Jugando se ahorra mejor (y aprenden tus hijos)

Ahorrar no es f¨¢cil. Conlleva esfuerzo y sacrificio, pero hay una buena noticia: es posible darle la vuelta y convertirlo en un juego. La gamificaci¨®n, es decir, la aplicaci¨®n de din¨¢micas l¨²dicas, ayuda transformar el ahorro en una herramienta ¨²til y entretenida.

"La gamificaci¨®n ayuda a conseguir la implicaci¨®n de las personas en los procesos, sean de ahorro, de trabajo o de cualquier ¨ªndole. En los momentos m¨¢s cr¨ªticos de la historia (guerras, hambruna...) el juego ha servido para sobrevivir a las carencias m¨¢s elementales¡±, resalta Jos¨¦ Luis Oros, creador de la app social Pensumo. El juego, adem¨¢s, ¡°funciona especialmente bien en tareas como el ahorro¡±, explica Salvador Casquero, profesor de Innovaci¨®n Digital y Fintech del IEB. ¡°Gastar es m¨¢s f¨¢cil que tener buenos h¨¢bitos en la gesti¨®n de nuestro dinero¡±, a?ade. Estos m¨¦todos de ahorro son tambi¨¦n una buena herramienta para que los ni?os comiencen a familiarizarse con el funcionamiento de la econom¨ªa a peque?a escala.

Casquero menciona entre las iniciativas pioneras el caso, a comienzos de esta d¨¦cada, del DSK Bank de Bulgaria que "fue uno de los primeros bancos que lanz¨® este concepto con el DSK Gameo", una aplicaci¨®n que premiaba mediante un sistema de puntos a los clientes que ahorraban. Estos pod¨ªan ganar entradas a conciertos o eventos deportivos, o cheques regalo.

Otros ejemplos son Mint, en Estados Unidos, o Fintonic aqu¨ª en Espa?a. Esta ¨²ltima busca que el usuario se relacione de manera m¨¢s amable y atractiva con su situaci¨®n financiera. La herramienta felicita al usuario si cumple su presupuesto o env¨ªa alertas de descubierto para evitar ser penalizado por el banco y avisos de recibos duplicados para reclamar si fuera necesario. Es ideal para organizar los gastos.

Objetivos concretos

Otra de las primeras en aplicar estas t¨¦cnicas fue la web Smartpig, centrada en la gamificaci¨®n para lograr fines peque?os como comprar una bicicleta de monta?a, pagar las vacaciones o reducir el pago mensual de hipoteca. Como ocurre en muchos ¨¢mbitos de la vida, ahorrar es m¨¢s f¨¢cil con objetivos espec¨ªficos porque se visualiza el premio en lugar del proceso.

Compararnos con el pr¨®jimo tambi¨¦n ayuda a motivarnos, de ah¨ª que diversos bancos o webs incentiven el ahorro del cliente contrast¨¢ndolo con tus vecinos -cu¨¢nto gastan ellos y cuanto t¨²- para ver si entras en el juego. Se trata de fomentar la predisposici¨®n humana a la competici¨®n no solo para sufrir en la grada o ganar carreras.

Comparar los logros con el resto, en concreto lo que consigue guardar de media la comunidad de usuarios, es la clave de la app Coinscrap. "El ahorro se considera normalmente algo tedioso o dif¨ªcil de llevar a cabo", admite David Conde, su fundador y partidario de utilizar la gamificaci¨®n para motivar de forma divertida y conseguir ahorrar sin esfuerzo.

?C¨®mo lo logra? Consumiendo. Su app se encarga de redondear cualquier compra que hagas y autom¨¢ticamente transferir esa diferencia a un producto de seguro de vida- ahorro. Es decir, si decides que se redondee al euro m¨¢s cercano -tambi¨¦n puedes determinar que sean dos euros o incluso 10- y si gastas en un men¨² del d¨ªa 11,50 euros, 50 c¨¦ntimos ir¨¢n a la hucha. Lo que hoy parece 'calderilla', con el tiempo se puede convertir en una peque?a fortuna.

Permite, adem¨¢s, establecer retos y adjudicarse premios por cada logro, por ejemplo, "conseguir el dinero para tu pr¨®ximo viaje o para una guitarra el¨¦ctrica o lo que desees y, despu¨¦s, configurar una serie de reglas de ahorro para hacer de ello un juego y ahorrar sin darse cuenta". A esto se a?ade que la aplicaci¨®n busca conjugar esos conceptos "con reglas que suponen un reto para el usuario, por ejemplo, si has dejado de fumar y recaes, puede penalizarse. O incluso para los m¨¢s futboleros, ahorrar si gana su equipo favorito".

?Y si se trata de ahorrar para la jubilaci¨®n?

Aqu¨ª hay que mencionar la laureada Pensumo, nacida hace unos a?os con el objetivo de convertirse en "un nuevo pilar de las pensiones de los que no tienen renta", seg¨²n describe su creador Jos¨¦ Luis Oros.

Esta aplicaci¨®n permite consumir en establecimientos asociados que destinan parte del dinero gastado al plan de ahorro del usuario. Es decir, se ahorra consumiendo. Han conseguido ya el apoyo de grandes almacenes o de las principales webs de compras online, as¨ª como un acuerdo con Strava, una red social para corredores y ciclistas, para transformar las carreras diarias en c¨¦ntimos que a?adir a la hucha.

Pero dado su car¨¢cter de app social con el tiempo han dado un paso m¨¢s y peri¨®dicamente lanzan retos comprometidos en los que tambi¨¦n se puede acumular dinero, por ejemplo, reciclando, leyendo o siendo buenos conductores. "Llevamos m¨¢s de 20.000 reciclajes medidos (fotografiados, identificados, geolocalizados...), miles de lecturas premiadas, decenas de miles de kil¨®metros incentivados", destaca Oros.

Buenos h¨¢bitos desde la infancia

La educaci¨®n financiera es uno de los d¨¦ficits evidentes de los espa?oles, de ah¨ª la necesidad de formarnos en conceptos tan b¨¢sicos como el ahorro. Ese es el objetivo principal de la web Finanzasparatodos, un portal impulsado por la CNMV y el Banco de Espa?a, y que, no pod¨ªa ser de otra forma, incluye un apartado especial, la ludoteca, dedicado a juegos para que ni?os y j¨®venes aprendan a hacer un presupuesto o sepan c¨®mo preservar parte de su dinero. Tambi¨¦n hay otras aplicaciones de iniciativa privada como Agentpiggy.

?Pero c¨®mo jugamos con ellos en casa? Para que los ni?os experimenten y practiquen cuanto antes, nada como incentivarles el ahorro redondeando lo que meten en la hucha. Por cada ocho euros que guarden, los padres ponen dos para llegar al billete. Y, por supuesto, con objetivos claros y alcanzables: un juego para la consola, las zapatillas deportivas preferidas o una entrada para un parque de atracciones.

Tambi¨¦n la competici¨®n con hermanos, primos o incluso entre toda la familia puede funcionar: ?a ver qui¨¦n consigue rellenar antes el bote? Dado que la capacidad de ahorro no es comparable, los padres tendr¨¢n uno m¨¢s grande que los ni?os. ?Qu¨¦ nos jugamos? ?Qu¨¦ tal elegir d¨®nde vamos a merendar el s¨¢bado?

Para los no tan ni?os, la estrategia es ense?arles a diferenciar consumo y ahorro. Para ello, dos huchas: la destinada a comprar a corto plazo y la que tiene como objetivo guardar para afrontar un gasto mayor y que por lo tanto requiere tiempo de ahorro.