Objetivo: cero emisiones
Los servicios de Alta Velocidad han permitido un ahorro, en sus 25 a?os de funcionamiento, de 12,9 millones de toneladas de CO2 a la atm¨®sfera
Los viajeros suelen preferir el tren por la comodidad, la rapidez, la llegada al centro de la ciudad, la posibilidad de estirar las piernas o de disfrutar relajadamente del paisaje. Si todo esto no fuera suficiente, el usuario responsable deber¨ªa a?adir una raz¨®n m¨¢s: su trayecto en tren es m¨¢s respetuoso con el medio ambiente.
Fernando de la Fuente, gerente de Energ¨ªa, Procesos y Calidad de Renfe, lo explica con un ejemplo concreto: ¡°Una persona que viaja entre Madrid y Barcelona en coche genera de media unas emisiones de 65 kilogramos de di¨®xido de carbono, m¨¢s de 4 veces de las que generar¨ªa en tren. Si lo hace en avi¨®n, multiplicar¨ªa por 7 las emisiones del tren. En t¨¦rminos de emisiones, excluyendo la bicicleta, es el medio de transporte menos contaminante por viajero y kil¨®metro transportado¡±.
El m¨¢s ecol¨®gico
La Alta Velocidad lleg¨® a Espa?a en 1992. Desde aquel 21 de abril, sus 357 millones de usuarios han ahorrado a la sociedad 4.286 millones de euros (hasta el fin de 2016). Esta estimaci¨®n incluye el impacto econ¨®mico sobre el cambio clim¨¢tico, la contaminaci¨®n y la tasa de accidentes. Los beneficios del uso del tren alcanzan tambi¨¦n a las arcas del Estado.
Dejando el dinero a un lado y hablando tan solo de cambio clim¨¢tico y de emisiones a la atm¨®sfera, de no haber existido el tren en Espa?a la suma de los trayectos de esos viajeros en otros medios habr¨ªa generado 12,9 millones de toneladas m¨¢s de CO2, uno de los mayores responsables del efecto invernadero.
Desde 1990, cuando se instaur¨® el Protocolo de Kioto, la huella de di¨®xido de carbono de Renfe ha disminuido en un 56%
Este ahorro en emisiones es posible porque, seg¨²n Fernando de la Fuente, ¡°casi el 90% de la actividad, en t¨¦rminos de toneladas-km brutas realizadas, se desarrolla con tracci¨®n el¨¦ctrica, libre de carbono en la proporci¨®n que facilita el mix el¨¦ctrico nacional. En 2016 la electricidad fue cerca del 60% libre de emisiones de CO2 de las cuales un 38% se obtuvo con renovables limpias, lo que implica que m¨¢s de la mitad de nuestra actividad est¨¢ descarbonizada, como decimos en el argot de la energ¨ªa¡±.
En 1990 se instaur¨® el Protocolo de Kioto que instaba a los pa¨ªses firmantes a reducir sus emisiones. Desde entonces la huella de di¨®xido de carbono de Renfe ha disminuido en un 56%, hasta situarse en 24,2 gramos de CO2 por unidad (pasajero y mercanc¨ªa) transportada y kil¨®metro recorrido, manteniendo activa una estrategia de sostenibilidad y eficiencia energ¨¦tica. Hace 27 a?os, su impacto llegaba hasta los 43,2 gramos. Esta reducci¨®n es motivo de satisfacci¨®n, pero el objetivo final es m¨¢s ambicioso: cero emisiones.
¡°Pensamos¡±, explica De la Fuente, ¡°que es un objetivo alcanzable una vez conseguida la electrificaci¨®n total. A partir de ah¨ª, podr¨ªamos adquirir energ¨ªa exclusivamente certificada como limpia y decir que nos movemos con cero emisiones. Como empresa comprometida con la sociedad, nos preocupa la evoluci¨®n del sistema el¨¦ctrico hacia una energ¨ªa limpia para todos, y no solo para los que paguen un extra en los mercados¡±. Aunque la meta es dif¨ªcil, el gerente de Energ¨ªa de Renfe cree que ¡°ser¨ªa razonable en 10 a 15 a?os completar el Plan de Electrificaci¨®n que estamos dise?ando con ADIF y la renovaci¨®n o adaptaci¨®n del parque di¨¦sel para lograrlo¡±.
¡°Para reducir este consumo¡±, afirma el directivo por correo electr¨®nico, ¡°tenemos en marcha m¨²ltiples proyectos. Los que mayor impacto tendr¨¢n ser¨¢n los referidos a lo que llamamos el combustible oculto, que surge de la ganancia al introducir los sistemas de ayuda a la conducci¨®n eficiente, y los de aprovechamiento de la energ¨ªa procedente del frenado regenerativo. Ambos producen individualmente ahorros que se sit¨²an entre el 10 y el 20%¡±.
Combustibles alternativos
Renfe tambi¨¦n se esfuerza para encontrar nuevos combustibles ¡°para una transici¨®n energ¨¦tica que nos permita¡±, asegura De la Fuente, ¡°aprovechar el parque actual, produciendo menores emisiones. Estamos investigando fuentes como el gas natural o el hidr¨®geno, que permitir¨¢ aprovechar veh¨ªculos di¨¦sel, mediante una electrificaci¨®n indirecta de la demanda, ya que el hidr¨®geno se fabrica con electricidad¡±.
El transporte es el responsable de entre un 23 y un 25% de las emanaciones de gases de efecto invernadero
Seg¨²n los estudios de diversas organizaciones, el transporte es el responsable de entre un 23 y un 25% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) debidos al uso de combustibles. Las previsiones para el futuro hablan de que los movimientos de personas y mercanc¨ªas se duplicar¨¢n en el a?o 2050. Este dato indica con claridad la radical importancia de acometer las acciones necesarias para incrementar la eficiencia energ¨¦tica y la disminuci¨®n de la huella ambiental de los medios de locomoci¨®n.
¡°Debemos pensar¡±, rubrica el responsable de Energ¨ªa de Renfe, ¡°que este compromiso debe pasar por el incremento de cuota de mercado del ferrocarril. Hay un gran potencial de crecimiento, especialmente en mercanc¨ªas, que ayudar¨ªa a cumplir estos objetivos. El paradigma del transporte est¨¢ girando hacia el de la movilidad, con el eje en las necesidades del cliente, que siempre son de puerta a puerta. Esto convierte a todos los modos de transporte en complementarios, e idealmente, utilizando el tren como columna vertebral de este nuevo paradigma¡±.