El hotel de d¨ªa: pagar la mitad por la mitad de tiempo
Las reservas por horas en hoteles prestigiosos se convierten en tendencia en Europa y hasta tienen nombre: 'daycation'
El negocio de los hoteles por horas, una pr¨¢ctica casi desaparecida en las ¨²ltimas d¨¦cadas, regresa con otro envoltorio. Tiene poco que ver con el clich¨¦ del motel alejado de la ciudad con clientela en busca de discreci¨®n. Ahora se dirige a profesionales que viajan por trabajo; familias que desean descansar antes de coger un avi¨®n; deportistas que esperan un partido o parejas que buscan darse un capricho. A todos ellos apuntan las plataformas digitales de reservas por horas en hoteles, que permiten, durante un m¨¢ximo de 12 horas, aprovechar las instalaciones del establecimiento sin tener que pagar la tarifa completa.
En el mundo anglosaj¨®n la tendencia ha cobrado nombre propio. Es el daycation, un neologismo que mezcla las palabras d¨ªas y vacaciones, y que simboliza la escapada diurna en hoteles para vivir unas horas fuera de lo normal.
Todav¨ªa hay quien reserva solo un rato en busca de un lugar para encuentros discretos, pero el fen¨®meno ahora va mucho m¨¢s all¨¢, se?ala Mar Rodr¨ªguez, la directora para Espa?a de Dayuse, uno de los primeros portales del sector. David Leb¨¦e, su fundador, observ¨® que las habitaciones de hoteles que se quedaban habitualmente vac¨ªas rondaban el 50% y decidi¨® aprovechar ese d¨¦ficit para fundar su empresa. Dayuse se cre¨® en Francia en 2010 y lleg¨® a Espa?a hace siete meses. Ahora colabora con miles de hoteles en las principales ciudades de Europa, asegur¨¢ndoles una media de 16.000 reservas cada mes sobre las que cobra un porcentaje de entre el 15% y el 20%.
"Las reservas de d¨ªas son un fen¨®meno urbano que se extiende entre personas que disponen de poco tiempo y que quieren vivir una experiencia nueva, pero sin tener gastos excesivos", explica Rodr¨ªguez. Uno de cada dos clientes del portal son grupos de amigos o parejas que alquilan por unas horas una suite, "para disfrutar de un masaje, del spa o del gimnasio", detalla. Pero hay tambi¨¦n trabajadores que se apuntan a estos portales: "Detectamos muchos tipos de profesionales que alquilan habitaciones por horas, como los que realizan sesiones de fotos para revistas o cazadores de talentos que hacen entrevistas fuera de lo com¨²n", asegura.
En Barcelona hay hoteles como el Indigo, un establecimiento de cuatro estrellas inspirado en el modernismo y en la historia de Gaud¨ª, que lleva unos meses colaborando con Dayuse. "Estamos muy contentos con su servicio", explica David G¨¹emes, el propietario del hotel, quien revela que, gracias a las m¨¢s de una docena de reservas por horas que registra mensualmente, llega a un p¨²blico de usuarios nuevos.
"En su mayor¨ªa son clientes locales. Profesionales que quieren descansar durante una estancia de negocio, o personas que quieren disfrutar de una siesta despu¨¦s de un masaje o de una tarde en la piscina", detalla G¨¹emes. El hotel, adem¨¢s, ofrece a los clientes que reservan por horas paquetes personalizados, como una cena gourmet o una acogida con cava y fruta fresca en las habitaciones con terrazas. "Nosotros no hacemos ning¨²n tipo de distinci¨®n al cliente que se queda tres o cuatro d¨ªas, o al que nos contrata por tres horas", asegura.
Hoteles como oficinas o cerca de aeropuertos
Adem¨¢s de Dayuse, hay otras plataformas que intentan penetrar en el mercado de las reservas por horas. Este es, por ejemplo, el caso de Byhours, una empresa fundada por Christian Rodr¨ªguez, que se?dirige principalmente a viajeros de negocio. Trabaja con hoteles de cadenas como Meli¨¢ y Vincci, que se ubican cerca de aeropuertos, estaciones, puertos y hospitales, y cada mes registra unas 6.000 reservas.
Su objetivo es extender el horario reducido a la noche: "El cliente del hotel ha cambiado y a los hoteleros no les queda m¨¢s remedio que adaptarse", revela. De ello est¨¢ tambi¨¦n convencido Carlos Ortiz, fundador de Worktel, un portal de reservas por horas que quiere convertir a los hoteles en oficinas: "Nos dirigimos a los comerciales que se desplazan por un d¨ªa, y que en lugar de estar en una cafeter¨ªa para conectarse al wifi, pueden alquilar lugares donde trabajar en un hotel", se?ala.
En este contexto los intermediarios digitales ganan peso. Se trata de empresas emergentes, lideradas por equipos de profesionales de entre 30 y 40 a?os, que tienen una notable proyecci¨®n hacia el exterior. Dayuse, la m¨¢s madura, opera ya en 14 pa¨ªses y tiene previsto a?adir a su cartera Emiratos ?rabes, Australia y Argentina. Byhours est¨¢ activa sobre todo en Espa?a, pero quiere expandirse en Europa. Worktel acaba de empezar a trabajar en Espa?a y no descarta arrancar en M¨¦xico a partir del verano.
"Los hoteleros han entendido que para ser competitivos no pueden limitarse a reducir los precios, sino que tienen que agregar servicios", explica Chrisitan Rodr¨ªguez, de Byhours. Y resume: "Con las reservas por horas no nos hemos inventado nada. Simplemente hemos aprovechado la tecnolog¨ªa y la facilidad de comunicaci¨®n para dar a los clientes y al sector una posibilidad que antes no ten¨ªan".
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