Nuestros principios fundacionales tienen clara una cosa: el cliente es la persona, no su dinero; nos preocupa el individuo que invierte y no cu¨¢nto invierte. El cliente es el centro de toda nuestra actividad. Para lograrlo hay que ofrecer unos servicios de mucho valor a?adido para ayudarle en la construcci¨®n global de su patrimonio y, posteriormente, cuando has definido su plan financiero, llevar su dinero a los mercados para lo cual nosotros hemos apostado por los fondos de fondos que nos permiten elegir a los mejores gestores del mundo.
P. ?Cu¨¢les son los otros rasgos que les diferencian de la competencia?
R. Un rasgo propio es la independencia. En nuestro accionariado no hay ninguna instituci¨®n que nos obligue a tomar decisiones estrat¨¦gicas que se alejen de nuestras convicciones. Que los directivos sean los due?os de la empresa te permite decidir sobre nuestro futuro. Ahora bien, la independencia es una condici¨®n, pero por s¨ª sola no basta para generar valor. El cliente necesita que tengas capacidad para ofrecerle valor a?adido y para ello debes tener el tiempo suficiente, atraer talento, capacidad para llegar a los productos adecuados... Desde su fundaci¨®n hace 12 a?os, Abante ha mantenido su independencia y adicionalmente hemos podido crecer a pesar de las crisis. Hoy ya somos 110 personas, la gran mayor¨ªa formadas con nosotros, y con un volumen suficiente para buscar productos atractivos. Dentro de poco alcanzaremos los 1.500 millones de euros bajo gesti¨®n y tenemos casi 4.000 cuentas de clientes.
P. ?Qu¨¦ objetivos de crecimiento tiene?
R. En Abante no hemos esperado a que la econom¨ªa mejorase para empezar a crecer. En 2009 eramos 40 personas y ahora sumamos 110 en plantilla. Creemos que tras la crisis los inversores se van a plantear la relaci¨®n con su entidad financiera de una manera distinta y por eso hemos ganado capacidades para cuando los inversores nos llamen y nos pidan que les ayudemos. Dar una cifra concreta de nuestra previsi¨®n de crecimiento es dif¨ªcil porque estamos creciendo mucho. El mercado va a cambiar mucho en cuanto a la distribuci¨®n de los productos financieros, ser¨¢ una catarsis espectacular, ¨²nica. El n¨²mero de entidades financieras se ha reducido mucho y eso deja sitio para que surjan proyectos con caracter¨ªsticas distintas. Estamos convencidos de que tenemos mucho recorrido y no solo en Espa?a ya que la internacionalizaci¨®n es una parte importante de nuestro crecimiento.
P. En los ¨²ltimos a?os han llegado al mercado espa?ol firmas extranjeras que han adquirido grupos locales a precios bastante altos. ?Es el suyo un proyecto a largo plazo o si llegase una buena oferta podr¨¢n considerarla?
¡°Si no asumes riesgos la rentabilidad de tu inversi¨®n ser¨¢ cero¡±
R. Nuestro proyecto es absolutamente a largo plazo. La idea de los fundadores y de los socios que se han ido sumando es jubilarlos aqu¨ª. Se nos han acercado muchas veces para explotar sinergias, pero siempre hemos cre¨ªdo que el valor que te da la independencia es fundamental en nuestro proyecto. Otra cosa es que las valoraciones de las operaciones que se han hecho en Espa?a sean muy altas. Creo que siempre ser¨¢ as¨ª porque no hay proyectos independientes y el que quiere entrar en este mercado tiene muy pocas opciones.
P. En Espa?a se dan dos factores: por un lado, un sistema de venta de productos dominado por los bancos y, en segundo lugar, una baja cultura financiera por parte de los clientes. ?Qu¨¦ consecuencias tiene esta combinaci¨®n?
R. Se trata de un problema circular. Tenemos un sistema de distribuci¨®n as¨ª no porque la cultura de los clientes sea baja, sino que porque tenemos tal sistema de venta de productos, la cultura es baja. La red de los bancos hab¨ªa acaparado hasta ahora la venta de fondos y su capacidad para conectar con los clientes les bastaba para trabajar con fondos garantizados o de renta fija. Ahora, con la crisis, las cosas van a cambiar. La represi¨®n financiera est¨¢ para quedarse y el mensaje de los bancos centrales es claro: si no asumes riesgos la rentabilidad de tus inversiones ser¨¢ cero. Y eso ser¨¢ as¨ª por mucho que la entidad financiera con la que trabajes se empe?e en camuflarlo.
P. ?Deber¨ªa ser el Gobierno m¨¢s generoso con la fiscalidad del ahorro?
R. S¨ª. En los ¨²ltimos a?os ha habido una evoluci¨®n hacia la penalizaci¨®n del ahorro que no es buena. El Gobierno deber¨ªa comunicar al ciudadano que existe un problema compartido porque las pensiones no van a poder pagar el dinero que esperamos. Por tanto, penalizar el ahorro significa penalizar las posibilidades que tiene el inversor de crear su propia cobertura sobre las pensiones p¨²blicas. Por otro lado, en la medida que no tengamos un mercado de capitales desarrollado seremos un pa¨ªs vulnerable a crisis de confianza del exterior, como hemos podido comprobar durante los ¨²ltimos a?os. Revertir esta dependencia exige que tanto la normativa fiscal como regulatoria favorezca el crecimiento del mercado dom¨¦stico.
P. Tras una profunda crisis la industria de la inversi¨®n colectiva espa?ola recuper¨® el pulso en 2013. ?Cree que esta mejor¨ªa continuar¨¢?
R. Creo que s¨ª. Los inversores est¨¢n obligados a asumir m¨¢s riesgos de una forma diversificada y con una gesti¨®n profesional, y el activo mejor para esta estrategia es el fondo de inversi¨®n. No obstante, por ponerle una pega a la recuperaci¨®n de la industria y no caer en la complacencia, hay que ver c¨®mo est¨¢ creciendo el sector. Y la calidad de los fondos no es buena porque se est¨¢ creciendo sobre todo con productos que van a dar muy poca rentabilidad al part¨ªcipe. Estos fondos no pueden dar ese yield porque est¨¢n basados en estructuras garantizadas con carteras de renta fija que pagan muy poco, o todav¨ªa peor con productos con objetivos de rentabilidad. Todos estos fondos van a dar unos r¨¦ditos muy bajos y pueden dar m¨¢s de un disgusto a los inversores cuando estos vean que no est¨¢n logrando los resultados que esperaba o que se est¨¢n perdiendo rentabilidades mayores si hubieran entendido la inversi¨®n de otra manera.
P. En un contexto de tipos tan bajos, ?qu¨¦ estrategia de inversi¨®n recomendar¨ªa a un cliente de perfil conservador?
R. En Abante creemos que la clave es diversificar. Por esto no se debe entender solo la asignaci¨®n que hagas a Bolsa o renta fija, sino que hay que diversificar en gestores y en estrategias. Hay que buscar gestores buenos que hayan ganado dinero consistentemente haciendo cosas distintas, y tratar de mezclar muy bien todos los componentes para que el nivel de riesgo agregado de la cartera sea lo m¨¢s bajo posible.
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