Un modelo de Abercrombie demanda a la firma por obligarlo a masturbarse

Si hay algo en lo que nadie puede competir con la firma Abercrombie & Fitch es en el estado f¨ªsico de sus siempre atractivos y musculados dependientes, que suelen acabar ejerciendo de modelos en los cat¨¢logos de la marca estadounidense. Ese parec¨ªa que iba a ser el destino de Benjamine Bowers, un antiguo empleado al que su jefe le ofreci¨® la oportunidad de hacer unas fotos de cat¨¢logo. Pero la historia ha dado un vuelco y todo indica que acabar¨¢ mal: Bowers ha denunciado a la compa?¨ªa por un mill¨®n de d¨®lares (793.000 euros) tras asegurar que fue forzado por un agente a desvestirse y masturbarse para salir ¡°m¨¢s relajado¡± en las im¨¢genes.

Seg¨²n explica TMZ, la querella indica que el director de c¨¢sting de la tienda donde trabajaba Bowers envi¨® al dependiente a hablar con Brian Hilburn, un representante de modelos que, tras dar el visto bueno para convertirlo en maniqu¨ª, le dio un billete de ida y vuelta a Mississippi para realizar una sesi¨®n de fotos.

Fue durante la producci¨®n del cat¨¢logo, el 17 de junio del a?o pasado, cuando comenzaron los problemas. Seg¨²n argumenta Bowers en su demanda, Hilburn le aconsej¨® que para aparecer con un aspecto m¨¢s relajado en las im¨¢genes, ten¨ªa que masturbarse frente a la c¨¢mara. De esa forma, los fot¨®grafos podr¨ªan captar su gesto justo despu¨¦s de haber tenido un orgasmo. El caso es que el dependiente accedi¨®. Tras ello, siempre seg¨²n su versi¨®n, el representante de Abercrombie se le acerc¨®, se desnud¨® y expuso su propio miembro ante el aspirante a modelo con el fin de ¡°comparar tama?os¡±.

Solo en ese momento, Bowers se dio cuenta de que algo no iba bien y, despu¨¦s de un a?o de esos hechos, ha decidido demandar tanto a Hilburn como a la compa?¨ªa para la que ha dejado de trabajar. Alega que se siente utilizado y que sospecha que aquella sesi¨®n de fotos nunca tuvo como objetivo apoyar su carrera de modelo.

Abercrombie & Fitch no ha estado exenta de controversias debido a lo atrevidos que suelen ser sus reportajes gr¨¢ficos y los cat¨¢logos de sus productos. A principios de este a?o, unos empleados denunciaron que las tiendas de la firma sol¨ªan castigar a sus forzudos dependientes cuando comet¨ªan un error oblig¨¢ndolos a hacer flexiones. Sus encargados justificaron la medida argumentando que de esa forma cuidaban que mantuvieran la l¨ªnea. La compa?¨ªa ha sido objeto adem¨¢s de varias denuncias que hacen alusi¨®n al excesivo exhibicionismo en las campa?as publicitarias.