Guardianes del sabor del champ¨¢n
El grupo Oller, con 125 a?os de historia, crece gracias a su fuerte especializaci¨®n en corchos para vinos espumosos
El oficio de extraer corcho de los alcornoques, lo que se conoce como ¡°la saca¡±, es lento y artesanal, y tiene como elementos esenciales la paciencia y la artesan¨ªa propias del mundo rural, virtudes que el sector del corcho espa?ol ha sabido combinar con la innovaci¨®n. Por detr¨¢s de Portugal, Espa?a es el segundo promotor mundial de este material, con 150 empresas que facturan cerca de 350 millones de euros y que radican principalmente en Catalu?a, Andaluc¨ªa y Extremadura. Una de estas compa?¨ªas, el Grupo Oller, cumple 125 a?os con unas cifras de crecimiento que la sit¨²an en un momento de expansi¨®n gracias a su especializaci¨®n: Oller solo fabrica tapones para botellas de cava, champ¨¢n y vinos espumosos, una rama del negocio que no tiene la competencia de los tapones de pl¨¢stico que hay en algunas botellas de vino.
¡°Le tenemos mucho aprecio al corcho, nuestro material, a nuestros trabajadores y, sobre todo, al alcornoque¡±, cuenta el presidente de Grupo Oller, Jaume Nadal, en la presentaci¨®n de los datos de crecimiento de la empresa. La estima por el Quercus suber es evidente en la decoraci¨®n de la bodega del barrio barcelon¨¦s de El Born en el que Nadal, junto a Joan Puig, su director general, detalla los resultados de la compa?¨ªa.
Entre tapones de distintas formas y cortezas sin tratar a modo de centros de mesa, Nadal explica c¨®mo entr¨® en una empresa familiar que fund¨® su bisabuelo en 1892 y que en la actualidad factura 25,7 millones de euros y vende 240 millones de tapones en todo el mundo (el 70% de sus ventas son exportaciones, especialmente a Francia, Italia, Alemania y Estados Unidos).
El Grupo Oller, con una plantilla de 140 trabajadores, est¨¢ creciendo a un ritmo del 5% anual y se divide en cinco centros productivos: la sede en Cass¨¤ de la Selva (Girona); la empresa Surodis, en San Vicente de Alc¨¢ntara (Extremadura); Oller GmbH, en Fussgoenheim (Alemania); el Trust, tambi¨¦n en Cass¨¤, y la empresa que abri¨® el patriarca, Francisco Oller, en Reims (Francia) en el siglo XIX para aprovechar el mercado franc¨¦s del champ¨¢n y los espumosos. Francia sigue siendo el principal cliente de Oller, que desde hace cuatro generaciones se ha ido haciendo imprescindible entre los vinos espumosos franceses, algo que no ha variado mucho con la recesi¨®n econ¨®mica: el Grupo Oller copa el 12% de la cuota de mercado mundial de estos tapones, un comercio que se estima en 2.000 millones de botellas.
Espa?a es el segundo promotor mundial de este material, con 150 empresas que facturan cerca de 350 millones de euros
Previsiones optimistas
¡°Notamos la crisis muy pronto, en 2008, lo que nos dio tiempo a reestructurar el negocio y a prepararnos¡±, explica el director general de la compa?¨ªa. Las previsiones para el ejercicio de 2017 son muy optimistas: Puig asegura que la empresa crecer¨¢ otro 5,6% y que llegar¨¢ a los 33 millones de euros en facturaci¨®n, aumentando la cifra de r¨¦cord de su serie hist¨®rica.
Esta previsi¨®n al alza se basa en otra de las pr¨¢cticas que ha venido haciendo el sector del corcho en los ¨²ltimos a?os, y en especial Oller: no olvidarse de la inversi¨®n y de la innovaci¨®n. En el conjunto de Espa?a, el sector ha invertido 42 millones en I+D en los ¨²ltimos tres a?os, y el Grupo Oller lo ha hecho con m¨¢s de 10 millones desde 2006. La ¨²ltima adquisici¨®n del grupo gerundense es una peque?a compa?¨ªa, Uprodeco, que se dedicaba a triturar el corcho que se desecha, y que tiene una gran rentabilidad. Con esta compra, Puig est¨¢ convencido de que podr¨¢n aprovechar buena parte de las 85.000 hect¨¢reas de alcornoques catalanes.
Los ejemplares de Catalu?a, al habitar en bosques muy densos, no tienen un corcho de tanta calidad como la de los alcornoques extreme?os. No obstante, pueden ser rentables para hacer corcho triturado, que se usa para muchos materiales, y tambi¨¦n para una parte de los tapones de cava y champ¨¢n. De esta manera, al sanear los bosques catalanes, Oller tambi¨¦n estar¨¢ ayudando en la prevenci¨®n de incendios y en la preservaci¨®n del medio ambiente.
Proceso completo
La obsesi¨®n del Grupo Oller, seg¨²n Nadal, ha sido siempre estar presentes en todo el proceso del corcho desde que se extrae hasta que se convierte en el tap¨®n. As¨ª, aunque desde 2013 la gran parte del accionariado es propiedad del grupo portugu¨¦s Amorim (la familia de Nadal conserva un 15% de las acciones), todav¨ªa se sienten muy apegados a la tierra y presumen de mucha autonom¨ªa.
La empresa est¨¢ en contacto con los propietarios de los bosques, a los que compra directamente el material y con los que negocia para poder explotar sus alcornoques. Entre los ¨¢rboles extreme?os, andaluces y catalanes, Oller trabaja cada a?o con 140.000 alcornoques, y en 2016 compraron a los propietarios agr¨ªcolas un total de 1.800.000 kilos de corcho.
El proceso sigue en la f¨¢brica, donde el corcho se convierte en discos que se pegan con el conglomerado de corcho triturado y crean el tap¨®n. Este sigue unos exigentes procesos de calidad en los laboratorios de la empresa, supervisados por personal cualificado, para satisfacer a sus 530 clientes. De la f¨¢brica sale el tap¨®n perfectamente cil¨ªndrico: ser¨¢ el gas del cava o el champ¨¢n el que le d¨¦ la forma de seta a la que nos tiene acostumbrados.
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