La Cienciolog¨ªa pierde tir¨®n
El divorcio de Tom Cruise y?Katie Holmes ha devuelto el foco sobre la organizaci¨®n religiosa Algunos estudios apuntan a una p¨¦rdida dr¨¢stica de fieles El?principal motivo: Internet ha desvelado masivamente muchos de sus misterios
Otro de los matrimonios de Tom Cruise se ha roto, y la mirada entera de Estados Unidos se ha posado sobre la que hasta ahora aparec¨ªa como su abnegada esposa y el papel que la Iglesia de la Cienciolog¨ªa ha tenido en la uni¨®n y en la ruptura de ambos. Holmes se quedar¨¢ con la custodia de su hija, Suri, y con el derecho a determinar qu¨¦ educaci¨®n religiosa se le ofrece a esta. La de la actriz parece una huida digna de un thriller. Present¨® los papeles de divorcio en un juzgado de Manhattan el 28 de junio, como An¨®nimo contra An¨®nimo, evitando revelar la ruptura hasta que fue ya hecho consumado. La Iglesia de la Cienciolog¨ªa ha subrayado que nunca ha tenido nada que ver ni con el enlace ni con el divorcio de los dos actores. Sin embargo, los tabloides norteamericanos se lanzaron pronto a la caza del culpable en busca de una fuerza oscura, posiblemente una religi¨®n, que hubiera movido entre bambalinas los hilos de un matrimonio que a muchos les parec¨ªa roto antes de que se disolviera.
Una revista estadounidense con 1,9 millones de lectores, como es US Weekly, dijo que Holmes se hab¨ªa sentido ¡°como en [la pel¨ªcula] La semilla del diablo¡±. ¡°Holmes tuvo que huir de la chiflada Cienciolog¨ªa de Tom, por ella y por Suri¡±, titul¨® The New York Post. Hasta el propietario de ese tabloide, el mism¨ªsimo magnate Rupert Murdoch, tuvo a bien opinar, a trav¨¦s de la red de Twitter: ¡°La Cienciolog¨ªa de nuevo es noticia. Es una secta muy extra?a, pero hay mucho, mucho dinero implicado, y Tom Cruise es n¨²mero dos o tres en su jerarqu¨ªa¡±. La Cienciolog¨ªa es frecuentemente una diana predilecta, objetivo de punzantes cr¨ªticas por parte de exmiembros ¡ªa los que los cienci¨®logos llaman ap¨®statas¡ª, Gobiernos, investigadores y medios de comunicaci¨®n.
La Iglesia tiene ¡°millones de miembros a nivel internacional, con aproximadamente un tercio de ellos en EE UU¡±, asegura una portavoz, Karin Pouw, por correo electr¨®nico. La ¨²ltima encuesta de identificaci¨®n religiosa en Am¨¦rica, sin embargo, mantiene que en 2008 unas 25.000 personas en EE UU se consideraban cienci¨®logos, frente a los 55.000 de 2001. Ese sondeo no es exhaustivo, y se elabor¨® con una muestra de 220.000 entrevistas a lo largo de 18 a?os. ¡°La Iglesia de la Cienciolog¨ªa es una religi¨®n reconocida en Espa?a, como en EE UU, y nuestra iglesia en Madrid ha hecho mucho bien por la comunidad¡±, asegura la portavoz Pouw. De hecho, en Espa?a, la Audiencia Nacional reconoci¨® en 2007 el derecho a ser inscrita en el Registro de Asociaciones Religiosas del Ministerio de Justicia a la Iglesia de la Cienciolog¨ªa.
¡°La Iglesia de la Cienciolog¨ªa es una religi¨®n reconocida en Espa?a, como en EE UU, y nuestra iglesia en Madrid ha hecho mucho bien por la comunidad¡±, asegura Karin Pouw, una portavoz de la organizaci¨®n
Era un peque?o triunfo para los cienci¨®logos, que en Espa?a hab¨ªan vivido d¨ªas m¨¢s oscuros. En 1988, la polic¨ªa detuvo a 71 personas durante una reuni¨®n de su Iglesia en Madrid. Al l¨ªder de la Cienciolog¨ªa en Espa?a, Heber Jentzsch, se le acus¨® por supuesto delito de asociaci¨®n il¨ªcita y coacciones. Finalmente abandon¨® el pa¨ªs, y el juicio fue desestimado. Cuando el juez que instruy¨® el caso mostr¨® inicialmente a los periodistas el material incautado en los registros de las organizaciones afiliadas Narconon y Dian¨¦tica, se encontr¨® un programa inform¨¢tico que conten¨ªa informaci¨®n sobre las 500 empresas m¨¢s importantes de Espa?a.
Esa es una de las aspiraciones de la Cienciolog¨ªa: rodear al poder. O al menos a las celebridades. La Iglesia tiene centros para atraer a famosos ¨Cconocidos como celebrity centers¨C en Hollywood, Nueva York, Florencia, Par¨ªs y Londres, por ejemplo. En sus rangos hay y ha habido famosos de todo tipo, no solo Cruise o John Travolta, sino tambi¨¦n la actriz Anne Archer, el m¨²sico Chick Korea, el guionista y director Paul Haggis, la actriz Kirstie Alley o el empresario Sky Dayton, fundador de EarthLink. Entre ellos se hallaba tambi¨¦n el hijo del tenor Pl¨¢cido Domingo, Pl¨¢cido Domingo Jr, que hace un a?o abandon¨® la Iglesia porque, seg¨²n dijo, sus l¨ªderes le hab¨ªan obligado a cortar lazos con su mujer, Samantha, madre de sus tres hijas. Contactado por este diario, Domingo ha asegurado que el de la Cienciolog¨ªa es un asunto que ya no toca m¨¢s.
Para aquellos que a¨²n integran las filas de la Cienciolog¨ªa, las cr¨ªticas a sus creencias son un ataque a su libertad religiosa. En realidad, la Cienciolog¨ªa no naci¨® como una religi¨®n en el sentido estricto. Su padre, L. Ron Hubbard, fallecido en 1986, era un veterano de la II Guerra Mundial y escritor de ciencia ficci¨®n que en 1950 public¨® el libro Dian¨¦tica: la ciencia moderna de la salud mental, en el que describ¨ªa t¨¦cnicas de curaci¨®n espiritual para tratar miedos irracionales, el estr¨¦s mental y otras dolencias que calificaba de psicosom¨¢ticas. La Iglesia como tal se fund¨® en 1954, y a lo largo de los a?os Hubbard fue creando una cosmogon¨ªa propia, diferente a las religiones mayoritarias, que ha llegado como credo al siglo XXI.
Hubbard siempre se mostr¨® muy receloso de la psiquiatr¨ªa y del trabajo de sus profesionales. Cruise, que es el feligr¨¦s m¨¢s visible de la Cienciolog¨ªa, ha hablado en numerosas ocasiones en contra del uso de ansiol¨ªticos y antidepresivos. En 2005 critic¨® en una entrevista el tratamiento con medicamentos a ni?os que padecen trastorno por d¨¦ficit de atenci¨®n con hiperactividad, y recomend¨® tratarlo con ¡°vitaminas y alimentaci¨®n adecuada¡±. En otra ocasi¨®n ridiculiz¨® a la actriz Brooke Shields porque esta hab¨ªa admitido en un libro que hab¨ªa tomado paroxetina para tratar una depresi¨®n posparto. De hecho, los cienci¨®logos consideran que muchas enfermedades son en realidad psicosom¨¢ticas y que se pueden curar con unas auditor¨ªas espec¨ªficas, en las que en ocasiones se emplea un dispositivo de medici¨®n de resistencia el¨¦ctrica en el cuerpo humano.
Ese tipo de creencias gener¨® un considerable revuelo en 2009 tras el fallecimiento de Jett, hijo de otro afamado cienci¨®logo, John Travolta. Jett tenia 16 a?os y sufr¨ªa el s¨ªndrome de Kawasaki, que afecta a las arterias coronarias y puede provocar aneurismas. Numerosos foros de Internet propagaron acusaciones de que Jett deber¨ªa haber tomado valproato, un anticonvulsivo para tratar la dolencia, y que no lo hizo porque la Cienciolog¨ªa se opone al tratamiento con medicamentos. Los abogados de Travolta dijeron que el joven hab¨ªa estado de hecho bajo la tutela de un equipo m¨¦dico, y el propio Tom Cruise sali¨® a defender a su Iglesia en una entrevista del programa The view: ¡°Lo que nos recomiendan es que nos sometamos a chequeos, que tomemos nuestras medicinas, que nos ocupemos de nuestras enfermedades f¨ªsicas¡±. No hay indicios de que la Iglesia tuviera parte alguna en el tratamiento de Jett Travolta.
Sin embargo, rumores de ese tipo y una pol¨ªtica muy agresiva por parte de la Cienciolog¨ªa de tratar de contener la informaci¨®n relativa a ella en Internet le han granjeado numerosos ataques por parte del grupo de hackers Anonymous. El FBI ha detenido, en a?os pasados, a numerosos piratas inform¨¢ticos que han efectuado ataques de denegaci¨®n de servicio contra las p¨¢ginas web de la Cienciolog¨ªa. Dos de ellos, de Nueva Jersey y Nebraska, se declararon culpables en 2009 y 2010.
¡°La Cienciolog¨ªa vivi¨® sus d¨ªas ¨¢lgidos en los a?os setenta y ochenta del siglo pasado, cuando atra¨ªa a profesionales con talento, con aptitudes, para los que aprender los secretos de la religi¨®n era algo atractivo. Era gente idealista¡±, explica David S. Touretzky, profesor de inform¨¢tica en la Universidad de Carnegie Mellon que ha analizado exhaustivamente al grupo. ¡°Pero ahora todos sus secretos est¨¢n en Internet. La Red lo ha cambiado todo para ellos. Sus documentos secretos y los pliegos legales est¨¢n solo a un golpe de rat¨®n. Se sabe que alguna gente ha fallecido cuando estaba bajo su custodia, se sabe que ha habido muchos desertores que se han quejado de abusos, y se sabe la historia de Xenu, el alien¨ªgena genocida. Gracias a buscadores como Google, sus n¨²meros de afiliaci¨®n se han desplomado dram¨¢ticamente¡±.
Especialmente intrigante es, efectivamente, la historia de Xenu, el dictador alien¨ªgena. Seg¨²n Touretzky, cuando un feligr¨¦s ha invertido suficientes cantidades de tiempo y dinero ¨C¨¦l estima que 200.000 d¨®lares¨C en sesiones de auditor¨ªa, queda libre para conocer el secreto otrora mejor guardado de la Cienciolog¨ªa. Entonces, cuando alcanza lo que se conoce como nivel de Operativo Thet¨¢n 3, se le deja en una habitaci¨®n a solas con unos documentos. Y se le revela el secreto del origen de la vida en la Tierra y de los problemas de sus habitantes. Un desertor demand¨® al fundador Hubbard y a la Iglesia en 1985 por da?os emocionales. En el juzgado present¨® unos documentos de la Iglesia que esta trat¨® de ocultar a toda costa, sin ¨¦xito. El diario The Los Angeles Times logr¨® publicar entonces la informaci¨®n que conten¨ªan.
¡°La Cienciolog¨ªa vivi¨® sus d¨ªas ¨¢lgidos en los setenta y ochenta, cuando aprender los secretos de la religi¨®n era algo atractivo. Ahora todos sus secretos est¨¢n en Internet. La Red lo ha cambiado todo para ellos", explica el experto David S. Touretzky
¡°Documentos obtenidos por The Los Angeles Times muestran que la Iglesia de la Cienciolog¨ªa cree que los males de la humanidad fueron causados por un dirigente cruel llamado Xenu, que vivi¨® hace 75 millones de a?os¡±, public¨® el peri¨®dico. ¡°Por lo general, los documentos sugieren que una de las mayores causas de problemas para la humanidad comenz¨® hace 75 millones de a?os, cuando el planeta Tierra, entonces conocido como Teegeeach, era parte de una confederaci¨®n de 90 planetas bajo el liderazgo de un dirigente cruel llamado Xenu. Entonces, como ahora, seg¨²n esos materiales, el problema principal era la superpoblaci¨®n¡ Xenu decidi¨® tomar medidas radicales para superar el problema de superpoblaci¨®n. Seres fueron capturados en la Tierra y otros planetas y se les vol¨® al menos a 10 volcanes en la Tierra¡ Los documentos aseguran que bombas de hidr¨®geno m¨¢s poderosas que ninguna que hoy exista se volcaron en los volcanes y destruyeron a la gente, pero liberando sus esp¨ªritus¡±. Esos esp¨ªritus se llaman thetanes, y las auditor¨ªas cienciol¨®gicas, a trav¨¦s de largas y costosas sesiones, ense?an a librarse de ellos, para alcanzar un estado supremo de control mental.
La historia puede parecer enrevesada, pero en conversaciones privadas, muchos cienci¨®logos piden que se la compare con las escrituras de otras religiones, como la cat¨®lica o el mormonismo. En EE UU, la Iglesia libr¨® una larga batalla contra el Gobierno a trav¨¦s de unas 2.000 demandas contra Hacienda, y con reiteradas peticiones de que se la considerara una organizaci¨®n exenta del pago de impuestos y por tanto sin ¨¢nimo de lucro. Al final, ambas partes llegaron a un acuerdo en 1993. Desde entonces, la Cienciolog¨ªa figura formalmente, al menos a nivel fiscal, junto al resto de religiones estadounidenses.
Sea Org, cienci¨®logos en el mar
El fundador de la Iglesia de la Cienciolog¨ªa, L. Ron Hubbard, decidi¨® a mediados de los a?os sesenta que ser¨ªa mejor para ¨¦l seguir con su labor espiritual en alta mar, libre de distracciones. Adquiri¨® diversos barcos (en la imagen, el m¨¢s emblem¨¢tico, 'Freewinds') y los tripul¨® con un peque?o ej¨¦rcito de j¨®venes entusiastas, muchos de ellos adolescentes, que le acompa?aron durante a?os por el Mediterr¨¢neo. A esa legi¨®n la llam¨® Sea Organization, o Sea Org, y a d¨ªa de hoy es lo m¨¢s parecido que tiene la Cienciolog¨ªa a una orden religiosa. Sus afiliados ¨Chay analistas que estiman que hay unos 6.000¨C viven un estilo de vida parco, casi monacal. Se dedican, entre otras cosas, a mantener las pertenencias de la Iglesia, por pagas que algunos desertores dicen que son magras. Y firman contratos por mil millones de a?os, ya que Hubbard pensaba que el alma humana es inmortal. Los integrantes de Sea Org se pueden casar, pero, seg¨²n muchos desertores, no pueden tener ni?os.
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