La Audiencia ordena la detenci¨®n de los militares de EE UU implicados en la muerte de Jos¨¦ Couso
El Pent¨¢gono niega la falta de cooperaci¨®n con Espa?a en el caso
El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha dictado hoy orden de busca y captura y detenci¨®n internacional, a efectos de extradici¨®n, de los tres militares de EE UU presuntamente implicados en la muerte del c¨¢mara de Telecinco Jos¨¦ Couso, ocurrida el pasado 8 de abril de 2003 en el Hotel Palestina de Bagdad (Irak). La Fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional ha anunciado recurrir¨¢ ma?ana el auto.
La muerte de Jos¨¦ Couso en Bagdad |
En un auto, el magistrado afirma que la busca y captura es "la ¨²nica medida efectiva para asegurar la presencia de los imputados en el proceso a disposici¨®n de la autoridad judicial espa?ola, a la vista de la nula cooperaci¨®n judicial prestada por las autoridades estadounidenses para el esclarecimiento de los hechos". En este sentido, Pedraz recuerda que ha cursado dos peticiones de auxilio judicial a Estados Unidos, una el 21 de abril de 2004, en la que solicitaba documentaci¨®n, y la otra el 6 de junio, en la que ped¨ªa que se tomara declaraci¨®n a los militares imputados "o bien que se autorizara el desplazamiento de una comisi¨®n judicial espa?ola hasta territorio estadounidense para la ejecuci¨®n de esas declaraciones".
La Justicia de EE UU no responde
"Hasta la fecha no se ha recibido respuesta por la autoridad requerida sobre el cumplimiento de ambas solicitudes de auxilio", se?ala la resoluci¨®n. Los reclamados son el sargento Thomas Gibson, de la Compa?¨ªa A del Regimiento de Blindados n¨²mero 64 de la Tercera Divisi¨®n de Infanter¨ªa Acorazada del Ej¨¦rcito de EE UU; el capit¨¢n Philip Wolford, que estaba al mando de la unidad de blindados de la Compa?¨ªa A; y el teniente coronel Philip de Camp, responsable del Regimiento. Gibson fue quien el 8 de abril de 2003 dispar¨® contra el Hotel Palestina de Bagdad desde un carro de combate Abrahms M-1, despu¨¦s de advertir que alguien les observaba con prism¨¢ticos desde un balc¨®n. En este hotel se alojaban la mayor¨ªa de los periodistas extranjeros que cubr¨ªan la informaci¨®n sobre la invasi¨®n estadounidense de Irak.
En unas declaraciones emitidas por Tele 5 un mes despu¨¦s del ataque, en el que tambi¨¦n result¨® muerto el periodista de la agencia Reuters Taras Protsyuk, el propio Gibson dijo: "No dispar¨¦ inmediatamente sobre ¨¦l. Llam¨¦ a mis jefes y les dije lo que hab¨ªa visto. Diez minutos despu¨¦s me llamaron y me dijeron que disparara sobre ¨¦l y eso hice". Su inmediato superior, el capit¨¢n Wolford, fue quien autoriz¨® el disparo despu¨¦s de que el artillero le dijera que hab¨ªa visto a alguien con prism¨¢ticos en el hotel, seg¨²n manifest¨® este oficial en una entrevista a Le Nouvel Observateur. Por ¨²ltimo, la persona que orden¨® disparar contra el hotel fue el teniente coronel De Camp, seg¨²n reconoci¨® ¨¦l mismo en una entrevista publicada en Los Angeles Times el d¨ªa 11 de abril.
"El coronel que orden¨® a sus tanques abrir fuego contra el Hotel Palestina, matando a dos periodistas, se responsabiliz¨® de las muertes, pero dijo que no tuvo elecci¨®n porque sus unidades estaban siendo atacadas por iraqu¨ªes", afirmaba el peri¨®dico, que inclu¨ªa la siguiente cita textual de De Camp: "Lamento decirlo, pero soy el tipo que mat¨® a los periodistas". El juez les imput¨® el pasado mes de junio un delito contra la comunidad internacional tipificado en el art¨ªculo 611.1 del C¨®digo Penal, que comete quien "con ocasi¨®n de un conflicto armado realice u ordene realizar ataques indiscriminados o excesivos o haga objeto a la poblaci¨®n civil de ataques, represalias o actos de amenazas de violencia cuya finalidad sea aterrorizarla".
La respuesta del Pent¨¢gono
De quien s¨ª se ha recibido respuesta ha sido por parte del protavoz del Pent¨¢gono, quien esta noche ha asegurado que el organismo estadounidense ha cooperado con las autoridades espa?olas en el esclarecimiento de la muerte de Couso. "El Departamento de Defensa ha cooperado previamente con el Gobierno espa?ol", ha afirmado tajantemente el teniente coronel Barry Venable, en la primera reacci¨®n oficial del Pent¨¢gono a la solicitud de extradici¨®n.
El militar tambi¨¦n ha afirmado que el Departamento de Defensa "se toma en serio" las alegaciones y que el asunto ser¨¢ tratado "por los canales apropiados".
La familia celebra la decisi¨®n
La querella por la muerte de Couso fue admitida a tr¨¢mite por el juez de la Audiencia Nacional Guillermo Ruiz Polanco el 17 de octubre de 2003, pese a la oposici¨®n de la Fiscal¨ªa. En el auto notificado hoy, Pedraz afirma que desde varios d¨ªas antes de la invasi¨®n de Irak, que se produjo el 20 de marzo de 2003, "la mayor parte de la prensa internacional se encontraba alojada en el Hotel Palestina, adonde se hab¨ªa trasladado desde el Hotel Rashid por indicaci¨®n del Pent¨¢gono estadounidense". A?ade que el Palestina, "uno de los edificios m¨¢s altos de la ciudad", se ubicaba en la zona oriental del r¨ªo Tigris, donde "se encontraba la mayor parte de la ¨¢reas residenciales de Bagdad y donde viv¨ªa la mayor¨ªa de la poblaci¨®n civil".
La abogada de la familia Couso, Pilar Hermoso, se ha felicitado por la "hist¨®rica" decisi¨®n del magistrado, aunque ha recordado que EE UU no extradita a sus nacionales, por lo que los militares no podr¨¢n ser detenidos mientras no abandonen su pa¨ªs. Hermoso tambi¨¦n ha expresado sus dudas sobre si la detenci¨®n podr¨ªa llevarse a efecto en el caso de que cruzaran la frontera no como ciudadanos sino formando parte de un contingente militar destinado a un pa¨ªs extranjero. La familia de Couso tambi¨¦n ha expresado su "gran satisfacci¨®n y alegr¨ªa". David Couso, hermano del c¨¢mara, ha declarado: "Tras dos a?os y medio, la justicia espa?ola se acerca a nosotros y nos hace confiar en ella". Ha recordado que la familia present¨® una querella criminal en la que ped¨ªa el procesamiento de esos tres militares. "Ahora cabe esperar un juicio justo a estas personas, con todas las garant¨ªas", ha a?adido.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.