Miedo y debilidad
La debilidad de los dirigentes se manifiesta, en muchas ocasiones, por las medidas coercitivas que imponen a sus ciudadanos y su miedo en la dureza de las mismas.
El anuncio hecho por el ministro del Interior de la reforma del c¨®digo penal para tipificar como delito algunas conductas relacionadas con las manifestaciones callejeras, bien podr¨ªan ser consideradas como un ejemplo esto. Meter en el mismo saco a quienes provocan destrozos y utilizan la violencia con aquellos que usan la resistencia pasiva como forma de respuesta ciudadana, o la convocatoria para participar en manifestaciones, es adem¨¢s una muestra del escaso fervor democr¨¢tico de alguno de nuestros actuales gobernantes.
Con estas medidas lo que se persigue no es castigar las conductas delictivas que se produzcan en el transcurso de las manifestaciones, para las que ya existe normativa legal, sino crear un clima de miedo entre los ciudadanos para que ni siquiera se atrevan a utilizar la manifestaci¨®n pac¨ªfica como herramienta de expresi¨®n de su sufrimiento e indignaci¨®n. Sabe el Gobierno que la respuesta ciudadana a sus pol¨ªticas va a ser cada vez m¨¢s fuerte, y que probablemente se traduzca en m¨¢s manifestaciones y huelgas, pero se equivocar¨¢ si lleva a cabo esa reforma que convertir¨¢ a millones de pac¨ªficos ciudadanos en potenciales delincuentes por el mero hecho de hacer patente su descontento a trav¨¦s de la resistencia pac¨ªfica. Una reforma que llevar¨ªa a la c¨¢rcel al mismo Mahatma Gandhi.¡ª Nicol¨¢s Abanc¨¦ns Tejero.?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.