El desabastecimiento de di¨¦sel en Venezuela eleva las expectativas sobre las futuras decisiones de Biden

La llegada de Joe Biden a la Casa Blanca ha multiplicado las expectativas en Venezuela sobre el comienzo de un nuevo enfoque diplom¨¢tico entre Washington y Caracas y la posibilidad de una relajaci¨®n de las sanciones que la Administraci¨®n de Donald Trump impuso al chavismo. Una de esas restricciones consiste en la ¡°prohibici¨®n¡± del intercambio de crudo venezolano por combustible di¨¦sel del extranjero, necesario para transportar alimentos y otras actividades esenciales para la vida de los ciudadanos. Pero un an¨¢lisis atento de las medidas muestra que no se trataba formalmente de una prohibici¨®n, sino de una decisi¨®n discrecional del expresidente y que lo mejor para Venezuela es que EE UU, simplemente, no haga nada al respecto.

En enero de 2019, Trump endureci¨® las sanciones contra el Gobierno de Nicol¨¢s Maduro, al que llam¨® ¡°corrupto¡±, y aleg¨® que las medidas eran necesarias para que ¡°ya no puedan saquear los activos del pueblo venezolano¡±. Esa decisi¨®n bloque¨® todas las propiedades e intereses de PDVSA, la empresa petrolera del Estado, que son sujetos a la jurisdicci¨®n estadounidense y proh¨ªbe a los ciudadanos estadounidenses realizar transacciones con ellos. Si una empresa desea hacer negocios con PDVSA lo puede hacer, pero las ganancias de la compra de petr¨®leo venezolano son retenidas en una cuenta bancaria en EE UU que pertenece a Citgo, filial de la petrolera en ese pa¨ªs. Esta cuenta est¨¢ bloqueada por la Administraci¨®n estadounidense, por tanto, el Gobierno de Maduro dej¨® de tener acceso a los fondos.

Fue as¨ª como empez¨® el trueque. Si bien no pod¨ªa vender su petr¨®leo a cambio de efectivo, Venezuela pod¨ªa intercambiar su crudo por di¨¦sel. En muchos casos, lo hizo para saldar deudas con empresas refinadoras, por lo que EE UU no interfiri¨®. Para agosto del a?o pasado, el 80% de las entregas programadas de crudo venezolano al exterior eran a trav¨¦s de intercambios de di¨¦sel, de acuerdo con informaci¨®n de Bloomberg. Fue entonces que el Gobierno de Trump perdi¨® la paciencia y dio un plazo a las refinadoras: ten¨ªan hasta octubre para hacer los intercambios. El trueque deb¨ªa terminar.

Esta petici¨®n, sin embargo, no est¨¢ formalmente incluida en las sanciones, por lo que una expectativa de que el Gobierno de Biden permita el trueque de nuevo no es, t¨¦cnicamente, factible. La decisi¨®n anterior de Washington fue discrecional y si el Departamento del Estado bajo la nueva Administraci¨®n quisiera los intercambios pudieran continuar bastar¨ªa que las nuevas autoridades estadounidenses, que con Biden tomaron posesi¨®n el 20 de enero, no interfieran.

¡°Nicol¨¢s Maduro es un dictador¡±, dijo en conferencia de prensa el portavoz del Departamento de Estado Ned Price el 3 de febrero. ¡°El objetivo primordial de la Administraci¨®n Biden-Harris es apoyar una transici¨®n democr¨¢tica y pac¨ªfica en Venezuela a trav¨¦s de elecciones presidenciales y parlamentarias libres y justas¡±, puntualiz¨®. Al ser cuestionado sobre si se buscar¨¢ contacto con el Gobierno venezolano, Price solo dijo que no ser¨ªa pronto.

El tema de los intercambios es uno de los muchos asuntos asociados a las sanciones estadounidenses, dice Patricia Ventura, directora en IPD Latin America, empresa consultora en energ¨ªa. ¡°Nosotros no esper¨¢bamos que la pol¨ªtica de sanciones se ajustara inmediatamente, porque hay otras prioridades muy claras para la Administraci¨®n Biden, pero la flexibilizaci¨®n de las sanciones por razones humanitarias ser¨¢ atendida m¨¢s temprano que tarde. Esto abrir¨ªa la puerta para reanudar los swaps de di¨¦sel¡±, dice la especialista.

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La ansiedad y las expectativas en torno a los trueques se debe a la importancia de este combustible para Venezuela. En un foro en l¨ªnea coordinado por la organizaci¨®n no gubernamental Washington Office on Latin America (WOLA) el 12 de febrero, la representante de la C¨¢mara de Transporte del Centro del Pa¨ªs en Venezuela, Marien Vielma, dijo que el 95% de los insumos en el pa¨ªs son trasladados por v¨ªa terrestre, por lo que utilizan di¨¦sel. ¡°Yo dir¨ªa que el 100% de los bienes, mercanc¨ªas, alimentos, medicinas, todos los bienes y servicios de primera necesidad son despachados, son distribuidos a las zonas vulnerables y a todo el pa¨ªs v¨ªa terrestre¡±, dijo Vielma.

Si en dos o tres meses no se encuentra una soluci¨®n al desabastecimiento de di¨¦sel que actualmente sufre el pa¨ªs, el transporte se paralizar¨¢, apunt¨® Vielma. ¡°Llega el momento en donde tenemos que buscar soluciones porque tenemos una escasez que no est¨¢ discriminando sectores que est¨¢n abarcando toda la econom¨ªa del pa¨ªs¡±, manifest¨®. ¡°Este a?o vemos que las consecuencias van a ser muy fuertes si en el trimestre que viene no resolvemos, si el Gobierno nacional no encuentra una salida, es decir, la entrada de di¨¦sel ac¨¢¡±.

A eso se a?ade la falta de datos, ya que PDVSA no ha publicado informaci¨®n de sus inventarios de di¨¦sel. Las estimaciones de cu¨¢nto di¨¦sel le queda al pa¨ªs para operar var¨ªa. Se sabe que Venezuela import¨® ese combustible hasta noviembre del a?o pasado y que las autoridades est¨¢n intentando aumentar la capacidad instalada de refinaci¨®n, la cual se encuentra actualmente al 13%, dice Ventura.

Venezuela ten¨ªa la capacidad para refinar todos los combustibles que necesitaba, explica el economista Francisco Rodr¨ªguez, pero en los ¨²ltimos a?os se han mezclado la falta de inversi¨®n, de personal calificado, la corrupci¨®n y las sanciones impuestas por EE UU para tumbar la producci¨®n de sus refiner¨ªas. ¡°Hay bastante evidencia de que las sanciones han afectado al funcionamiento de la industria petrolera y la capacidad de refinaci¨®n¡±.

¡°Venezuela era un pa¨ªs que estaba bastante integrado y su sector petrolero estaba bastante integrado con la econom¨ªa norteamericana. Entonces los insumos que Venezuela recibe para sus refiner¨ªas eran principalmente importados de Estados Unidos y a ra¨ªz de las sanciones petroleras esos v¨ªnculos se quebraron. Y cuando t¨² est¨¢s sancionado por Estados Unidos tampoco es tan f¨¢cil conseguir que te vendan estas cosas en otro lado¡±, dice Rodr¨ªguez.

No se trata de que el Gobierno de Biden ahora ¡°se haga de la vista gorda¡±, opina Rodr¨ªguez, porque eso podr¨ªa sugerir que hay alguna irregularidad o violaci¨®n a la ley que han decidido ignorar. Si bien Maduro est¨¢ evadiendo una prohibici¨®n impuesta por EE UU, lo que est¨¢ haciendo no es estrictamente ilegal. ¡°Lo que pasa es que EE UU tiene la capacidad de castigar a las empresas que hacen negocios con ¨¦l, con sus propios instrumentos, que son discrecionales, son instrumentos de pol¨ªtica¡±.

Rodr¨ªguez, a trav¨¦s de su fundaci¨®n Petr¨®leo por Venezuela, aboga para que se cree un mecanismo en que las empresas puedan intercambiar petr¨®leo venezolano por alimentos o medicinas sin ser sancionados por EE UU, lo cual requerir¨ªa que la distribuci¨®n de los recursos sea supervisada por la comunidad internacional. ¡°Este no deber¨ªa ser un tema solo con respecto al di¨¦sel, deber¨ªa ser un tema que se discutiese m¨¢s ampliamente con todo lo que afecta la crisis humanitaria venezolana¡±, dice el economista.

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