A Unilever se le indigesta el helado
El grupo vende el negocio israel¨ª de Ben & Jerry¡¯s despu¨¦s de suspender las ventas en las zonas palestinas ocupadas
Unilever defiende el prop¨®sito en sus marcas con el argumento de que impulsa el crecimiento. Esta filosof¨ªa se le volvi¨® en contra cuando Ben & Jerry¡¯s, la filial del gigante del consumo valorado en 116.000 millones de d¨®lares, suspendi¨® las ventas en los territorios palestinos ocupados alegando que operar all¨ª era incompatible con sus valores. El jefe Alan Jope ha arreglado el desaguisado ...
Unilever defiende el prop¨®sito en sus marcas con el argumento de que impulsa el crecimiento. Esta filosof¨ªa se le volvi¨® en contra cuando Ben & Jerry¡¯s, la filial del gigante del consumo valorado en 116.000 millones de d¨®lares, suspendi¨® las ventas en los territorios palestinos ocupados alegando que operar all¨ª era incompatible con sus valores. El jefe Alan Jope ha arreglado el desaguisado con la venta de la rama israel¨ª de Ben & Jerry¡¯s al titular de su licencia de producci¨®n nacional. Pero la autonom¨ªa del fabricante de Phish Food y Cookie Dough significa que las tensiones muy bien podr¨ªan reaparecer. La controversia en torno a Ben & Jerry¡¯s nace de la adquisici¨®n por parte de Unilever, por valor de 326 millones de d¨®lares, en el a?o 2000, que dio a la junta directiva de la marca hipster m¨¢s independencia que a una filial normal. Al comunicar a su licenciatario israel¨ª que no renovar¨ªa sus acuerdos el a?o pasado, el resultado ideal de la filial habr¨ªa sido, presumiblemente, movilizar a los clientes para que presionaran a Jerusal¨¦n hacia un cambio de pol¨ªtica. En vez de eso, Jope se enfrent¨® a la reacci¨®n de los accionistas estadounidenses, entre ellos el activista y nuevo miembro del consejo de administraci¨®n Nelson Peltz. Los fondos de pensiones de Estados como Colorado y Nueva York se plantearon salir de Unilever porque sus propias pol¨ªticas proh¨ªben el boicoteo a Israel. Avi Zinger, cuyo fabricante ha comprado ahora el negocio, tambi¨¦n ha demandado a Ben & Jerry¡¯s alegando que la ruptura de su relaci¨®n de 34 a?os era ilegal.
La venta era la ¨²nica forma pr¨¢ctica de que Jope saliera de una situaci¨®n que no ten¨ªa salida. Le permite apaciguar al Gobierno israel¨ª y a sus enojados accionistas, adem¨¢s de obtener una suma no revelada por la venta. Mientras tanto, los accionistas de Ben & Jerry¡¯s que pensaban que la marca ten¨ªa raz¨®n al sancionar a Jerusal¨¦n no deber¨ªan boicotear a sus helados. El acuerdo har¨¢ que Ben & Jerry¡¯s aparezca en las estanter¨ªas de las tierras ocupadas por Israel con nombres en hebreo y ¨¢rabe en vez de en ingl¨¦s. Pero el problema subyacente de una estructura en la que Unilever conserva la responsabilidad principal de las decisiones financieras y operativas, mientras que subcontrata las decisiones sociales a Ben & Jerry¡¯s, sigue presente. No hay ninguna garant¨ªa de que este tipo de disputas internas perjudiciales no vuelvan a surgir.
PARA M?S INFORMACI?N: BREAKINGVIEWS.REUTERS.COM Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducci¨®n es responsabilidad de EL PA?S