De las entra?as de la efigie emergen una serie de personajes extravagantes que comparten el temor a la muerte anunciada que se les avecina, aunque cada uno de ellos se toma sus ¨²ltimas horas de un modo diferente. "La idea inicial fue recrear una sensaci¨®n de miedo visceral a la muerte, y analizar los procesos f¨ªsicos que se producen en el cuerpo" -explic¨® el director de la obra, Alex Oll¨¦-, y por ello la sensaci¨®n de angustia "se transmite desde la descomunal escultura hasta los personajes, que representan partes de su cuerpo".BERND UHLIGAnte su final inminente, algunos de ellos optan por entregarse a los placeres carnales, como la pareja desollada Amanda y Amando -a los que Ligeti quiso llamar inicialmente Cliteria y Spermando- o la ninf¨®mana sadomasoquista Mescalina, mientras que otros se dan a la bebida (el vagabundo Piet the Pot), o caen en la histeria (Gepopo, la jefa de la polic¨ªa secret). Este desfile "grotesco y terror¨ªfico", como lo defini¨® el compositor de la obra, evoca la est¨¦tica del teatro de marionetas, hace gui?os a mitos apocal¨ªpticos de la actualidad, como la guerra biol¨®gica o nuclear, y se inspira en la m¨¢s t¨¦trica imaginer¨ªa religiosa medieval, y en particular en los lienzos de Pieter Brueghel el Viejo.BERND UHLIGLa efigie de la mujer, que con 17 metros de alto y 7 de ancho constituye el principal y casi ¨²nico elemento de escenograf¨ªa, recuerda a la gigantesca figura hueca, de espaldas y en cuclillas pintada por el citado artista flamenco en El jard¨ªn de las delicias. Pese al tono oscuro y fatalista que predomina en la obra, los personajes viven una sucesi¨®n de situaciones llenas de humor absurdo y por lo general macabro que provocaron risas entre los espectadores. El sexo, el amor y el poder son ridiculizados, y la propia Muerte es retratada como un personaje caricaturesco, capaz de cometer errores m¨¢s dignos de los humanos. "Es necesario relativizar las cosas que m¨¢s nos preocupan para vislumbrar un poco de esperanza en ¨¦pocas de crisis como la actual", dijo Oll¨¦ en una rueda de prensa antes del estreno.BERND UHLIG"Mofarse de la muerte es como mofarse de uno mismo", a?adi¨® el director y cofundador de la Fura. En cuanto a la partitura de Ligeti, el compositor rumano de origen jud¨ªo la concibi¨® como una anti-¨®pera con referencias ir¨®nicas tanto a la tradici¨®n cl¨¢sica oper¨ªstica como a su cr¨ªtica actual, y ha sido adaptada por el director de orquesta brit¨¢nico Leo Hussain.BERND UHLIGAdem¨¢s de servir de acompa?amiento a los di¨¢logos cantados por los autores, la m¨²sica desempe?a un importante papel de ambientaci¨®n -a modo de banda sonora de pel¨ªcula de intriga o de terror-. Algo que, seg¨²n Oll¨¦, "ha gustado mucho a la gente, incluso a los que no est¨¢n familiarizados con las composiciones contempor¨¢neas". Los asistentes al Teatro de la Monnaie brindaron una tibia acogida a la obra, aunque los aplausos m¨¢s entusiastas los cosecharon el director y la ayudante de direcci¨®n, Valentina Carrasco, cuando salieron al escenario. Le Grand Macabre estar¨¢ en cartel tres semanas en Bruselas, viajar¨¢ en los pr¨®ximos meses a Roma y a Londres, y llegar¨¢ al Liceo de Barcelona en 2011.BERND UHLIG
