Bassam Fattouh: ¡°La pol¨ªtica energ¨¦tica no puede limitarse a la descarbonizaci¨®n¡±
El director del Instituto de Estudios Energ¨¦ticos de la Universidad de Oxford cree que es iluso pensar que la evoluci¨®n hacia un sistema sostenible no va a tener contratiempos y retrasos
Bassam Fattouh (Beirut, L¨ªbano, 49 a?os), es uno de los grandes referentes de la academia en materia energ¨¦tica. Responde desde su despacho de la Universidad de Oxford (Reino Unido), donde coordina todas las investigaciones del centro en ese campo. La conversaci¨®n telef¨®nica se celebra horas despu¨¦s de una charla organizada por la Fundaci¨®n Naturgy y el Real Instituto Elcano sobre la transici¨®n energ¨¦tica. La coyuntura no puede ser m¨¢s oportuna: la invasi¨®n rusa de Ucrania ha roto un buen n¨²mero de paradigmas, ha disparado los ...
Bassam Fattouh (Beirut, L¨ªbano, 49 a?os), es uno de los grandes referentes de la academia en materia energ¨¦tica. Responde desde su despacho de la Universidad de Oxford (Reino Unido), donde coordina todas las investigaciones del centro en ese campo. La conversaci¨®n telef¨®nica se celebra horas despu¨¦s de una charla organizada por la Fundaci¨®n Naturgy y el Real Instituto Elcano sobre la transici¨®n energ¨¦tica. La coyuntura no puede ser m¨¢s oportuna: la invasi¨®n rusa de Ucrania ha roto un buen n¨²mero de paradigmas, ha disparado los precios de la energ¨ªa f¨®sil hasta m¨¢ximos hist¨®ricos, ha desnudado la estrategia de dependencia absoluta de la UE y ha situado la energ¨ªa en el centro de la conversaci¨®n global.
Pregunta.?Al fin, Europa ha dado el paso con un veto parcial al petr¨®leo ruso. ?Se atrever¨¢ tambi¨¦n con el gas?
Respuesta.?Es, sobre todo, una cuesti¨®n de coste: cu¨¢nta presi¨®n est¨¢ dispuesta a soportar. Hasta ahora, lo que hemos visto es que las exportaciones rusas hacia Europa, tanto de crudo como de productos de di¨¦sel y otros derivados, han ca¨ªdo. Pero la raz¨®n principal de ese declive es un fen¨®meno que, b¨¢sicamente, no hemos visto en el pasado: las autosanciones que se han impuesto a s¨ª mismas las empresas [petroleras].
P.?La duda es si Rusia ser¨¢ capaz de redirigir todos esos flujos hacia otras partes del mundo.
R.?Hasta ahora, lo que hemos visto es que el crudo que iba a Europa ha terminado en otros lugares. Pero los costes de transporte y las primas de seguros han subido, y eso afectar¨¢. El caso del gas es completamente distinto: a diferencia del petr¨®leo, no estamos hablando de un combustible l¨ªquido [m¨¢s f¨¢cil de transportar]. Hasta ahora, en contra de todas las expectativas, ha seguido fluyendo y el mercado est¨¢ funcionando bien.
P.?La India se ha convertido en un destino preferente del crudo ruso. ?Le sorprende?
R.?Buena parte de ese petr¨®leo, efectivamente, lo est¨¢n comprando las refiner¨ªas indias. Tambi¨¦n, porque ha coincidido con un momento en el que, debido a los ¨²ltimos cierres [por los brotes de covid-19] en China, la demanda all¨ª ha sido baja. Ahora, con la reapertura de su econom¨ªa, habr¨¢ que ver si tambi¨¦n se hace con parte de ese crudo ruso. Y habr¨¢ que ver, tambi¨¦n, si los europeos acaban considerando sanciones secundarias [sobre los pa¨ªses que sigan comprando crudo ruso]. Eso complicar¨¢ la venta del petr¨®leo ruso a otras partes del mundo.
P.?Durante d¨¦cadas, nadie en Europa ¡ªy, muy particularmente, en Alemania¡ª hizo nada por erradicar o, al menos, reducir la dependencia de la energ¨ªa rusa. ?C¨®mo pudo permitirse algo as¨ª durante tanto tiempo?
R.?La cuesti¨®n de la seguridad energ¨¦tica desapareci¨® de la agenda pol¨ªtica europea durante muchos a?os. Ven¨ªamos de un periodo de mucha estabilidad, abundancia y precios bajos¡ Y eso releg¨® la cuesti¨®n de la seguridad de suministro. Esto ha cambiado por completo: ahora se trata de gestionar un mundo cada vez m¨¢s complejo, en el que la pol¨ªtica energ¨¦tica no puede focalizarse ¨²nicamente en la descarbonizaci¨®n. El desaf¨ªo es mucho mayor, y pueden darse contradicciones entre los diferentes objetivos pol¨ªticos.
P.?El gas natural licuado (GNL) ha permitido salvar el primer embate de la crisis en Europa. ?Podr¨¢ seguir haci¨¦ndolo a futuro?
R.?Europa sol¨ªa ser el ¨²ltimo recurso para el GNL: cuando el resto del mundo hab¨ªa satisfecho sus necesidades energ¨¦ticas, el resto del gas iba a parar all¨ª. Ahora ocurre lo contrario: Europa ha tenido que subir el precio que paga para poder atraer env¨ªos que iban a otras partes del mundo. Desde el punto de vista clim¨¢tico, el riesgo es que ese aumento en el precio global del gas acabe llevando a los pa¨ªses emergentes a quemar m¨¢s carb¨®n.
P.?La Comisi¨®n Europea acaba de publicar un ambicioso plan de reducci¨®n de la dependencia energ¨¦tica de Rusia. ?Es factible o se pasa de optimista?
R.?Unas partes m¨¢s que otras.
P.??Cu¨¢les s¨ª y cu¨¢les no?
R.?Hay cosas que se llevan intentando desde hace tiempo, como la eficiencia, que ahora se podr¨¢ acelerar. Pero eso nos lleva a una cuesti¨®n m¨¢s general sobre la transici¨®n energ¨¦tica: solemos fijarnos ¨²nicamente en la parte de la oferta de energ¨ªa, pero no en el consumo. La gran pregunta es si de verdad vamos a ver un cambio en nuestro comportamiento como consumidores que tambi¨¦n nos pueda llevar a una transici¨®n energ¨¦tica m¨¢s r¨¢pida.
P.?Se empiezan a ver algunas se?ales de destrucci¨®n de demanda coyuntural, por los altos precios. Pero el consumo de gas y petr¨®leo, por ejemplo, sigue creciendo.
R.?Hasta ahora no tenemos ninguna indicaci¨®n de que se haya empezado a erosionar la demanda. M¨¢s bien al contrario: sigue creciendo a?o tras a?o. Tenemos el problema de que no se est¨¢ invirtiendo lo suficiente en gas y petr¨®leo y, a la vez, no se ha acelerado la transici¨®n energ¨¦tica para dejar atr¨¢s los combustibles f¨®siles. Eso solo puede llevar a brechas y dislocaciones [en el mercado] que llevan a precios m¨¢s altos. Queremos dejar atr¨¢s lo f¨®sil muy r¨¢pido, pero la demanda no cae a la velocidad requerida.
P.?Los Estados han desplegado medidas para evitar que todo el golpe recaiga sobre los hogares. ?Es buena idea?
R.?Si se quiere acelerar la transici¨®n energ¨¦tica, hay que permitir que act¨²en las se?ales de precios. Algunas decisiones de los gobiernos est¨¢n frenando, y no acelerando, la transici¨®n energ¨¦tica.
P.?Es el entorno perfecto para los pa¨ªses y las empresas petroleras y gasistas: la demanda se mantiene, e incluso crece, y los precios est¨¢n disparados.
R.?Est¨¢n obteniendo grandes sumas de dinero. Pero la cuesti¨®n es: ?qu¨¦ van a hacer con ¨¦l? Una parte la invertir¨¢n en su negocio tradicional y mucha ir¨¢ a energ¨ªas limpias, aunque, de nuevo, sin embargo, no en la cantidad que ser¨ªa necesaria. Lo que estamos viendo, adem¨¢s, es que una fracci¨®n grande de ese dinero est¨¢ yendo a parar a sus accionistas en forma de dividendos o de recompra de acciones.
P.??Se encuentran estas empresas ante su ¨²ltima oportunidad de vender combustibles f¨®siles a estos precios?
R.?A¨²n no lo sabemos porque el mercado petrolero siempre est¨¢ sujeto a ciclos. Pero hay una cosa clara: si no se invierte lo suficiente y la demanda no cae tan r¨¢pido como mucha gente cre¨ªa que lo har¨ªa, lo que veremos es a los precios manteni¨¦ndose en niveles razonablemente altos. Se ha hablado mucho del peak oil y el peak gas [el punto en el que el consumo y la producci¨®n de crudo y gas natural empezar¨¢ a caer], pero nada parece indicar que est¨¦n a la vuelta de la esquina.
P.?El 80% de la energ¨ªa primaria que se consume hoy en el mundo sigue siendo f¨®sil. ?Cu¨¢ndo cambiar¨¢ esto?
R.?Depender¨¢ de la velocidad a la que se haga la transici¨®n energ¨¦tica. No deber¨ªamos, de todas formas, pensar en clave global cuando hablamos de transici¨®n energ¨¦tica: va mucho m¨¢s r¨¢pido en unas partes del mundo que en otras, en las que la prioridad sigue siendo la asequibilidad o la capacidad de acceso. Es ilusorio pensar que las tendencias que estamos viendo en Europa se dar¨¢n en todo el mundo. Como tambi¨¦n lo es pensar que no vayamos a tener contratiempos y retrasos, como sucede con la invasi¨®n rusa de Ucrania.