Un Hannover con mucho arte
El pr¨ªncipe Otto se revela como un buen pintor.- Es sobrino de Ernesto de Hannover, conocido por sus esc¨¢ndals y su matrimonio con Carolina de M¨®naco
Giuseppe Tomasi, pr¨ªncipe de Lampedusa, protestaba hace d¨¦cadas contra quienes ve¨ªan incompatibles la alta aristocracia con el talento art¨ªstico o hasta con la inteligencia. A diferencia de otros nobles de primera fila m¨¢s dados a los caballos y las monter¨ªas, Lampedusa refut¨® el prejuicio escribiendo El Gatopardo, una de las novelas m¨¢s notables del siglo pasado. Ahora le sale un ¨¦mulo en la m¨¢s vetusta familia principesca de Alemania, la de Hannover, cuyo benjam¨ªn Otto estudia pintura y ha presentado recientemente su obra en una galer¨ªa de Braunschweig.
Los reporteros de la revista Bunte creen haber dado con una nueva prueba de talento aristocr¨¢tico y presentan al joven de 24 a?os como un ¡°Mr Charming de penado de creador a la manera de Einstein, de modales distinguidos y puntos de vista ajustados a la realidad¡±. Dice el g¨¹elfo que su ¡°sue?o es vivir de la pintura¡±. Como muchos otros j¨®venes de su generaci¨®n, el pinturero Otto de Hannover es aficionado a la m¨²sica electr¨®nica y quiere dedicarse adem¨¢s a la producci¨®n discogr¨¢fica en dicho g¨¦nero. Asegura que ya tiene montado ¡°un peque?o estudio¡±. La m¨²sica es una vieja pasi¨®n de los Hannover
El pintor en ciernes es sobrino de Ernesto Augusto de Hannover, el jefe de la Casa g¨¹elfa adem¨¢s de heredero lejano de la Corona inglesa y duque de Braunschweig y Luneburgo. El t¨ªo es m¨¢s conocido por sus trifulcas, sus esc¨¢ndalos y su matrimonio con Carolina de M¨®naco que por sus talentos art¨ªsticos. Otto tambi¨¦n es primo segundo de la reina Sof¨ªa, tambi¨¦n mel¨®mana. Es el ¨²nico hijo de Ludwig Rudolph de Hannover, a su vez segundo hijo var¨®n del anterior pr¨ªncipe. Su madre, Isabel, era de soltera la condesa de Thurn y de Valsassina-Como-Vercelli. Dej¨® su carrera de modelo al casarse con el pr¨ªncipe. La prensa de la ¨¦poca recoge historias de fiestas despampanantes en sitios lujosos, de problemas con drogas y de procesos judiciales relacionados con los narc¨®ticos que salpicaron a la acaudalada pareja.
Otto de Hannover es hu¨¦rfano desde los nueve meses. Su padre encontr¨® entonces muerta a la princesa de 27 a?os en una residencia familiar a la orilla del lago austr¨ªaco Traunsee. Ver a su guap¨ªsima esposa sucumbir a una sobredosis de coca¨ªna fue demasiado para el pr¨ªncipe, que llam¨® a la Cruz Roja de Gmunden (¡°mi mujer no se mueve, anoche tom¨® drogas¡±), despu¨¦s llam¨® a Londres para pedirle a su hermano que se hiciera cargo del peque?o Otto y por ¨²ltimo agarr¨® una escopeta de caza con la que se descerraj¨® un tiro en la boca. Acababa de cumplir 33 a?os.
Braunschweig, sede del ducado familiar, tiene una escuela universitaria de Bellas Artes donde Otto de Hannover sigue las clases del profesor Thomas Rentmeister. El catedr¨¢tico cuenta a Bunte que los cuadros de Otto le parecieron ¡°horribles al principio¡±. Los cuadros de Otto cuelgan ya en galer¨ªas de Londres junto a obras de la artista brit¨¢nica Tracy Emin.
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