Extrema derecha al poder: ?qu¨¦ dice la evidencia emp¨ªrica?

El pr¨®ximo domingo 23 de julio, Espa?a celebrar¨¢ una de las elecciones generales m¨¢s importantes de su historia. Las encuestas proyectan que Vox, una formaci¨®n pol¨ªtica de extrema derecha, podr¨ªa recibir el respaldo de una parte significativa del electorado. Hasta hace no mucho tiempo, Espa?a se distingu¨ªa como uno de baluartes europeos sin partidos de extrema derecha relevantes. Hoy, en cambio, hay un riesgo real que Espa?a se convierta en un...

El pr¨®ximo domingo 23 de julio, Espa?a celebrar¨¢ una de las elecciones generales m¨¢s importantes de su historia. Las encuestas proyectan que Vox, una formaci¨®n pol¨ªtica de extrema derecha, podr¨ªa recibir el respaldo de una parte significativa del electorado. Hasta hace no mucho tiempo, Espa?a se distingu¨ªa como uno de baluartes europeos sin partidos de extrema derecha relevantes. Hoy, en cambio, hay un riesgo real que Espa?a se convierta en uno de los pocos pa¨ªses europeos donde un partido de extrema derecha pasa a formar parte de un Gobierno de coalici¨®n en el Ejecutivo central.

En los ¨²ltimos a?os, han surgido numerosos estudios en ciencias sociales que intentan dilucidar los factores que hacen que una parte significativa del electorado se sienta atra¨ªda por estos planteamientos pol¨ªticos. Otra pregunta tan o m¨¢s relevante es evaluar las consecuencias econ¨®micas y sociales de la llegada al poder de este tipo de formaciones. ?Qu¨¦ dice la evidencia emp¨ªrica al respecto?

Un reciente estudio de Funke, Schularick y Trebesch, que se publicar¨¢ pr¨®ximamente en la American Economic Review ¡ªuna de las principales revistas en ciencia econ¨®mica¡ª, analiza las consecuencias econ¨®micas que acarrea la ascensi¨®n al poder de l¨ªderes populistas, tanto de extrema izquierda como de extrema derecha. Uno de sus primeros resultados es documentar el espectacular avance de este tipo de l¨ªderes: mientras que a finales de los a?os 90 apenas el 5% de los pa¨ªses ten¨ªan l¨ªderes populistas, en 2018 esa cifra se hab¨ªa quintuplicado, alcanzando el 26%. Este estudio tambi¨¦n muestra que la llegada de este tipo de l¨ªderes al poder tiene efectos negativos en la evoluci¨®n de la econom¨ªa: 15 a?os despu¨¦s de su llegada al poder, la renta per c¨¢pita es un 10% inferior de la que habr¨ªa sido alcanzada con otro tipo de gobiernos. Los autores apuntan a que estos efectos podr¨ªan estar asociados con la adopci¨®n de pol¨ªticas ineficientes y el aumento de barreras arancelarias que reducen la integraci¨®n internacional de sus econom¨ªas y restan competitividad a sus empresas. En el caso de los l¨ªderes de extrema derecha, su llegada al poder tambi¨¦n conlleva un aumento de la desigualdad entre los habitantes del pa¨ªs, probablemente como resultado de recortes en la inversi¨®n social.

Aunque estos resultados pueden no ser extrapolables al caso espa?ol ¡ªel art¨ªculo se centra en el efecto del/de la l¨ªder del Ejecutivo y no en el de gobiernos de coalici¨®n¡ª, nos ofrecen indicios sobre las consecuencias econ¨®micas que el tipo de pol¨ªticas que promueven estos l¨ªderes podr¨ªan acarrear.

Por otro lado est¨¢n las consecuencias sociales. Numerosas investigaciones han destacado c¨®mo el discurso xen¨®fobo de algunos partidos pol¨ªticos alimenta los prejuicios y las actitudes hostiles hacia las minor¨ªas, como por ejemplo los inmigrantes. En un estudio reciente, M¨¹ller y Schwarz mostraron c¨®mo los delitos contra los inmigrantes musulmanes en Estados Unidos se duplicaron tras las elecciones presidenciales de 2016, que culminaron con la victoria de Donald Trump. Asimismo, identificaron un incremento considerable en los cr¨ªmenes contra los inmigrantes en los d¨ªas subsiguientes a las publicaciones de Donald Trump en Twitter criticando a este grupo. El estudio tambi¨¦n pone de relieve c¨®mo las redes sociales amplifican estos efectos: los mensajes de Trump tuvieron un impacto mayor en las regiones con m¨¢s usuarios de Twitter.

La literatura cient¨ªfica tambi¨¦n muestra c¨®mo los efectos en los comportamientos xen¨®fobos se magnifican cuando este tipo de l¨ªderes llegan al poder. Al asumir el mando de los gobiernos, estos dirigentes obtienen legitimidad y sus postulados adquieren un mayor grado de influencia. Por ejemplo, la investigaci¨®n sobre los tuits de Donald Trump no revel¨® un efecto significativo en la violencia contra los inmigrantes antes de que Trump se presentara como candidato en las primarias republicanas, pero s¨ª tras su llegada al poder. Tambi¨¦n hay evidencias sobre el impacto de su ascensi¨®n al poder local. Un estudio de Alessio Romarri muestra c¨®mo, tras la elecci¨®n de alcaldes de extrema derecha en Italia entre 2008 y 2018, los delitos contra las minor¨ªas aumentaron significativamente.

?Qu¨¦ mecanismo puede explicar este efecto en las actitudes y conductas xen¨®fobas? Por un lado, podr¨ªamos pensar que, con la llegada al Gobierno, estos l¨ªderes cambian las pol¨ªticas o regulaciones en materia de seguridad. Sin embargo, esta hip¨®tesis no parece ser la m¨¢s plausible, ya que los efectos son a menudo inmediatos. Adem¨¢s, en el caso del ascenso de alcaldes de extrema derecha en Italia, no se detectaron aumentos en otro tipo de delitos, s¨®lo en aquellos contra las minor¨ªas. ?Es posible, entonces, que estos l¨ªderes consigan persuadir a los ciudadanos y hacer que se vuelven m¨¢s xen¨®fobos? Aunque no podemos descartar completamente esta posibilidad, la psicolog¨ªa y la sociolog¨ªa tienden a considerar estas orientaciones como producto de la formaci¨®n individual de la personalidad, arraigada a la educaci¨®n y experiencia de cada uno/a. Generalmente, estas disciplinas no apoyan la idea de que tales inclinaciones puedan ser afectadas instant¨¢neamente, incluso cuando los mensajes que alientan la xenofobia provienen de l¨ªderes pol¨ªticos o figuras carism¨¢ticas.

La hip¨®tesis m¨¢s probable es que la ascensi¨®n al poder de l¨ªderes que promulgan postulados xen¨®fobos logre transformar las normas sociales, es decir, redefina la percepci¨®n que tenemos los ciudadanos de qu¨¦ conductas son aceptable y cuales no en nuestra sociedad.

En un creativo experimento, Burstyn, Egorov y Fiorin, publicado en la American Economic Review, logran ilustrar c¨®mo la elecci¨®n de Trump influenci¨® las normas sociales. Los autores realizaron una encuesta a 1.600 residentes de la ciudad de Pittsburgh, Pennsylvania. Informaron a la mitad de los encuestados de que Trump hab¨ªa ganado las elecciones presidenciales en el ¨¢rea metropolitana de Pittsburgh, mientras que a la otra mitad les comunicaron que Hillary Clinton hab¨ªa ganado en el condado de Pittsburgh.

El hallazgo clave del estudio es que aquellos asignados al grupo informado de la victoria de Trump mostraron una mayor inclinaci¨®n a adoptar actitudes xen¨®fobas, espec¨ªficamente expresando su apoyo a una organizaci¨®n antiinmigrante. Este efecto solo se observ¨® entre los encuestados que cre¨ªan que su apoyo a esta organizaci¨®n podr¨ªa ser hecho p¨²blico y no entre aquellos que pensaban que su decisi¨®n se mantendr¨ªa en el anonimato. Estos resultados sugieren que la noticia de la victoria de Trump no hizo que las personas se volvieran m¨¢s xen¨®fobas per se, sino que interpretaron que la norma social hab¨ªa cambiado y que ahora ser¨ªa menos reprochable expresar opiniones de esta naturaleza. Por lo tanto, parece probable que el efecto surgiera de un cambio en las normas sociales.

Este cambio de normas sociales afecta a todos, incluso a aquellos que no comparten las opiniones xen¨®fobas. Por ejemplo, en otro experimento, los mismos autores muestran que aquellos que votaron por el Partido Dem¨®crata penalizan en menor medida las expresiones xen¨®fobas despu¨¦s de recibir la noticia de que Trump hab¨ªa ganado en su ciudad.

En resumen, la ascensi¨®n al poder de partidos de extrema derecha puede tener repercusiones negativas no solo en el progreso econ¨®mico y la equidad, sino que tambi¨¦n tiene el potencial de desgastar normas sociales fundamentales de coexistencia entre diversos grupos de nuestra sociedad, normas que se han estado fortaleciendo durante los ¨²ltimos 45 a?os de democracia en Espa?a.

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