Razones por las que Espa?a es el cuarto pa¨ªs de Europa en innovaci¨®n universitaria
11 centros espa?oles aparecen en el 'ranking' de las 100 universidades m¨¢s innovadoras de Europa
La universidad tiene el poder de transmitir el conocimiento a la sociedad y, por tanto, en ella se alberga el futuro crecimiento y desarrollo de la humanidad. Pero, adem¨¢s de formar, en las paredes de estos organismos tambi¨¦n hay sitio para la investigaci¨®n. De hecho, actualmente la media de dedicaci¨®n a esta labor por parte del profesorado se sit¨²a en el 65% de su tiempo.
En los ¨²ltimos 10 a?os el n¨²mero de publicaciones cient¨ªficas de las universidades espa?olas pr¨¢cticamente se ha duplicado, a pesar de que los gastos en el sistema universitario hayan disminuido casi un 8% en los a?os de recesi¨®n econ¨®mica y de que la p¨¦rdida de investigadores se haya situado en el 10,16%, lo que equivale a 12.418 profesionales, seg¨²n el informe anual sobre la I+D+i universitaria, elaborado por el Observatorio IUNE de la Alianza 4U, formada por las universidades Pompeu Fabra, Aut¨®noma de Madrid, Carlos III y Aut¨®noma de Barcelona.
Universidades espa?olas en el 'ranking' europeo
11 centros espa?oles aparecen en el ranking?de las 100 universidades m¨¢s innovadoras de Europa, elaborado por la divisi¨®n de ciencia de la agencia Reuters, bas¨¢ndose en datos de investigaci¨®n y patentes. La Universidad de Barcelona es la primera universidad espa?ola de la lista al ocupar el puesto 63, seguida de la Aut¨®noma de Barcelona (81), la Universidad de Valencia (82), la Polit¨¦cnica de Catalu?a (84), la Polit¨¦cnica de Valencia (85),?la Universidad de Santiago de Compostela (92), la Universidad de Sevilla (93), la Polit¨¦cnica de Madrid (96), la Complutense (97), la Universidad de Granada (99) y la Universidad Aut¨®noma de Madrid (100). Con ello, Espa?a es el cuarto pa¨ªs de Europa con un mayor n¨²mero de centros en la lista. Pero, ?qu¨¦ hacen nuestras universidades para conseguir este puesto?
Para Ernest Pons, jefe del gabinete del rectorado de la Universidad de Barcelona, primera universidad espa?ola del ranking, la respuesta se encuentra en distintas variables. Primero, el tama?o del centro. ¡°Somos una universidad grande, lo que facilita que creemos grupos m¨¢s grandes y potentes, y provoca que consigamos ser seleccionados en las convocatorias p¨²blicas de investigaci¨®n, ya que dan m¨¢s puntos, cuanto m¨¢s personal se tenga detr¨¢s¡±, indica Pons.
La media de edad de nuestro profesorado se sit¨²a en los 58 a?os. Esta caracter¨ªstica es una ventaja en el terreno de la investigaci¨®n
Ernest Pons, jefe del gabinete del rectorado de la Universidad de Barcelona
La segunda variable tambi¨¦n responde, en parte, al tama?o. ¡°Tenemos mucha facilidad para crear grupos interdisciplinares al contar con una gran diversidad de programas formativos¡±, afirma. La tercera, la edad de su profesorado. ¡°Nuestra media de edad se sit¨²a en los 58 a?os, esta caracter¨ªstica, que es un problema, tambi¨¦n es una ventaja en el terreno de la investigaci¨®n¡±. Y cuarta, ¡°desde siempre hemos llevado implicado en nuestro ADN la idea de que la investigaci¨®n y la innovaci¨®n son fundamentales¡±, concluye Pons.
La Universidad de Barcelona es muy potente en el terreno de las biociencias y la salud, una caracter¨ªstica que, sin duda, se debe a la alta presencia de empresas de estos sectores en Catalu?a y, en concreto, en Barcelona. ¡°La intervenci¨®n de las empresas es de vital importancia. Las demandas de la sociedad nos llegan a trav¨¦s de ellas, junto a su colaboraci¨®n creamos incubadoras de startups que dan soluciones a problemas reales. Las empresas representan el puente entre la sociedad y la universidad¡±, explica Pons.
La inversi¨®n privada
Durante el seminario sobre ¡°La investigaci¨®n universitaria vista desde Espa?a y desde Europa¡±, Federico Guti¨¦rrez Solana, ex rector de la Universidad de Cantabria y ex presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Espa?olas, se?al¨® que en nuestro pa¨ªs existe una inversi¨®n privada en I+D+i lejos de la que se realiza en otros pa¨ªses de referencia. En este sentido, Ernest Pons pide m¨¢s compromiso: ¡°A excepci¨®n de los convenios con Banco Santander, a trav¨¦s de Santander Universidades, de los que casi todas las universidades espa?olas nos beneficiamos, no existe mucho m¨¢s en este ¨¢mbito. Las empresas deber¨ªan implicarse m¨¢s porque es la ¨²nica manera de llegar donde las subvenciones p¨²blicas no llegan¡±.
¡°La clave para contribuir a un futuro de progreso, m¨¢s justo y equitativo, con mayores oportunidades para todos y para conseguir sociedades mejor preparadas y m¨¢s competitivas en un entorno que cada vez est¨¢ m¨¢s globalizado, es m¨¢s digital y absolutamente cambiante es el apoyo a la educaci¨®n con todo lo que implica: formaci¨®n, innovaci¨®n, transformaci¨®n digital, investigaci¨®n, internacionalizaci¨®n, emprendimiento y empleabilidad¡±, afirma Javier Rogl¨¢, director global de Santander Universidades y Universia de Banco Santander.
La entidad mantiene acuerdos de colaboraci¨®n con m¨¢s de 1.100 universidades y centros de investigaci¨®n de 21 pa¨ªses. En el ¨²ltimo a?o destin¨® 157 millones a iniciativas que abarcaron desde el acceso a una formaci¨®n de calidad e internacional hasta c¨®mo encontrar los distintos recursos para desarrollar una idea de negocio, pasando por la realizaci¨®n de pr¨¢cticas profesionales en empresas, la celebraci¨®n de premios a la innovaci¨®n con dotaciones que ayudan a implementar o empujar los proyectos o el acceso a entornos cada vez m¨¢s digitalizados con servicios adaptados a sus necesidades. En total, m¨¢s de 36.600 personas se beneficiaron directamente de sus programas en 2016.
El objetivo que debemos perseguir es el trabajo pensando no tanto en el producto y en el investigador, sino en la sociedad
Francisco Javier Lafuente, vicerrector de Innovaci¨®n y Proyectos Estrat¨¦gicos de la Aut¨®noma de Barcelona
Como consecuencia de estas iniciativas Banco Santander est¨¢ clasificada como la empresa que m¨¢s invierte en educaci¨®n en el mundo seg¨²n un informe de Varkey en colaboraci¨®n con la UNESCO. ¡°Creemos fundamental en la colaboraci¨®n entre empresas y universidades para fomentar la innovaci¨®n. Somos dos agentes complementarios en cuanto a lo que aportamos a esta colaboraci¨®n y nos beneficiamos mutuamente de la misma ¨Clas empresas podemos aprovechar la investigaci¨®n universitaria y estas pueden beneficiarse de nuestro conocimiento de mercados, clientes y din¨¢micas competitivas¡±, explica Javier Rogl¨¢.
Precisamente, aumentar esta colaboraci¨®n es la obsesi¨®n actual de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona, centro que ocupa la tercera posici¨®n de Espa?a en el ranking de Reuters. ¡°El objetivo que debemos perseguir es el trabajo pensando no tanto en el producto y en el investigador, sino en la sociedad. Y esto se consigue trabajando de la mano de las empresas¡±, garantiza Francisco Javier Lafuente, vicerrector de Innovaci¨®n y Proyectos Estrat¨¦gicos de la Aut¨®noma de Barcelona.
Por ello, el centro lleva siete a?os promoviendo comunidades de investigaci¨®n con institutos y empresas en el ¨¢mbito de las ciudades inteligentes, el patrimonio cultural y la salud mental. Adem¨¢s, en 2018 pondr¨¢n en marcha un grupo centrado en la alimentaci¨®n saludable. Por otro lado, dentro del campus cuentan con diferentes labs y tambi¨¦n con un hub de innovaci¨®n entre investigadores y empresas a trav¨¦s de la Asociaci¨®n B-30 (nombre que deriva de la autov¨ªa del anillo de Barcelona, zona de gran potencia industrial). ¡°Con esta iniciativa buscamos formar una especie de ventanilla ¨²nica donde las empresas puedan acudir ante cualquier necesidad de innovaci¨®n que se les presente, con el fin de que nuestros investigadores puedan ayudarles a llevarla a cabo¡±, manifiesta Lafuente.
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