M¨¦xico y la UE aceleran su di¨¢logo comercial en respuesta al proteccionismo de Trump

Con el Tratado de Libre Comercio de Am¨¦rica del Norte (EE UU, M¨¦xico y Canad¨¢) en el alero y el Transpac¨ªfico hecho trizas por Donald Trump, la Uni¨®n Europea y M¨¦xico se proponen dar un aceler¨®n a su acuerdo de libre intercambio. El titular mexicano de econom¨ªa, Ildefonso Guajardo, y la responsable de Comercio de la Uni¨®n Europea, Cecilia Malmstr?m, han acordado este mi¨¦rcoles ¡°relanzar¡± el di¨¢logo con dos rondas negociadoras que se celebrar¨¢n antes del verano: una primera entre los d¨ªas 3 y 7 de abril y una segunda entre 26 y 29 de junio. Adem¨¢s, entre ambas citas, Guajardo y Malmstr?m se reunir¨¢n en la Ciudad de M¨¦xico para ¡°hacer balance de los progresos e impulsar los avances en las negociaciones¡±. El prop¨®sito de estos encuentros es, seg¨²n ha subrayado la Comisi¨®n Europea en un comunicado, ¡°acelerar¡± el calendario de negociaci¨®n sin, en ning¨²n momento, hacer referencia expl¨ªcita al factor que ha llevado a ambas partes a tomar cartas en el asunto: la llegada del magnate neoyorquino a la presidencia de la primera potencia mundial

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El giro comercial de la UE hacia M¨¦xico tiene algo de oportunismo, algo de gui?o pol¨ªtico y tambi¨¦n algo de humo. El anuncio de las dos pr¨®ximas rondas de negociaciones para renovar el acuerdo de libre comercio entre la Uni¨®n y el pa¨ªs norteamericano estaba en la agenda desde el a?o pasado, ante las notables consecuencias del acuerdo entre la UE y Estados Unidos (el denominado TTIP, que ahora est¨¢ en el congelador) sobre el pacto entre europeos y mexicanos. Bruselas quiere aprovechar el mensaje proteccionista de la Administraci¨®n Trump para reforzar alianzas y buscar nuevos socios: M¨¦xico es el primer ejemplo de esa nueva pol¨ªtica. ¡°La UE se focaliza ahora en los acuerdos con pa¨ªses asi¨¢ticos, incluidos los que firmaron el acuerdo Transpac¨ªfico¡± antes de la llegada de Trump, explicaron fuentes comunitarias. Y sin embargo, a pesar del mensaje positivo que insisten en lanzar los europeos, ¡°nadie ve la nueva pol¨ªtica comercial provocada por las tentaciones proteccionistas de Trump como una oportunidad, sino m¨¢s bien como una incomodidad y con preocupaci¨®n por la importancia de las relaciones transatl¨¢nticas¡±, seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas.

Nada de eso aparece en las declaraciones p¨²blicas: en una declaraci¨®n conjunta, Malmstr?m y Guajardo han explicado que la Uni¨®n y M¨¦xico pondr¨¢n sus relaciones comerciales ¡°a la altura del siglo XXI¡±. ¡°Seremos capaces de estimular el crecimiento, mejorar la competitividad de nuestras empresas y ofrecer m¨¢s opciones a los consumidores al tiempo que creamos empleo¡±.

Trump amenaz¨® en su campa?a con deportar a 11 millones de inmigrantes indocumentados, la mitad de ellos mexicanos. Quiere construir un muro con M¨¦xico. Ha amenazado a los grandes grupos de automoci¨®n por sus inversiones en M¨¦xico. Apuesta por revocar el acuerdo de libre comercio en Am¨¦rica del Norte (TLCAN), y no ha dejado de dar duros golpes a la econom¨ªa mexicana desde su llegada al Despacho Oval. M¨¦xico empieza a defenderse: tiene firmados acuerdos de libre comercio con 44 pa¨ªses que representan casi dos tercios del PIB global, y no tiene m¨¢s remedio de reforzar los lazos con Europa si Washington cumple sus amenazas.

El acuerdo de libre intercambio UE-M¨¦xico est¨¢ en vigor desde el a?o 2000, cuando los patrones del comercio mundial iban por unos derroteros muy diferentes de los actuales. ¡°Con este proceso de modernizaci¨®n se pretende que el acuerdo est¨¦ al nivel de otros ambiciosos acuerdos comerciales que la UE y M¨¦xico han negociado recientemente¡±, subrayan ambas partes. En la ¨²ltima reuni¨®n entre los equipos negociadores, celebrada en el pa¨ªs latinoamericano a mediados de noviembre ¨Capenas dos semanas despu¨¦s de las elecciones estadounidenses¨C, las autoridades europeas centraron sus propuestas para la actualizaci¨®n del pacto en seis grandes ejes: reglas de origen, contrataci¨®n p¨²blica, medidas sanitarias y fitosanitarias, energ¨ªa y materias primas, propiedad intelectual y pymes.

Seg¨²n los datos de Bruselas, entre los a?os 2005 y 2015, el flujo anual del comercio de mercanc¨ªas entre ambos bloques econ¨®micos pas¨® de 26 000 a 53 000 millones de euros (de 28.000 a 57.000 millones de d¨®lares). Y desde 2000, cuando el pacto ¨Cconocido bajo las siglas TLCUEM¨C entr¨® en vigor, el comercio bilateral de bienes ha crecido un 180% y las inversiones europeas en suelo mexicano se han triplicado, hasta convertir al conjunto de Estados miembros de la UE en el segundo m¨¢ximo inversor en el pa¨ªs norteamericano.

La UE es, tambi¨¦n, el segundo bloque econ¨®mico que m¨¢s productos mexicanos compra (el 5% del total), solo por detr¨¢s de EE UU (73%). El relanzamiento del di¨¢logo comercial entre ambos bloques econ¨®micos se enmarca dentro de la estrategia de buscar socios alternativos a su vecino del norte ante las reiteradas amenazas de Donald Trump. Aunque los especialistas en cuestiones comerciales advierten de que la diversificaci¨®n de la matriz exportadora de un pa¨ªs solo es posible en el largo plazo, todos coinciden en la necesidad de que M¨¦xico mire m¨¢s all¨¢ de EE UU en esta nueva era. Este mi¨¦rcoles, Guajardo y Malmstr?m han dado el primer paso.