Los riesgos pol¨ªticos amenazan la fr¨¢gil recuperaci¨®n de Europa
La eurozona crecer¨¢ un1,7% en 2016 y el 1,5% en 2017, con la deuda y el paro a¨²n muy elevados
El crecimiento de la eurozona es y ser¨¢ ¡°modesto¡±: la velocidad de crucero que ha alcanzado Europa en el octavo a?o de la Gran Recesi¨®n es fr¨¢gil y desigual, seg¨²n confirmaron este mi¨¦rcoles las previsiones de la Comisi¨®n. La eurozona crecer¨¢ un magro 1,7% en 2016, y apenas el 1,5% en 2017, con la deuda y el paro a¨²n muy elevados. Pero en Bruselas, m¨¢s que la crisis, preocupan ya los riesgos pol¨ªticos: el Brexit, los conflictos geopol¨ªticos y la incertidumbre asociada a fen¨®menos ¡°proteccionistas, nacionalistas y aislacionistas¡±, como el que protagoniza Donald Trump, amenazan la mediocre recuperaci¨®n.
El testamento intelectual del historiador Tony Judt, desaparecido en 2010, teorizaba sobre la enfermedad del miedo: en Algo va mal contaba c¨®mo las crisis ¡ªpol¨ªticas, econ¨®micas, sociales¡ª lo multiplican por mil. Y viceversa: la pleamar de la Gran Recesi¨®n es alargada por la multitud de riesgos ¡ªde miedos¡ª que acechan en el horizonte. Las previsiones de oto?o de la Comisi¨®n Europea nacieron este mi¨¦rcoles cl¨ªnicamente muertas: la incertidumbre asociada a la victoria de Donald Trump no aparece en los pron¨®sticos. Y sin embargo, merece la pena darles un vistazo porque, m¨¢s all¨¢ de los n¨²meros que se llevar¨¢ el viento, avisan a las claras de la mediocridad de la recuperaci¨®n europea, pero sobre todo advierten de los riesgos que acechan a la econom¨ªa europea y global.
Esos riesgos son, fundamentalmente, pol¨ªticos: Estados Unidos tiene su Trump, pero Europa se le anticip¨® con el Brexit y tiene por delante citas electorales fundamentales en Italia y Austria, este a?o, y en Alemania, Francia y Holanda, el pr¨®ximo. La eurozona crecer¨¢ apenas el 1,7% en 2016 ¡ªpor debajo del ritmo anterior a la crisis¡ª, y a¨²n menos en 2017, el 1,5%, tres d¨¦cimas menos que en la anterior cata estad¨ªstica. Se van acabando los vientos de cola que proporcionaban los precios del petr¨®leo y la pol¨ªtica monetaria extraordinaria, y ni con esas Europa ha conseguido alcanzar una velocidad de crucero parecida a la de otras reactivaciones.
El crecimiento es fr¨¢gil y desigual. El endeudamiento, elevado. El paro se resiste a bajar de cotas del 10%, que se elevan al 20% en pa¨ªses como Grecia y Espa?a. Y Bruselas es incapaz de acompa?ar las pol¨ªticas del BCE con otros est¨ªmulos: la Uni¨®n ya no receta la austeridad de hace un lustro, pero Bruselas tampoco quiere alegr¨ªas. La pol¨ªtica fiscal ser¨¢ neutral en 2017 y 2018, a pesar de que el FMI, el G20 y hasta Mario Draghi piden otra cosa.
Incertidumbre generalizada
El crecimiento de la eurozona es, seg¨²n admite la Comisi¨®n, ¡°modesto¡±. Pero el punto de fuga de las previsiones son unos riesgos manifiestamente a la baja que recogen el Brexit, el trumpismo y otros quebraderos de cabeza que ya son globales: ¡°La incertidumbre es generalizada¡±, dice el informe. ¡°Los riesgos se han intensificado en la estela del Brexit, que es una especie de indicador adelantado de una nueva oleada de protestas antiglobalizaci¨®n y de la tendencia hacia el proteccionismo, el nacionalismo econ¨®mico y el aislacionismo tanto en Europa como en el mundo¡±, a?ade un texto inusualmente expl¨ªcito.
Los miedos de la Comisi¨®n son m¨²ltiples: el impacto de la salida del Reino Unido de la UE no se ha sustanciado a¨²n, pero puede afectar por varias v¨ªas, en especial si la incertidumbre se mantiene durante mucho tiempo. Al Ejecutivo de la UE le preocupan tambi¨¦n ¡°el reequilibrio de la econom¨ªa de China¡±, ¡°la normalizaci¨®n de la politica monetaria en EE UU¡±, ¡°los conflictos geopol¨ªticos¡± y, en fin, el legado de la crisis europea, con los eternos problemas en la banca y las dudas sobre la deuda.
El apellido Trump no aparece una sola vez en las 208 p¨¢ginas, pero sobrevuela todo el texto. El comisario Pierre Moscovici, que present¨® el estudio, calific¨® justo antes de las elecciones de ¡°populista provocador¡± al exc¨¦ntrico millonario que presidir¨¢ la primera potencia mundial. Este mi¨¦rcoles, sin embargo, se mostr¨® confiado en encontrarse con un Trump ¡°diferente¡± en la Casa Blanca. ¡°Estados Unidos seguir¨¢ siendo un socio fuerte y de confianza¡±, aventur¨®. De ese augurio dependen las previsiones de la Comisi¨®n, el futuro de la econom¨ªa europea y puede que alguna cosa m¨¢s. ¡°Un trasfondo de desilusi¨®n; una sensaci¨®n de que la promesa y la oportunidad se han desaprovechado de alg¨²n modo¡±, dec¨ªa Judt acerca de esta ¨¦poca f¨¢ustica, en la que los miedos rondan cerca de la econom¨ªa, de la pol¨ªtica, de pr¨¢cticamente todo.
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