Comercio, bienes medioambientales y transici¨®n verde
Los estudios acad¨¦micos estiman que la liberalizaci¨®n del comercio en bienes medioambientales contribuir¨ªa a reducir las emisiones, mitigar el cambio clim¨¢tico y acelerar la transici¨®n energ¨¦tica
Tanto el comercio internacional como la inversi¨®n son palancas relevantes para conducir la econom¨ªa global hacia la descarbonizaci¨®n. As¨ª lo han puesto de manifiesto sendas conferencias celebradas la pasada semana. Mientras que la Organizaci¨®n Mundial del Comercio (OMC) organizaba en Ginebra la Quinta Semana para el Comercio y el Medioambiente, en Par¨ªs, la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®mico (OCDE) reun¨ªa a expertos en el Foro anual sobre Crecimiento Verde y Desarrollo Sostenibl...
Tanto el comercio internacional como la inversi¨®n son palancas relevantes para conducir la econom¨ªa global hacia la descarbonizaci¨®n. As¨ª lo han puesto de manifiesto sendas conferencias celebradas la pasada semana. Mientras que la Organizaci¨®n Mundial del Comercio (OMC) organizaba en Ginebra la Quinta Semana para el Comercio y el Medioambiente, en Par¨ªs, la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®mico (OCDE) reun¨ªa a expertos en el Foro anual sobre Crecimiento Verde y Desarrollo Sostenible. Los objetivos eran identificar las hojas de ruta e iniciativas a implementar para seguir la senda del desarrollo econ¨®mico a la vez que se abordan los grandes retos globales de la triple crisis planetaria: el cambio clim¨¢tico, la contaminaci¨®n y la p¨¦rdida de biodiversidad.
En la OCDE se debati¨®, entre otros temas, sobre las pol¨ªticas comerciales como instrumentos para abordar la triple crisis facilitando el comercio de bienes medioambientales y fomentando econom¨ªas m¨¢s circulares bajas en carbono.
La primera sesi¨®n, a la que asist¨ª como ponente, se centr¨® en el comercio de bienes medioambientales (como turbinas e¨®licas y paneles solares). El comercio internacional de dichos bienes desempe?a un papel crucial en la difusi¨®n de tecnolog¨ªas que contribuyen a solucionar una amplia gama de problemas medioambientales. Sin embargo, es dif¨ªcil identificar los bienes medioambientales, as¨ª como tambi¨¦n las diversas barreras que impiden o dificultan su comercio a nivel internacional, en forma de aranceles u otras restricciones.
Los estudios acad¨¦micos estiman que la liberalizaci¨®n del comercio en bienes medioambientales incrementar¨ªa su adopci¨®n y ello contribuir¨ªa a reducir las emisiones, mitigar el cambio clim¨¢tico y acelerar la transici¨®n energ¨¦tica. Las ganancias ser¨ªan tanto econ¨®micas como medioambientales. El problema es que persisten numerosas barreras a su comercio y su definici¨®n no est¨¢ consensuada.
A pesar de la relevancia global de los bienes ambientales, el intento de ratificar un acuerdo multilateral para liberalizar su comercio sigue chocando con escollos. Los pa¨ªses negociadores en el seno de la OMC han sido incapaces de ponerse de acuerdo en una ¡°lista¡± de bienes medioambientales. A principios de los noventa la OCDE dise?¨® una muy amplia basada en categor¨ªas generales de bienes del manual de la industria medioambiental de la OCDE/Eurostat. Ambos organismos aunaron fuerzas en 1995 para acordar una definici¨®n de bienes y servicios ambientales, que sin embargo no inclu¨ªa productos, tecnolog¨ªas y servicios limpios en t¨¦rminos de su eficiencia energ¨¦tica. Por otra parte, los pa¨ªses de APEC (principal foro econ¨®mico de cooperaci¨®n Asia-Pac¨ªfico) promovieron una lista m¨¢s corta basada en las nominaciones de sus pa¨ªses miembros, tradicionalmente utilizadas en las negociaciones comerciales, que m¨¢s tarde se ordenar¨ªa seg¨²n una clasificaci¨®n de bienes utilizada para el comercio (ratificada en 2012 y la primera en ponerse en pr¨¢ctica).
Aunque las listas de la OCDE y APEC se utilizaron como base en la Ronda Doha, las negociaciones se interrumpieron en 2016. No se ha llegado a un consenso multilateralmente aceptado. Las principales razones se deben en primer lugar a un desajuste de objetivos. Algunos pa¨ªses persiguen ganar acceso de mercado, adem¨¢s de alcanzar objetivos medioambientales. En segundo lugar, muchos bienes tienen usos m¨²ltiples y es imposible saber su uso final. Por ejemplo, tuber¨ªas o bombas que pueden utilizarse para aguas residuales o energ¨ªa hidroel¨¦ctrica, pero tambi¨¦n en el sector petrolero. En tercer lugar, los productos ambientalmente preferibles, definidos como bienes que son intr¨ªnsecamente o por dise?o ambientalmente superiores a otros bienes que tienen la misma funci¨®n, no se suelen incluir en las listas al ser dif¨ªcil identificarlos. Ejemplos son los calentadores de agua solares en comparaci¨®n con los de gas natural. Adem¨¢s, la perspectiva de incluir no s¨®lo bienes finales, sino tambi¨¦n intermedios, como las piezas y componentes, supondr¨ªa ampliar la lista.
Finalmente, en el foro se alcanz¨® un consenso en que lo mejor ser¨ªa adoptar una ¡°lista viva¡± y amplia sujeta a revisiones peri¨®dicas y consultar con expertos de aduanas para asegurar que los productos tengan la definici¨®n precisa y sean identificables en el sistema de clasificaci¨®n de comercio para facilitar la eliminaci¨®n de los aranceles. Adem¨¢s, si se continua con el criterio de lista, esta debe ser inclusiva e incorporar todas las sugerencias de los pa¨ªses negociadores, estando basada en criterios medioambientales y no de acceso a mercados. Las negociaciones recientes de acuerdos de comercio (Nueva Zelanda-Gran Breta?a, -UE), y el Acuerdo sobre Cambio Clim¨¢tico, Comercio y Sostenibilidad (ACCTS), liberalizar¨¢n el comercio de bienes medioambientales, y deben por tanto tomarse en consideraci¨®n como pelda?os hacia acuerdos multilaterales que deber¨ªa impulsar la OMC.