Desigual reparto de la mejora econ¨®mica

Las dificultades para llevar a la pr¨¢ctica el acuerdo entre el Gobierno de coalici¨®n y los sindicatos mayoritarios CC OO y UGT, para reducir la semanal laboral desde las 40 horas semanales hasta las 37,5 horas ha puesto sobre la mesa la cuesti¨®n de c¨®mo se reparten los beneficios del crecimiento econ¨®mico. La mejora de la econom¨ªa espa?ola considerada en su conjunto es una realidad certificada por los organismos internacionales ...

Las dificultades para llevar a la pr¨¢ctica el acuerdo entre el Gobierno de coalici¨®n y los sindicatos mayoritarios CC OO y UGT, para reducir la semanal laboral desde las 40 horas semanales hasta las 37,5 horas ha puesto sobre la mesa la cuesti¨®n de c¨®mo se reparten los beneficios del crecimiento econ¨®mico. La mejora de la econom¨ªa espa?ola considerada en su conjunto es una realidad certificada por los organismos internacionales desde la OCDE a la Comisi¨®n Europea. La creaci¨®n de 2,3 millones de empleos netos desde 2018 y la notable mejora de financiaci¨®n de la deuda p¨²blica son datos que bien sintetizan esta realidad. Espa?a es hoy un pa¨ªs m¨¢s fiable en el escenario internacional, como lo refleja que se financia a precios m¨¢s bajos que Francia o el Reino Unido.

Al mismo tiempo, tambi¨¦n resulta incuestionable que estas ganancias de la econom¨ªa se reparten de manera muy desigual e injusta. En 2024, la situaci¨®n de la exclusi¨®n social afectaba a 9,4 millones de personas, (19,3% de la poblaci¨®n), dos millones m¨¢s que en 2007, cuando los excluidos representaban el 16,4%, seg¨²n el informe de An¨¢lisis y Perspectivas del pasado diciembre de la Fundaci¨®n FOESSA, vinculada a C¨¢ritas.

Es evidente que la econom¨ªa no va bien para todos. El prop¨®sito del acuerdo entre Gobierno y sindicatos para reducir el tiempo de trabajo es reequilibrar las ganancias del crecimiento econ¨®mico. Se justifica como una medida redistributiva de los notables aumentos de productividad registrados en los ¨²ltimos a?os. Con datos de la OCDE, el acuerdo se?ala que la productividad por hora trabajada en Espa?a aument¨® en un 30% entre 1990 y 2022, mientras que los salarios reales solo lo hicieron un 11,5%.

Natalia Arias P¨¦rez, economista del gabinete econ¨®mico de Comisiones Obreras sostiene que ¡°las ganancias de productividad conseguidas en los ¨²ltimos a?os se est¨¢n redistribuyendo de forma muy desequilibrada¡±. Proporciona numerosos datos para argumentarlo: ¡°Adem¨¢s de la OCDE, tambi¨¦n la Comisi¨®n Europea estima que en el mismo periodo las ganancias de productividad crecieron un 24%, mientras que los salarios lo hicieron un 10%. Y tambi¨¦n la Contabilidad Nacional con datos del periodo 1995 -2023, registra notables diferencias entre un aumento de la productividad del 16% y de los salarios del 10%¡±.

La economista precisa que esta desigualdad tambi¨¦n se observa en la distribuci¨®n del valor a?adido de la econom¨ªa entre capital y trabajo. Los datos de la Comisi¨®n Europea indican que la cuota de los salarios ha disminuido desde el 60,3% en 1990 a 55,9% en 2022. ¡°Hay que tener en cuenta¡±, recuerda Arias, ¡°que el reparto mejor¨® entre 2018 y 2022, en 2,8 puntos gracias a la pol¨ªtica laboral del Gobierno, las medidas de escudo social y la recuperaci¨®n econ¨®mica¡±. En su opini¨®n ¡°las medidas como el aumento del SMI o la reducci¨®n de jornada son una forma de decir a las empresas que tienen de competir de otra manera¡±.

La reducci¨®n de jornada y el aumento de recursos para los m¨¢s necesitados van de la mano para construir una sociedad m¨¢s justa y sostenible.