Los Obama, locos por Clooney

El flechazo entre Barack Obama y Hollywood es de sobra conocido, pero entre las estrellas de la meca del cine, el idilio entre el presidente de Estados Unidos y el actor George Clooney eclipsa a todos los dem¨¢s. El lunes por la noche, el dirigente dem¨®crata y su esposa Michelle, en una de las escasas entrevistas que han ofrecido juntos, reconocieron en p¨²blico su admiraci¨®n por el actor.

¡°Es un tipo estupendo¡±, coment¨® Obama a Nancy O¡¯Dell, presentadora de Entertainment Tonight. Su mujer apenas le dej¨® terminar la frase para puntualizar: ¡°Y muy guapo¡±. Entre bromas, Michelle coment¨® que entre el presidente y el actor deb¨ªa existir alg¨²n tipo de conspiraci¨®n secreta. ¡°Siempre que visita la Casa Blanca da la casualidad que yo estoy fuera en alg¨²n acto¡±, se quej¨®. Su marido tambi¨¦n reconoci¨® el poder de atracci¨®n de Clooney entre sus empleados: ¡°Cuando viene a visitarme veo mucho m¨¢s personal a mi alrededor¡±.

Siempre que Clooney visita la Casa Blanca da la casualidad que yo estoy fueran en alg¨²n acto¡± Michelle Obama

Durante la entrevista, que se grab¨® la semana pasada en Iowa, donde el matrimonio coincidi¨® en un acto de la campa?a electoral, Obama revel¨® que su amistad con el ganador de un Oscar se ciment¨® mucho antes de que ¨¦l se planteara ser presidente. ¡°En 2006 ¨¦l visit¨® Washington para denunciar el genocidio en Darfur y yo era un senador que se ocupaba de ese asunto. Nos conocimos cuando ¨¦l vino a testificar sobre la situaci¨®n en Sud¨¢n ante el Congreso¡±, explic¨®.

Esa no fue la ¨²nica vez que Clooney ha pisado el Capitolio para denunciar las matanzas de inocentes en el pa¨ªs africano. En marzo, reci¨¦n aterrizado de ese continente, el actor compareci¨® ante un comit¨¦ especial del Senado para dar cuenta de las atrocidades de las que hab¨ªa sido testigo. Al d¨ªa siguiente visitaba la Casa Blanca para trasladarle de primera mano su preocupaci¨®n al presidente. Menos de 24 horas despu¨¦s, era detenido junto a su padre y otros activistas por manifestarse ante la Embajada de Sud¨¢n del Norte en contra de la escalada de violencia por parte de su Gobierno.

La admiraci¨®n es mutua. Clooney se ha erigido en el mejor y m¨¢s efectivo recaudador de fondos para la reelecci¨®n del presidente. En la cena que ofreci¨® en su casa de Los ?ngeles en mayo, el actor reuni¨® 15 millones de d¨®lares (12,2 millones de euros), una haza?a que tratar¨¢ de repetir en su mansi¨®n junto al lago Como en Italia donde, a finales de agosto, tiene previsto organizar una velada similar.

Clooney se ha erigido en el mejor y m¨¢s efectivo recaudador de fondos para la reelecci¨®n del presidente

Sin embargo, como reconoci¨® el propio Obama, Clooney ¡°pone especial cuidado en no alardear de su relaci¨®n con el presidente¡± para evitar que se multipliquen los reproches de la prensa y del Partido Republicano que acusan al jefe del Estado de su desmedida atracci¨®n por las estrellas de Hollywood. Estos cuatros a?os de mandato, sin embargo, parecen haber limado la fascinaci¨®n de la industria del cine por el presidente y, aunque mantiene intactos el apoyo de poderosos miembros de la industria del entretenimiento como el productor Harvey Weinstein, la editora de Vogue, Anne Wintour, o los actores Robert De Niro, Sarah Jessica Parker, Anne Hathaway o Morgan Freeman ¡ªque recientemente don¨® un mill¨®n de d¨®lares (813.000 euros) a su campa?a¡ª, el entusiasmo no es tan evidente como en 2008.

Durante la primera parte de entrevista que se emiti¨® el pasado lunes, Obama trat¨® asuntos menos banales, como el problema de las armas en EE UU y la forma en la que Hollywood trata la violencia. ¡°Se trata de una cuesti¨®n dif¨ªcil, en este pa¨ªs existe una cultura de las armas. Una de mis pel¨ªculas favoritas son las dos primeras partes de El padrino, probablemente unas de las cintas m¨¢s violentas, pero es mi responsabilidad como padre decidir c¨®mo y cu¨¢ndo quiero que mis hijas la vean, explicarles el contexto¡±. En la segunda parte, que se emiti¨® ayer por la noche, los Obama hablaron sobre la educaci¨®n de sus hijas en la Casa Blanca y del comienzo del instituto de Malia, la mayor.