Todos contra el aceite de...
Por fin lo hemos conseguido. Entre risas y buenos prop¨®sitos varios representantes de la prensa gastron¨®mica espa?ola (presentes y ausentes) fundamos ayer en Madrid la ¡°Asociaci¨®n de enemigos del aceite de trufa blanca¡±. Sin normas, sin estatutos, sin fines de lucro y con el ¨²nico prop¨®sito de parar los pies al aceite sint¨¦tico de trufa blanca, esencia de laboratorio que lleva camino de convertirse en una lacra. Producto qu¨ªmico que llega de Italia y que se encuentra ya en todas partes. Y cada vez m¨¢s, seg¨²n parece. La misma grasa que algunos cocineros emplean para arreglar platos mediocres, malos carpaccios, risottos de hongos, etc¨¦tera. Una esencia perniciosa que enmascara el sabor de materias primas nobles. Es indigesta, repite y deja un gustillo met¨¢lico. Seguro -- pensamos todos -- que tiene propiedades poco saludables. Lo averiguaremos en cuanto podamos.
Entre los presentes, Marta Fern¨¢ndez Guada?o, Enma Sueiro, Raquel Castillo, Julia P¨¦rez, V¨ªctor de la Serna, Alberto Luchini y Alberto Fern¨¢ndez. Y entre los ausentes que ya se han adherido, Rosa Rivas, Federico Oldemburg, Juancho Asenjo, Sacha Ormaechea, Xavier Agull¨®, Cristina Jolonch, Pedro Garc¨ªa Mochol¨ª, Pablo Amate, Manuel Iglesias, Philippe Regol, Pepe Barrena, Ignacio Medina,Juan Manuel Bellver, Juan Echanove, Paz Alvarez, Carmen Baudin, Iria Castro, Gara Villalba, Natalia Delamo, Concha Bernard, Josefina L¨®pez P¨¦rez, Concha V¨¢zquez, Nial Walsh, Kurt Alexander, Luisa Garc¨ªa, Marta Burdiel, Tapes La Xara, Luis Pacheco y Lorenzo D¨ªaz. La lista est¨¢ abierta y admitimos simpatizantes. Los primeros en sumarse, estamos seguros, ser¨¢n nuestros amigos italianos, Marco Bolasco, Paolo Marchi y Gabriele Zanata periodistas de enorme talla.
Algunas de las empresas que comercializan esta grasa nos han anticipado que vamos hacia el fracaso: ¡°No ten¨¦is nada que hacer. El producto ha llegado para quedarse¡±. ¡°Si supierais qu¨¦ cocineros espa?oles lo utilizan os asombrar¨ªais¡±. ¡°A la gente le entusiasma¡± ¡°Dejadlo, no vais a conseguir nada¡±.
Lo bueno de partir en desventaja es que lo poco consigamos lo interpretaremos como un doble triunfo moral y gastron¨®mico.
Ayer nos marcamos el prop¨®sito de descubrir a quienes lo utilizan, enumerar los platos sospechosos cada trimestre, y redactar nuestra lista negra de usuarios. ?Por qu¨¦ recurrir a la imitaci¨®n y envilecer la buena cocina? ?Acaso no tenemos despensa suficiente? ?Por qu¨¦ ese af¨¢n de aparentar algo falso?
Para celebrar este acontecimiento tomamos un men¨² tradicional en la Taberna Asturianos. Cecina de buey, ensalada de bacalao con tomate, fabada y pote asturiano. De postre flan de queso. Eso s¨ª, antes, para empezar Alberto Fern¨¢ndez, patr¨®n de la casa cort¨® en lascas un poquito de trufa negra de Arotz (Navaleno) por aquello de la rebeld¨ªa frente a lo falso.
La temporada de la verdadera trufa blanca en Italia abarca del 15 de septiembre al 15 de enero. Hablamos de un producto nobil¨ªsimo que alcanza cotizaciones escandalosas. El aceite que emula sus aromas es el resultado de a?adir una esencia de laboratorio similar a la ¡°tuber magnatum pico¡± sobre aceites vegetales rectificados. ?Resultado? Grasas con olor a gas, a ajos, a hidrocarburos, hongos y tierra mojada que superan en intensidad arom¨¢tica a las aut¨¦nticas trufas blancas.
Lo m¨¢s divertido es que algunos perfumistas aprecian notas de musgo similares a la testosterona (5a-androst-16-en3aq-olo)
? Lo que nos faltaba, el sexo entre medias de un aceite pernicioso?
Empiezo a pensar si ser¨¢ por eso por lo que le gusta a algunos.
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