La justicia europea ratifica la multa de 2.424,5 millones a Google por vulnerar la competencia
El Ejecutivo comunitario sancion¨® al gigante tecnol¨®gico por privilegiar sus productos en los resultados de su buscador
El Tribunal General de la Uni¨®n Europea (TGUE) ha dado un espaldarazo a la Comi¨®n Europea al fallar este mi¨¦rcoles contra Google en el litigio que est¨¢ librando con Bruselas en torno a la sanci¨®n de 2.424,5 millones que la Comisi¨®n Europea impuso al gigante tecnol¨®gico en 2017 por vulnerar la competencia. El Ejecutivo comunitario concluy¨® entonces que el famoso buscador privilegiaba los productos de su empresa frente a los de los competidores. Los jueces opinan lo mismo: resaltan que la empresa estadounidense ¡°favorece su propio servicio de comparaci¨®n de precios en la muestra general de resul...
El Tribunal General de la Uni¨®n Europea (TGUE) ha dado un espaldarazo a la Comi¨®n Europea al fallar este mi¨¦rcoles contra Google en el litigio que est¨¢ librando con Bruselas en torno a la sanci¨®n de 2.424,5 millones que la Comisi¨®n Europea impuso al gigante tecnol¨®gico en 2017 por vulnerar la competencia. El Ejecutivo comunitario concluy¨® entonces que el famoso buscador privilegiaba los productos de su empresa frente a los de los competidores. Los jueces opinan lo mismo: resaltan que la empresa estadounidense ¡°favorece su propio servicio de comparaci¨®n de precios en la muestra general de resultados con una posici¨®n y una visualizaci¨®n m¨¢s favorable, mientras relegaba los mismos servicios de la competencia¡±, seg¨²n la nota emitida por la corte comunitaria. El fallo no es definitivo, ya que puede recurrirse ante el Tribunal de Justicia de la UE (TJUE), la instancia superior.
La multa asciende a algo m¨¢s de 2.400 millones, de los cuales 523,5 millones tiene que asumirlos Alphabet, la sociedad matriz de Google. El caso comenz¨® en 2015, cuando el departamento de Competencia, ya dirigido por Margrethe Vestager, abri¨® una investigaci¨®n a Google por privilegiar sus propios productos, como Google Shopping, el comparador de precios, en el famoso buscador. Dos a?os despu¨¦s se tradujo en la que hasta ese momento era la sanci¨®n m¨¢s cuantiosa impuesta por el Ejecutivo comunitario. El fallo de la justicia europea da aliento a Vestager despu¨¦s de haber recibido varios varapalos de Luxemburgo respecto a varios casos vinculados a la concesi¨®n ayudas de Estados que Bruselas cre¨ªa ilegales, entre ellos el de Apple por parte de Irlanda.
A la hora de sustentar sus argumentos, el TGUE parte de tres puntos: el primero es la importancia del tr¨¢fico que genera Google; el siguiente es la actitud de los usuarios, que suelen focalizarse solo en los primeros resultados que ofrece el buscador, y, por ¨²ltimo, en que la audiencia que lleva Google no puede ser sustituida efectivamente, y eso debilita la competencia. A?aden los magistrados que ¡°la vocaci¨®n universal del motor de b¨²squeda general de Google, dise?ado para indexar resultados con cualquier contenido posible¡± convierte en ¡°una anormalidad¡± la promoci¨®n de los productos de Google frente a otros.
¡°Incluso si los resultados de otros comparadores de precios son m¨¢s relevantes, ellos nunca podr¨ªan recibir el mismo tratamiento que el recibido por el servicio de Google en el posicionamiento o en la visualizaci¨®n [en pantalla]¡±, denuncian los magistrados. Estos, adem¨¢s, rechazan los argumentos de la empresa porque se?alan que la Comisi¨®n encontr¨® suficiente base como para demostrar que el tr¨¢fico que generaba el buscador no se pod¨ªa sustituir a trav¨¦s de anuncios o aplicaciones y que fue eso, y no la innovaci¨®n, lo que provoc¨® el debilitamiento de la competencia.
Para concluir que Google vulneraba la competencia, los t¨¦cnicos de la Comisi¨®n rastrearon 1.300 millones de b¨²squedas desde 2008 y encontraron ¡°evidencias¡± de que en un 90% de las ocasiones los productos de los competidores eran mucho menos visibles en los resultados del buscador que los propios de Alphabet. ¡°Hoy los jueces env¨ªan un claro mensaje de que la conducta de Google era ilegal y aportan la claridad necesaria para el mercado¡±, ha subrayado este mi¨¦rcoles la Comisi¨®n en su reacci¨®n a la sentencia.
Hasta 2015, la Comisi¨®n hab¨ªa tratado de llegar a acuerdos con el gigante tecnol¨®gico para resolver la situaci¨®n, pero hace seis a?os cambi¨® de estrategia y opt¨® por abrir expedientes que se han traducido en importantes multas, como esta sobre la que ha fallado el Tribunal General de la Uni¨®n Europea. A partir de entonces llegaron m¨¢s sanciones. El grupo Alphabet, la firma matriz del grupo de Google, acumula una factura de 8.240 millones por lo que Bruselas entiende que son vulneraciones a la competencia.
Entre los castigos a Alphabet pendientes de confirmar en los tribunales de Luxemburgo hay un expediente que concluy¨® en 2018 con una multa que pr¨¢cticamente dobla a la de esta sentencia, de 4.343 millones. Es la que le impuso el departamento de Vestager por obligar a los fabricantes de tel¨¦fonos m¨®viles a instalar de serie sus aplicaciones si quer¨ªan contar con el sistema operativo Android. Este caso recuerda mucho al que, en los albores de internet, enfrent¨® a Bruselas con Microsoft cuando instalaba en los ordenadores personales el navegador Internet Explorer con el sistema operativo Windows, una pol¨ªtica comercial que perjudic¨® mucho a Netscape, el navegador m¨¢s utilizado entonces.
La factura europea de Google podr¨ªa crecer en el futuro, ya que la Comisi¨®n abri¨® en junio otra investigaci¨®n al gigante tecnol¨®gico. Esta vez el expediente se centra en determinar si recurre a pr¨¢cticas monopol¨ªsticas en el mercado de la publicidad.