La hija del dictador uzbeko quiere ser Lady Gaga

Para Gulnara Karimova no hay barreras. La hija mimada del dictador uzbeco, Islam Karimov, se ha empe?ado en triunfar en Occidente y poco le importa que sea con sus dise?os o con sus canciones, a cara descubierta o bajo seud¨®nimo. La princesa de Uzbekist¨¢n, a la que se atribuye una fortuna superior a los 500 millones de euros, se presenta ahora como Googoosha (el apelativo cari?oso que le dio su padre) y, a golpe de talonario, aspira a convertirse en la nueva reina del pop. Dispuesta a hacer sombra a Lady Gaga, Shakira, Beyonc¨¦, Madonna o Lana del Rey, la cantante ha presentado este mes un ¨¢lbum en Nueva York y para promocionarlo se ha hecho su propia portada en el ¨²ltimo n¨²mero de la revista Billboard.

Hasta ahora, Karimova, de 39 a?os, hab¨ªa tratado de conquistar el mercado internacional con sus dise?os de joyas para la prestigiosa firma de joyer¨ªa suiza Chopard y con su firma de alta costura Guli. Pero en el ¨²ltimo a?o, las organizaciones de derechos humanos que la persiguen desde hace tiempo, por la barbarie del r¨¦gimen que representa, han logrado cerrarle el paso. Cuando sus modelos estaban listos para desfilar por la pasarela de la Semana de la Moda de Nueva York, en septiembre de 2011, las protestas en las calles de Manhattan forzaron a la organizaci¨®n a exigirle que se retirase. Chopard tambi¨¦n decidi¨® prescindir de sus dise?os.

Doctorada en Pol¨ªticas y con un m¨¢ster por la Universidad de Harvard, Gulnara Karimova, tambi¨¦n era hasta el 5 de octubre del a?o pasado, embajadora de su pa¨ªs en Espa?a, aunque no resid¨ªa en Madrid, sino en Suiza, donde es embajadora ante las Naciones Unidas en Ginebra. La princesa uzbeca sabe muy bien lo que sucede en su pa¨ªs, donde su padre gobierna con pu?o de hierro esta exrep¨²blica sovi¨¦tica bajo la excusa de mantener a raya a los radicales isl¨¢micos. Ese fue el argumento que utiliz¨® en 2005 cuando mand¨® disparar contra miles de mujeres y ni?os que protestaban por la represi¨®n en la ciudad de Andijan, y caus¨® centenares de muertos. Islam Karimov ¡ªque en la ¨¦poca sovi¨¦tica era el jefe del Partido Comunista en Uzbekist¨¢n¡ª se convirti¨® en presidente del pa¨ªs cuando este accedi¨® a la independencia en 1991.

Amiga de Julio Iglesias ¡ªcant¨® con ¨¦l a d¨²o en 2008 B¨¦same mucho¡ª, Elton John, Rod Stewart y Sting, entre otros, que no han podido resistirse a los millonarios encantos de la diva, Googoosha tuvo siempre pasi¨®n por los escenarios. Tras la serie de videoclips difundidos con ¨¦xito por Asia Central, la cantante ha recurrido a las redes sociales para conquistar el mercado occidental. Tiene contratada una amplia campa?a a trav¨¦s de Twitter.

Gulnara Karimova tiene claro que el dinero abre muchas puertas y muchas amistades, como la del expresidente azulgrana Joan Laporta. En mayo pasado asisti¨® a las Noches de M¨®naco, una gala que beneficia por igual a las fundaciones del pr¨ªncipe Alberto II de M¨®naco y de William Clinton. Su principal fuente de financiaci¨®n es el conglomerado Zeromaz, que explota la miner¨ªa, el transporte, el algod¨®n y sobre todo al pueblo uzbeco, que soporta uno de los reg¨ªmenes m¨¢s corruptos del mundo.

Profesora en la Universidad de Tashkent, divorciada y con dos hijos, Gulnara tal vez opt¨® por transformarse en Googoosha despu¨¦s de que Wikileaks hiciera un p¨²blico un cable del embajador norteamericano en la capital uzbeca en el que aseguraba que la hija del dictador es ¡°la mujer m¨¢s odiada de su pa¨ªs¡±. Quiz¨¢ cantando y con las muchas acciones que tiene de Coca-Cola logr¨¦ hacerse un hueco en EEUU, ya que el estallido de la primavera ¨¢rabe hace cada d¨ªa m¨¢s improbable su posibilidad de reinar en Uzbekist¨¢n.