La ONU aprueba negociar un nuevo marco fiscal global con el rechazo de EE UU y la UE

Las econom¨ªas en desarrollo se han apuntado un tanto: la mayor¨ªa de los miembros de la ONU ha aprobado este mi¨¦rcoles negociar un nuevo marco fiscal global en el seno del organismo. La resoluci¨®n, lanzada el a?o pasado por el grupo de pa¨ªses africanos capitaneados por Nigeria, ha recibido 125 s¨ªes, 9 abstenciones y 48 noes. Los rechazos han llegado de los pa¨ªses ricos, como EE UU, UE, Corea del Sur o Australia, que ya hab¨ªan anunciado que votar¨ªan en contra. Estos Estados son tambi¨¦n miembros de la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®micos (OCDE), que ...

Las econom¨ªas en desarrollo se han apuntado un tanto: la mayor¨ªa de los miembros de la ONU ha aprobado este mi¨¦rcoles negociar un nuevo marco fiscal global en el seno del organismo. La resoluci¨®n, lanzada el a?o pasado por el grupo de pa¨ªses africanos capitaneados por Nigeria, ha recibido 125 s¨ªes, 9 abstenciones y 48 noes. Los rechazos han llegado de los pa¨ªses ricos, como EE UU, UE, Corea del Sur o Australia, que ya hab¨ªan anunciado que votar¨ªan en contra. Estos Estados son tambi¨¦n miembros de la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®micos (OCDE), que tiene en marcha un proceso de reforma de la fiscalidad internacional desde hace a?os y que nunca ha ocultado sus recelos hacia la iniciativa que se ha madurado en la ONU.

Parad¨®jicamente, las negociaciones en la OCDE han sido el detonante de la propuesta de los pa¨ªses africanos, frustrados, al igual que muchas econom¨ªas emergentes, por la lentitud de los trabajos y su progresiva p¨¦rdida de ambici¨®n que, consideran, les perjudica de manera directa en pro de los pa¨ªses ricos.

El secretario general de la ONU, el portugu¨¦s Ant¨®nio Guterres, reconoci¨® el pasado verano los esfuerzos hechos hasta ahora por la instituci¨®n con sede en Par¨ªs, pero record¨® que muchos pa¨ªses que participan en las conversaciones perciben ¡°barreras significativas¡± a su participaci¨®n en el proceso. ¡°Como resultado, las reglas sustantivas desarrolladas a trav¨¦s de estas iniciativas de la OCDE a menudo no abordan adecuadamente las necesidades y prioridades de los pa¨ªses en desarrollo y/o est¨¢n m¨¢s all¨¢ de sus capacidades para implementarlas¡±, asegur¨® en un comunicado.

La OCDE, que cuenta entre sus socios con las econom¨ªas m¨¢s avanzadas del mundo, lleva casi una d¨¦cada liderando las conversaciones internacionales en materia fiscal. Uno de sus trabajos m¨¢s ambiciosos gira en torno a c¨®mo elevar la carga tributaria de las multinacionales, expertas en rebajar su factura en impuestos a trav¨¦s de cada vez m¨¢s sofisticados juegos de ingenier¨ªa fiscal. Hace m¨¢s de dos a?os, logr¨® poner de acuerdo a m¨¢s de 140 pa¨ªses y jurisdicciones en torno a dos pilares: un tipo m¨ªnimo del 15% en el impuesto de sociedades para las mayores corporaciones del globo y un reparto m¨¢s equitativo de sus beneficios, para que tributen tambi¨¦n en los territorios donde no tienen presencia f¨ªsica, pero s¨ª clientes y actividades.

El acuerdo, tachado como hist¨®rico tanto por los fervientes defensores del organismo multilateral como por los m¨¢s esc¨¦pticos, no se ha traducido sin embargo en una r¨¢pida implementaci¨®n de las medidas. El entusiasmo se ha topado con los escollos t¨¦cnicos y las reticencias de pa¨ªses como EE UU, sede de las mayores multinacionales del mundo y de las grandes tecnol¨®gicas, que ha puesto sucesivas pegas y rebajado el alcance del pacto, al punto que ya hay dudas sobre si el primer pilar del acuerdo ¡ªla redistribuci¨®n de parte de los beneficios de los grandes grupos¡ª ver¨¢ en alg¨²n momento la luz.

Con estos mimbres, el bloque africano tom¨® la iniciativa en la ONU. Hace justo un a?o, en noviembre de 2022, se adopt¨® por consenso la resoluci¨®n de la Asamblea General Promoci¨®n de una Cooperaci¨®n Fiscal Internacional Inclusiva y Eficaz de las Naciones Unidas, el primer paso para crear un marco vinculante en el seno de la ONU sobre fiscalidad internacional en sentido amplio, no solo enfocado a la tributaci¨®n de las multinacionales.

¡°Es una posici¨®n m¨¢s abierta, mucho m¨¢s social y no solo pol¨ªtica¡±, defend¨ªa hace unas semanas el director de la plataforma independiente Tax Justice Network, Alex Cobham, quien corrobora que las econom¨ªas en desarrollo se han incorporado tarde a las negociaciones de la OCDE sobre la fiscalidad de las multinacionales y no han tenido voz. ¡°Esta es una victoria hist¨®rica lograda por los pa¨ªses del Sur global en beneficio de personas de todo el mundo. Los para¨ªsos fiscales y los lobbistas corporativos han tenido demasiada influencia en la pol¨ªtica fiscal global de la OCDE durante demasiado tiempo. Hoy comenzamos a recuperar el poder sobre las normas fiscales globales que nos afectan a todos¡±, ha a?adido este mi¨¦rcoles¡±, destaca.

Susana Ruiz, responsable de Justicia Fiscal en Oxfam, tambi¨¦n aplaude el resultado, pero alerta de que la falta de apoyo por parte de los pa¨ªses ricos es una ¡°mala¡± se?al. ¡°Demuestra que quieren mantener el monopolio del espacio donde se decide¡± el futuro de las reglas tributarias internacionales. Y a?ade: ¡°Hubiera sido mejor una aprobaci¨®n con consenso, porque ahora se va a negociar una convenio con los pa¨ªses ricos en contra. Es como aprobar una Constituci¨®n sin unanimidad¡±.

Fecha l¨ªmite

El pasado octubre, los pa¨ªses africanos presentaron un nuevo borrador de resoluci¨®n que da seguimiento al anterior, que es el que se ha votado este mi¨¦rcoles en Nueva York. En este, se propone que los Estados miembros de la ONU elijan un comit¨¦ intergubernamental ad hoc para elaborar un convenio general sobre cooperaci¨®n fiscal internacional, y que este finalice su trabajo a m¨¢s tardar en junio de 2025. Este proyecto se ha estado revisando y este mi¨¦rcoles era la fecha l¨ªmite para votarlo.

En concreto, hab¨ªa que contestar a una serie de preguntas: si se deben iniciar las negociaciones para alcanzar el primer acuerdo global sobre cooperaci¨®n fiscal internacional, si los pa¨ªses tienen que participar en condici¨®n de igualdad cuando se toman decisiones sobre la materia y si estas negociaciones deber¨ªan considerar aspectos como el desarrollo sostenible o la desigualdad. Tras la aprobaci¨®n de este mi¨¦rcoles, el pr¨®ximo paso es fijar un presupuesto para implementar el proyecto.

El convenio que persiguen los pa¨ªses en desarrollo proyecta una estructura de gobernanza fiscal global en la que todos los pa¨ªses tengan igualdad, la mejora de la cooperaci¨®n en materia tributaria, el endurecimiento de la lucha contra la evasi¨®n fiscal o la introducci¨®n de una estructura que sirva para transitar de forma gradual hacia objetivos m¨¢s detallados. Eso sin tener a¨²n claro cu¨¢l ser¨ªa su formato, pero con una aspiraci¨®n a convertirse en el director de orquesta y quitarle la batuta a la OCDE.

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