Apellido, fortuna, agenda y fama de 'playboy'
Nat Rothschild, heredero de la famosa dinast¨ªa, se mueve en el mundo de los negocios con la misma agilidad que entre sus conquistas
A Nathaniel Philip Victor James Rothschild, Nat para los amigos, no le gusta que le lleven la contraria y est¨¢ intentando llevar hasta el final su batalla contra el Daily Mail por haberle llamado titiritero. El m¨¢s joven y ¨²nico var¨®n de los cuatro hijos del cuarto bar¨®n Rothschild ha pedido esta semana permiso a los jueces para apelar la sentencia de febrero pasado que rechaz¨® su demanda por libelo contra el diario londinense.
Todo empez¨® en mayo de 2010, cuando el Mail public¨® un reportaje sobre una pol¨¦mica visita a una planta de aluminio en Siberia realizada en enero de 2005 por Rothschild, el entonces comisario europeo Peter Mandelson y el oligarca ruso Oleg Deripaska, propietario de la planta. El diario present¨® al multimillonario brit¨¢nico como el titiritero, el hombre que manejaba los cables de un viaje muy poco ortodoxo porque Mandelson ¨Cun pol¨ªtico brit¨¢nico particularmente pol¨¦mico y con dif¨ªciles relaciones con la prensa¨C ten¨ªa que tomar como comisario europeo varias decisiones que afectaban a los negocios de aluminio de Deripaska.
El juez no aborda la ¨¦tica de la presencia de Mandelson o el hecho de que viajara en el avi¨®n particular de su amigo Nat, pero rechaza la versi¨®n de este de que el viaje era meramente de placer y que estuvieron ¡°un nanosegundo¡± en la planta. El juez da por sentado que los tres hombres hablaron de aluminio y por lo tanto rechaza la denuncia de Rothschild de que se trataba de un libelo.
En el trasfondo del asunto est¨¢ una pol¨¦mica anterior que afectaba a estos tres mismos personajes y al actual ministro del Tesoro, George Osborne, a prop¨®sito de una fiesta de cumplea?os en el yate de Rothschild en Corf¨² en 2008. Pero, m¨¢s all¨¢ de eso, en el fondo lo que estaba denunciando el Mail era el estilo de vida y la manera de hacer negocios del futuro bar¨®n, basado en la influencia de sus conexiones, en manejar todo entre bastidores a partir del poder inmenso que le da su apellido, su fortuna y su agenda.
La informaci¨®n est¨¢ en la base de la riqueza de los Rothschild. Cuenta la leyenda que el fundador de la rama brit¨¢nica de la dinast¨ªa ten¨ªa tal red de informadores que se enter¨® un d¨ªa antes que el Gobierno brit¨¢nico de la derrota de Napole¨®n en Waterloo, lo que le permiti¨® sacar un buen provecho en la bolsa de Londres.
El todav¨ªa joven Nat (naci¨® en 1971) tard¨® un poco en seguir la senda de sus ancestros. Tras sus estudios en Eton y en Oxford entr¨® en un periodo de descompresi¨®n vital que le vali¨® una considerable fama de playboy. Para sorpresa de la familia, en 1995 se cas¨® en Las Vegas con la modelo Annabelle Neilson, a la que hab¨ªa conocido en una playa de la India y con la que comparti¨® un largo periodo de noches desenfrenadas en Nueva York. El matrimonio dur¨® poco: se divorciaron en 1997 y ella renunci¨® a utilizar el apellido de casada y firm¨® un pacto de silencio a cambio de un acuerdo econ¨®mico. ¡°Nathaniel siempre fue un chico malo. Hace a?os que no sabemos nada de los Rothchilds ni queremos saber nada¡±, declar¨® hace no mucho la madre de la modelo.
Tras esos a?os de desenfreno, Nat empez¨® a comportarse como un Rothschild. En 1995 hab¨ªa fundado una firma de inversiones, Atticus Capital, que se convirti¨® en una herramienta fundamental para multiplicar su fortuna y que lleg¨® a manejar una cartera de inversiones de 23.000 millones de d¨®lares. La vendi¨® en 2009 para crear el hedge-fund Attara Capital LP, del que se retir¨® en diciembre pasado. Ahora parece estar en horas bajas: ha sido forzado a dejar la co-presidencia de Bumi, el veh¨ªculo de inversiones del que posee un 12%, por sus desencuentros con los socios indonesios de la compa?¨ªa. Al multimillonario Samin Tan, que ha tomado las riendas de Bumi, quiz¨¢ le impresionan poco los apellidos de rancio abolengo.
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