Krugman: ¡°No creo que vayamos a una crisis como la de los setenta¡±
El premio Nobel de Econom¨ªa calcula que la inflaci¨®n se relajar¨¢ en un a?o y duda de que el BCE deba subir los tipos de inter¨¦s
Paul Krugman (Albany, 69 a?os) atiende a EL PA?S antes de sacar el port¨¢til para escribir su columna en The New York Times. Acaba de abrir el Congreso Internacional del Cooperativismo, Econom¨ªa Social y Econom¨ªa P¨²blica (CIRIEC), celebrado en Valencia, donde ha puesto ¨¦nfasis sobre todo en las desigualdades sociales.
Pregunta. La desigualdad es uno de los grandes legados de la crisis financiera en Espa?a. ?La inflaci¨®n puede acentuarla?
Respuesta. No est¨¢ claro. En Estados Unidos hemos tenid...
Paul Krugman (Albany, 69 a?os) atiende a EL PA?S antes de sacar el port¨¢til para escribir su columna en The New York Times. Acaba de abrir el Congreso Internacional del Cooperativismo, Econom¨ªa Social y Econom¨ªa P¨²blica (CIRIEC), celebrado en Valencia, donde ha puesto ¨¦nfasis sobre todo en las desigualdades sociales.
Pregunta. La desigualdad es uno de los grandes legados de la crisis financiera en Espa?a. ?La inflaci¨®n puede acentuarla?
Respuesta. No est¨¢ claro. En Estados Unidos hemos tenido un crecimiento salarial mucho mejor en las rentas inferiores que en las superiores. En realidad, hemos reducido la desigualdad salarial. Hay alg¨²n problema con los grandes beneficios de las petrol¨ªferas, pero no es el caso de Espa?a. El problema no va a ser ese, sino que la gente ver¨¢ una reducci¨®n de sus ingresos reales.
P. El ¨²ltimo World Inequality Report apunta a que las medidas contra la pandemia incluso permitieron reducir la pobreza en EE UU...
R. Desafortunadamente, muchos de esos programas ya han expirado.
P. Pero, ?eso no confirma que la reducci¨®n de la desigualdad o la pobreza es una decisi¨®n claramente pol¨ªtica?
R. Mucho. En medio de la pandemia hemos sido capaces de reducir la pobreza en medio de un desempleo masivo. Y sin un impacto econ¨®mico adverso. Eso nos dice que es una decisi¨®n pol¨ªtica, que no es necesario tener todo ese sufrimiento. Por desgracia, al menos por ahora, se ha tomado la decisi¨®n pol¨ªtica de permitir que la pobreza vuelva a aumentar.
P. Esper¨¢bamos un rebote fuerte de la econom¨ªa, pero la invasi¨®n de Ucrania y la inflaci¨®n han acabado por aguar la fiesta. ?Vamos a una estanflaci¨®n?
R. Probablemente tendremos algo que se podr¨¢ llamar estanflaci¨®n, pero no creo que vayamos a una situaci¨®n como la de la d¨¦cada de 1970. No hay ninguna se?al de una espiral de precios y salarios. La econom¨ªa de Estados Unidos parece estar sobrecalentada, con una inflaci¨®n subyacente del 4%, y necesitamos enfriarla. Eso significa subir tipos. Pero no creo que se produzca una recesi¨®n grave y la inflaci¨®n bajar¨¢ de una forma relativamente r¨¢pida.
P. ?Cu¨¢ndo?
R. Dentro de un a?o podr¨ªa estar en el 3%.
P. Pero los ciudadanos van ahora al supermercado y ven que el aceite de oliva se ha encarecido un 40%. ?Qu¨¦ se puede hacer?
R. La Reserva Federal ya est¨¢ subiendo los tipos. Estoy algo m¨¢s desconcertado respecto a Europa. No estoy muy seguro de lo que est¨¢ haciendo el BCE, porque la inflaci¨®n subyacente en Europa parece m¨¢s baja que la de Estados Unidos. En Europa es pr¨¢cticamente un shock de oferta puro. No me queda claro por qu¨¦ los tipos de inter¨¦s deben subir. Y, sin embargo, los mercados piensan que el BCE los subir¨¢ tanto como esperan que los suba la Reserva Federal.
P. El BCE ya ha anunciado una subida para julio y otra para septiembre. Y es solo el principio.
R. Pero se apuesta a un incremento de 300 puntos b¨¢sicos a ambos lados del Atl¨¢ntico. Entiendo los temores de Lagarde, pero creo que tal vez el BCE est¨¦ exagerando.
P. El BCE est¨¢ llamando a controlar las subidas salariales para evitar una espiral inflacionista. ?Qu¨¦ le parece?
R. El problema no es que los salarios comiencen a reflejar los precios, sino que la gente empiece a basar sus decisiones sobre precios y sueldos en la expectativa de que la inflaci¨®n continuar¨¢ siendo alta.
P. La subida de tipos ha disparado ya las primas de riesgo del sur de Europa. ?Est¨¢n justificados los temores a otra crisis de la deuda como la de 2010?
R. No lo veo. No creo que la carga real del servicio de la deuda en Espa?a sea alta. Los mercados no deber¨ªan desconfiar de Espa?a. Tal vez los mercados est¨¢n temiendo otra crisis de liquidez. La ¨²ltima vez, Mario Draghi la liquid¨® con tres palabras: whatever it takes (lo que sea necesario). Tal vez tengan miedo de que el BCE no vuelva a repetirlas. Pero, en realidad, esos diferenciales reflejan m¨¢s una crisis pol¨ªtica que econ¨®mica, sobre la voluntad de Europa de dar los pasos necesarios para mantener la estabilidad del euro.
P. Este a?o hay elecciones legislativas de medio mandato en EE UU. ?Cree que la inflaci¨®n va a castigar a los dem¨®cratas?
R. Es posible que los asuntos sociales, como el aborto, acaben rescatando a los dem¨®cratas. Pero probablemente paguen un precio por la inflaci¨®n. Y es extremadamente injusto. Se puede decir que Biden gast¨® demasiado. Pero la gente est¨¢ disgustada por el precio de la gasolina. Y sobre eso ¨¦l no tiene el control.
P. Pero la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, s¨ª dijo que la inflaci¨®n no iba a descontrolarse.
R. No sab¨ªamos que Rusia iba a invadir Ucrania. El petr¨®leo y los precios de los alimentos han subido por acontecimientos que son completamente externos al Gobierno de EE UU. Pero los votantes van a pensar cu¨¢nto les cuesta llenar su dep¨®sito y puede que culpen al presidente. Biden pagar¨¢ un precio pol¨ªtico por las acciones de Vlad¨ªmir Putin.