Asegurar la diferencia empresarial
La propiedad industrial es el arma para garantizar el crecimiento de las sociedades innovadoras, sea cual sea su tama?o
El comercio mundial de falsificaciones y copias piratas super¨® los 380.000 millones de euros en 2016, seg¨²n las ¨²ltimas cifras de la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y Desarrollo Econ¨®mico (OCDE). La situaci¨®n no solo escamotea ingresos al fisco. La Oficina para la Propiedad Intelectual de la Uni¨®n Europea indica que el comercio de productos falsificados destruy¨® m¨¢s de 67.000 puestos de trabajo directos y supuso unas p¨¦rdidas superiores a 7.000 millones de euros en Espa?a durante el pasado a?o.
Para defenderse, las empresas deben proteger sus patentes, modelos de utilidad (una variedad de patente), dise?os industriales, marcas y nombres comerciales. ¡°Estos son los activos intangibles de una compa?¨ªa, y deben estar registrados en las oficinas p¨²blicas de cada Estado donde ejerza su actividad. Es la ¨²nica forma de que la empresa pueda hacer valer su propiedad¡±, asegura M¨®nica Castilla, jefe de ¨¢rea de Relaci¨®n con la Empresa en la OEPM, dependiente del Ministerio de Econom¨ªa, Industria y Competitividad.
No solo eso, la propiedad industrial se ha convertido en una de las principales armas competitivas de las organizaciones para crecer y exportar. ¡°Hace unos a?os, la propiedad industrial supon¨ªa, de media, el 20% del valor de una empresa, y hoy es el 84%. Las compa?¨ªas que informan a sus clientes sobre sus patentes, modelos de utilidad o dise?o, est¨¢n diciendo que son innovadoras, y que invierten en I+D+i¡±, asegura Patricia Ramos, directora de patentes de Pons IP.
¡°Tener los desarrollos protegidos es un escudo contra las copias y aumenta mi solvencia ante los clientes. Desarrollamos soluciones y herrajes para la construcci¨®n y cerramientos de aluminio. Muestro los registros de las patentes o de los modelos de utilidad a mis clientes (empresas instaladoras) para informarlas de que con ellos pueden diferenciarse de sus competidores¡±, explica Juan Carlos Fern¨¢ndez Padr¨®n, director general de Stac, una multinacional en continuo crecimiento porque ¡°hemos apostado por la innovaci¨®n para competir y hemos protegido los desarrollos. Eso nos ha ayudado a crecer hasta convertirnos en una gran empresa en 15 a?os (nacimos en 2002)¡±, a?ade.
?De qu¨¦ hablamos?
Invenciones. La legislaci¨®n establece que las patentes y los modelos de utilidad son invenciones que tienen aplicaci¨®n industrial y suponen una evoluci¨®n sobre lo conocido en todo el mundo. Los modelos de utilidad deben ser objetos (instrumentos, herramientas, aparatos y dispositivos) cuya configuraci¨®n, estructura o constituci¨®n determine una ventaja apreciable para su uso o fabricaci¨®n, como un abrelatas o un juguete. La patente pasa a ser de dominio p¨²blico a los 20 a?os y el modelo de utilidad a los diez a?os.
Protecci¨®n. El dise?o industrial protege la forma bidimensional o tridimensional de los objetos comercializados por una empresa. Tous o Desigual, por ejemplo, protegen as¨ª sus productos.
Signos de distinci¨®n. Las marcas y nombres comerciales son signos exclusivos que diferencian a las empresas de sus competidores. Es un derecho indefinido y su titular puede impedir a otros el uso de signos id¨¦nticos o similares.
Mercados estrat¨¦gicos
Stac vende sus productos en 50 pa¨ªses, pero no los registra en todos. ¡°Solo patentamos en los mercados que son estrat¨¦gicos, porque es caro hacerlo. No merece la pena pagar si vas a vender solo un par de veces en un pa¨ªs¡±, asegura Fern¨¢ndez Padr¨®n. El precio de cada registro va de menos de 100 a casi 3.000 euros por pa¨ªs, incluyendo la asesor¨ªa para hacerlo.
Inscribir la propiedad industrial es complejo. ¡°Cada innovaci¨®n tecnol¨®gica precisa un registro. Un simple aspirador puede tener hasta 20 patentes, y el registro de cada una debe ir acompa?ado de varios documentos, escritos de forma muy precisa y exigente. En casos complejos, aconsejo ir a una asesor¨ªa de propiedad industrial¡±, asegura M¨®nica Castilla.
Atajos burocr¨¢ticos
Hay atajos, la Oficina para la Propiedad Intelectual de la Uni¨®n Europea registra los dise?os y las marcas en la UE, la Oficina Europea de Patentes registra las patentes para el continente y la v¨ªa internacional de toda la propiedad industrial es la Organizaci¨®n Mundial de la Propiedad Intelectual, que abarca de 50 a 140 pa¨ªses, seg¨²n el tipo de registro. ¡°Estas oficinas facilitan el camino porque realizan los tr¨¢mites de los registros en cada Estado, pero las empresas deben pagar el registro en cada uno de ellos¡±, advierte Castilla.
La Oficina Espa?ola de Patentes y Marcas inscribi¨® casi 67.000 modalidades de propiedad industrial en 2016, el 78% de ellas eran marcas nacionales, otros 7.388 eran nombres comerciales y el resto estaba repartido entre patentes, modelos de utilidad y dise?os industriales. Los n¨²meros no corresponden al peso econ¨®mico espa?ol.
Pero ¡°solo el 9% de las pymes europeas registran su propiedad industrial. Y la tasa es menor en Espa?a¡±, puntualiza Ramos.
¡°La Direcci¨®n General de Industria y de la Peque?a y Mediana Empresa (DGIPYME) del Ministerio de Econom¨ªa, la OEPM y la C¨¢mara de Espa?a han creado Cevipyme, el programa de apoyo a la pyme en gesti¨®n de propiedad industrial para cualquiera de los tr¨¢mites que necesite relativos a la propiedad industrial¡±, describe Francisco Jos¨¦ Moreno, jefe de ¨¢rea de la Subdirecci¨®n General de Apoyo a la Pyme de DGIPYME. Adem¨¢s, la Oficina Espa?ola de Patentes y Marcas devuelve hasta el 80% de las tasas pagadas por las empresas, gracias a su programa de subvenciones para patentes, dotado para este a?o con cuatro millones de euros.
¡°El derecho de propiedad industrial es la herramienta para hacer frente a cualquier copia; abre la puerta a inversores, sobre todo a la inversi¨®n extranjera y es imprescindible para franquiciar sin que te copien la actividad o el nombre. Un servicio por Internet debe registrar la marca, el dise?o y la forma de presentar la informaci¨®n de la aplicaci¨®n (app)¡±, resume M¨®nica Castilla. Registrar las patentes y los modelos de utilidad deja al descubierto la informaci¨®n de ambos. La alternativa es el secreto industrial, la UE ha publicado la directiva que lo regula en 2016 y que trasladar¨¢n los estados miembros.