Vacaciones en espa?ol para el presidente de Irlanda
Higgins pasa tres semanas en Santander perfeccionando su castellano
Como un alumno m¨¢s. As¨ª quer¨ªa el presidente de Irlanda, Michael D. Higgins, aprender espa?ol en la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo (UIMP) de Santander. Salvo por la seguridad que le ha acompa?ado durante las tres semanas de estudio, ha asistido a las cinco horas de clase diarias, con la carpeta roja, en id¨¦ntico pupitre y ante los mismos profesores que el resto de asistentes al curso de espa?ol intermedio.
El programa de estudios, que termin¨® el pasado viernes, inclu¨ªa excursiones culturales a varias ciudades c¨¢ntabras. Higgins, de 71 a?os, se subi¨® al autocar junto a sus compa?eros, la mayor¨ªa en la treintena, y recorri¨® distintos enclaves de la regi¨®n como Potes, San Vicente de la Barquera y Santa Mar¨ªa de Lebe?a. De esa excursi¨®n, dice, le gust¨® todo. Pero disfrut¨® especialmente el atardecer visto desde un mirador en Li¨¦bana. En el periplo pudo adem¨¢s comprobar las delicias de la gastronom¨ªa de la zona y desayun¨® la t¨ªpica corbata en Unquera.
El objetivo de Higgins no era solo deleitarse con el patrimonio gastron¨®mico y cultural c¨¢ntabros, sino que quer¨ªa mejorar su castellano, cuyo estudio ya hab¨ªa iniciado en su juventud. Por eso hace dos meses el presidente y su mujer rellenaron el formulario de solicitud para asistir a los cursos (cada uno en su nivel) de Lengua y Cultura de la UIMP. Y, una vez admitidos, pagaron los 500 euros por persona que cuesta. Como cualquier alumno.
La esposa del mandatario, Sabina Coyne, tambi¨¦n ha estudiado un curso de castellano
Dice que se decant¨® por una universidad p¨²blica espa?ola porque as¨ª se lo recomendaron diferentes diplom¨¢ticos. Reconoce que le gusto ¡°el tipo de programa¡± que le permit¨ªa reforzar el vocabulario que le interesaba ¡ª¡°pol¨ªtica, econom¨ªa y filosof¨ªa¡±¡ª. ¡°Tambi¨¦n me daba la oportunidad de profundizar en la cultura, la literatura y la poes¨ªa¡±, a?ade. Pese a destacar las bonanzas acad¨¦micas de la UIMP, no niega que adem¨¢s le atrajo la localizaci¨®n del campus santanderino, a escasos metros del mar.
?Por qu¨¦ quiere aprender castellano? ¡°Por mi relaci¨®n con la defensa de los Derechos Humanos en pa¨ªses de Hispanoam¨¦rica como Nicaragua, Colombia... y por mi deseo de apoyar a colectivos como las Madres de Mayo¡±, explica. Precisamente en octubre el mandatario irland¨¦s har¨¢ un viaje institucional a Argentina, Chile y Brasil; y reconoce que prefiere desarrollar su actividad como representante de Irlanda sin int¨¦rpretes. Y en buena medida lo podr¨¢ hacer. ¡°Ha mejorado sensiblemente¡±, afirma Lourdes D¨ªaz, vicerrectora de Lengua e Internacionalizaci¨®n de la UIMP. ¡°Quer¨ªa soltarse y ahora puede mantener conversaciones¡±, a?ade.
Higgins, del Partido Laborista y elegido en las urnas el pasado noviembre, es el primer presidente que asiste a un curso (como alumno) en la UIMP, aunque no es el primer mandatario que visita Espa?a en sus vacaciones. El primer ministro de Reino Unido, David Cameron es un habitual de Ronda (M¨¢laga), aunque este a?o descansa con su mujer y sus tres hijos en Mallorca. El que repite destino es el n¨²mero dos del Gobierno brit¨¢nico, Nick Clegg, que pasa unos d¨ªas en Olmedo (Valladolid), localidad natal de su esposa, Miriam Gonz¨¢lez. Pero sin duda una de las visitas m¨¢s sonadas fue la del ex presidente de EE UU, Bill Clinton, a la Alhambra en 1997. Las declaraciones que hizo el pol¨ªtico sobre el atardecer granadino dieron la vuelta al mundo.
Higgins, sin embargo, ha querido mantener su visita en el m¨¢ximo anonimato posible. Le ha acompa?ado en el viaje su esposa, la actriz retirada Sabina Coyne, quien tambi¨¦n ha realizado un curso de espa?ol en el nivel de iniciaci¨®n. Pese a su celo por salvaguardar su intimidad, ha sido imposible que los compa?eros de ambos no supieran quienes eran. Sobre todo los siete estudiantes que compart¨ªan aula con Higgins, algunos de nacionalidad irlandesa, que no pod¨ªan contener su asombro ante la circunstancia de que el presidente de su pa¨ªs estuviera all¨ª a su lado.
El mandatario alaba el programa de la UIMP y la ubicaci¨®n del campus
El diploma que ha recibido el presidente irland¨¦s certifica su nivel intermedio de castellano. Competencia que a?ade a su dominio del ga¨¦lico y el franc¨¦s, adem¨¢s del ingl¨¦s. En Espa?a, sin embargo, algunos pol¨ªticos han sido cuestionados por su falta de conocimientos de idiomas. El ¨²ltimo, el presidente valenciano, Alberto Fabra, en una visita al Centre de Idiomes de la Universitat de Val¨¨ncia. Uno de los alumnos le recrimin¨® que los dirigentes pol¨ªticos no tengan titulaciones de conocimientos de valenciano y se quej¨® de que algunos de ellos incluso se jacten de que no entienden el ingl¨¦s. En mayo de 2011 la alcaldesa de Valencia, Rita Barber¨¢, rehus¨® comentar un art¨ªculo en el New York Times sobre Francisco Camps porque no hablaba ingl¨¦s. Tambi¨¦n el ex presidente del Gobierno Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero fue objeto de cr¨ªticas cuando necesit¨® de int¨¦rpretes al fallar la traducci¨®n simult¨¢nea durante una reuni¨®n con l¨ªderes internacionales del Foro Econ¨®mico Mundial de Davos en 2010.
Pero, adem¨¢s del idioma, al mandatario irland¨¦s le interesaba profundizar en el conocimiento de las culturas espa?ola y latinoamericana y la relaci¨®n entre ambas. Por eso ha mantenido largas conversaciones al respecto con el profesor Fernando Abascal. ¡°Me sorprendi¨® su ¨®ptica humanista y su sensibilidad por temas sociales¡±, afirma el maestro. ¡°Es humilde e insiste en querer entender a los otros¡±, a?ade. Abascal asegura haberse sentido ¨¦l mismo el alumno. ¡°Le llamaba profesor Higgins y ¨¦l se re¨ªa¡±, recuerda.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.