Ya suman 35 los concejales de Euskadi y Navarra que han dimitido desde el fin de la tregua de ETA

La lista de representantes municipales vascos y navarros dimisionarios se eleva al menos a 35 en poco m¨¢s de dos a?os, casi la mitad pertenecientes al PSE y entre los motivos que alegaron para renunciar al cargo destacan la negativa a llevar escolta, que fue la raz¨®n que esgrimieron la mayor¨ªa de los ediles socialistas.

El Partido Socialista de Euskadi (PSE), con 17 ediles que han renunciado al cargo, el ¨²ltimo Jos¨¦ Antonio Dopazo Mart¨ªn del Ayuntamiento guipuzcoano de Lazkao, es la formaci¨®n pol¨ªtica m¨¢s castigada en el Pa¨ªs Vasco desde que la banda terrorista ETA anunci¨® la ruptura de la tregua el 3 de diciembre de 1999. Adem¨¢s, la semana pasada tambi¨¦n presentaron su dimisi¨®n la concejal socialista en Renter¨ªa (Guip¨²zcoa) Gemma Artola y el edil del PSE/EE en Iurreta (Vizcaya) Aitor Lamas.

Los ediles socialistas que han renunciado al cargo son los m¨¢s numerosos, ya que suman 17, seguidos de los nueve de EH, ahora Batasuna, y el resto de las formaciones pol¨ªticas que han sufrido bajas voluntarias son EA, con cuatro, UPN que perdi¨® dos, otros tantos una agrupaci¨®n independiente y un edil del PP.

El caso m¨¢s dram¨¢tico ha sido el del ayuntamiento de Zum¨¢rraga donde han dimitido siete concejales, cinco de ellos socialistas. Las cuatro ¨²ltimas renuncias se han producido en lo que va de a?o, mientras que en el 2001 se produjeron 22 dimisiones y otras nueve el 2000 que afectaron a consistorios de las tres provincias vascas y en Navarra, entre las que destaca Guip¨²zcoa, con 17 diles dimitidos, seguida de Vizcaya, con ocho, y Alava, donde renunciaron cinco ediles, la misma cifra que en Navarra.

Presiones familiares

El abandono de la pol¨ªtica municipal tambi¨¦n se debi¨® a presiones familiares ante las reiteradas amenazas recibidas, como as¨ª lo reconoci¨® el edil socialista socialista, Alvaro Esparza, que present¨® su dimisisi¨®n en el pleno del Ayuntamiento guipuzcoano de Vergara en mayo de 2000 ante "las reiteradas amenazas de muerte", que seg¨²n asegur¨® recibi¨® en los ¨²ltimos meses "por parte del entorno de ETA".

Dos meses antes, en marzo de 2000, el concejal socialista de Basauri (Vizcaya), I?aki Guturbay renunci¨® al cargo tras los primeros atentados de la banda terrorista ETA. "Personalmente, no tengo miedo.

Otros concejales, en especial los nacionalistas, esgrimieron "razones morales" frente a la violencia de ETA para dimitir, como el alcalde de Urretxu (Guip¨²zcoa)y vicepresidente de Udalbiltza, Pello Gonz¨¢lez de EA, que abandon¨® el Consistorio en agosto de 2000, en plena oleada de atentados y homenajes a los etarras muertos en Bolueta (Bilbao) cuando transportaban una bomba en un coche.

Edil de EH

Unos meses despu¨¦s, en diciembre de 2000, el hist¨®rico militante abertzale y edil de EH en Vitoria, I?aki Ruiz de Pinedo aleg¨® razones "personales y laborales" para renunciar al cargo, y en ese mismo mes, sigui¨® su ejemplo el ¨²nico concejal de EH en Balmaseda (Guip¨²zcoa), Jos¨¦ Juli¨¢n Pasqual Gallastegi, por su rechazo a que "se mate a alguien por pensar diferente", seg¨²n explic¨®.

La decisi¨®n adoptada por los ediles Ruiz de Pinedo y Gallastegui desencadenaron m¨¢s dimisiones entre cargos electos de la izquierda abertzale. El ¨²nico concejal de EH en Ermua (Vizcaya), Jabier Azkoaga renunci¨® al cargo y los tres candidatos que ocuparon los puestos siguientes en la lista electoral, Juan Mar¨ªa Cano L¨®pez, Mar¨ªa Rosario Arrizabalaga Urreta y Juan Mi Bravo Garitagoitia, se negaron a sustituirle.

A partir de abril de 2001, la negativa de los ediles socialistas a llevar escolta fue el motivo que aludieron un total de diez cargos electos del PSE. El primer caso fue el de Mar¨ªa Victoria Badillo, al que siguieron sus compa?eros en el Ayuntamiento guipuzcoano de Zum¨¢rraga, Mes¨²s Maria Mend¨ªa y su hijo Josu Mend¨ªa, as¨ª como Jos¨¦ Mar¨ªa Bermejo y Mar¨ªa Dolores Segade.

Otros ediles socialistas de Zumaia, Pasajes, Elciego, Zalla y Leoia tambi¨¦n renunciaron a sus cargos. Se trat¨® de Enrique Rubio M¨¦ndez, Buxen Itxaso, Juan carlos Uribe, Gemma Beltr¨¢n Berrocal y Valent¨ªn Torrado.

"Discrepancias

Tras las elecciones del 13-M en Euskadi, un concejal socialista m¨¢s, Ventrua Garnaleo present¨® por "motivos profesionales" su renuncia en el Ayuntamientode Arzkoitia (Guip¨²zcoa) y en julio de 2001 hizo lo propio Avelino Fern¨¢ndez de Quincoces, de EA en el Consistorio de Vitoria por "discrepancias con su partido".

Por su parte, la cr¨ªtica a Batasuna a trav¨¦s de la corriente "Aralar" provoc¨® la dimisi¨®n del pol¨ªtico navarro Patxi Zabaleta como miembro del grupo municipal de EH en el Ayuntamiento de Pamplona, y precisamente en Navarra, el edil de UPN de Villava, Juan Francisco Eransus renunci¨® despu¨¦s de que su comercio fuera atacado por los radicales. A esta dimisi¨®n siguieron las de otros tres ediles, uno de la misma formaci¨®n y dos concejalas, amas de casa, de una agrupaci¨®n independiente de Irurtzun (Navarra) por su negativa a llevar escoltas