Un BCE verde y activista
En el F¨®rum de Sintra se escucharon las propuestas ecol¨®gicas y expansionistas que marcar¨¢n el futuro de la entidad
Adem¨¢s de tabular los mensajes de los gobernadores, el F¨®rum de Sintra ¨Cesta vez virtual¨C brinda una impl¨ªcita ¡°forward guidance¡±: una aguja de marear, una hoja de ruta, una orientaci¨®n estrat¨¦gica al mercado sobre la futura pol¨ªtica monetaria. Una tarea hoy esencial de los bancos centrales. Es impl¨ªcita pues la acarrean los acad¨¦micos. Pero su sola selecci¨®n como ponentes, nunca ingenua, marca la pauta.
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Adem¨¢s de tabular los mensajes de los gobernadores, el F¨®rum de Sintra ¨Cesta vez virtual¨C brinda una impl¨ªcita ¡°forward guidance¡±: una aguja de marear, una hoja de ruta, una orientaci¨®n estrat¨¦gica al mercado sobre la futura pol¨ªtica monetaria. Una tarea hoy esencial de los bancos centrales. Es impl¨ªcita pues la acarrean los acad¨¦micos. Pero su sola selecci¨®n como ponentes, nunca ingenua, marca la pauta.
As¨ª que de sus propuestas se percibe el hilo conductor de c¨®mo quiere ser el BCE de Christine Lagarde. Impulsor de la transformaci¨®n verde, patr¨®n de las pol¨ªticas expansionistas, pero sopes¨¢ndolas, defensor de la seriedad fiscal pero alejada del r¨ªgido austeritarismo.
La estrategia ecol¨®gica viene marcada por las apelaciones al manifiesto del Grupo de los 30, que insta a los bancos centrales a ¡°realizar stress tests clim¨¢ticos¡± a los bancos: se trata de que condicionen su actividad prestataria al cumplimiento de unos m¨ªnimos comunes a las empresas. Por eso el holand¨¦s Frederick Van der Ploeg reivindic¨® encarecer las emisiones de di¨®xido de carbono mediante impuestos crecientes; y recomend¨® que el BCE acompa?e a las empresas en su transici¨®n hacia la toxicidad cero, so pena de s¨²bitos descalabros. Para acabar proponiendo que si los grupos de presi¨®n frustran la pol¨ªtica verde, ¡°deber¨ªamos crear un banco central independiente del carbono cuyo primer mandato sea que la temperatura y las emisiones se reduzcan por debajo de sus techos¡±.
El activismo expansionista que incluya a todos los agentes se postul¨® para la pol¨ªtica fiscal, cuando Evi Pappa, de la Universidad Carlos III, evidenci¨® que hay un mejor camino a la seriedad fiscal que el Pacto de Estabilidad: las ¡°reglas de gasto¡± (limitando su crecimiento en relaci¨®n con el del PIB) ¡°han demostrado ser m¨¢s efectivas para reducir la acumulaci¨®n de deuda¡±. O en la discusi¨®n sobre la revisi¨®n del actual objetivo de inflaci¨®n del BCE, ¡°cerca pero por debajo¡± del 2%. El espa?ol Jordi Gal¨ª (de la Pompeu Fabra) defendi¨®, con apoyo del alem¨¢n Klaus Adam (Manheim) la tesis aperturista y pro-expansiva de que ¡°no basta con convertir en sim¨¦trico el objetivo de inflaci¨®n¡± (aproxim¨¢ndose a ¨¦l por encima o por debajo y no solo por debajo), sino que hay que garantizar ¡°un cambio¡± del mismo. Mientras el alem¨¢n Volker Wieland (de la Goethe, en Fr¨¢ncfort) recelaba de ¡°subirlo¡± porque es ¡°enga?oso¡±: ¡°requiere agudizar la pol¨ªtica expansiva¡±. Lentamente, pero se camina.