?Con qui¨¦n se casan los Grimaldi?
Andrea Casiraghi se casar¨¢ en 2013 con su prometida, Tatiana Santo Domingo La heredera es miembro de uno de los clanes m¨¢s poderosos de Colombia y Am¨¦rica Latina As¨ª son las credenciales familiares que han logrado el visto bueno de la princesa Carolina
Los Santo Domingo acostumbran a recibir el a?o nuevo en su casa de la isla de Bar¨², en el Caribe colombiano. Es la ¨²nica fecha en que toda la familia se re¨²ne, porque no es f¨¢cil que sus m¨²ltiples actividades ¨Csociales y empresariales¨C les dejen otra oportunidad. Cuando 2006 estaba a punto de concluir, invitaron a Carolina de M¨®naco y su hijo Andrea Casiraghi.
Era la segunda vez que Andrea estaba entre la familia de su novia, Tatiana Santo Domingo, pero la primera que hab¨ªa ido acompa?ado por su madre. Andrea y Tatiana llevaban poco m¨¢s de un a?o de noviazgo; ella ya hab¨ªa conocido a los Grimaldi cuando asisti¨® en 2005 a la entronizaci¨®n del pr¨ªncipe Alberto, hab¨ªa recibido la aprobaci¨®n de do?a Carolina (quien defini¨® a la joven como ¡°rica, guapa y educada¡±, seg¨²n le han atribuido) y le pareci¨® buena idea que su futura suegra conociera a su familia. Fue el momento id¨®neo. Dos a?os despu¨¦s mor¨ªa el que ser¨ªa su consuegro, y otros dos a?os m¨¢s tarde, el hist¨®rico pilar de la estirpe.
La mayor¨ªa de la prensa colombiana se limita a hacer eco de los ¨¦xitos econ¨®micos y filantr¨®picos de la familia Santo Domingo. Solo algunos medios se atreven a cuestionarla
Los Santo Domingo son el clan que encabeza la jet-set de Colombia, la ¡°familia bien¡± alejada de los esc¨¢ndalos propios de otros miembros de la clase alta local. En las revistas de la Editorial Semana, las m¨¢s le¨ªdas del pa¨ªs, por ejemplo, se limitan a hacer eco de sus ¨¦xitos econ¨®micos y filantr¨®picos. Solo algunos medios se atreven a cuestionarlos. Hace casi un a?o, Jorge Ospina Sardi, columnista del sitio web LaNota.com, especializado en informaci¨®n financiera, escribi¨® acerca del ¡°jefe del clan¡±: ¡°Su omnipresente injerencia en la pol¨ªtica de Colombia, su irrestricto apoyo a l¨ªderes pol¨ªticos altamente cuestionados como Ernesto Samper y a otros claramente vinculados con el narcotr¨¢fico, su pat¨¦tica manipulaci¨®n de esta clase pol¨ªtica a favor de sus intereses, lleva a calificarlo como protagonista de primer nivel de ese capitalismo proteccionista y de connivencia, basado en el tr¨¢fico de influencias, que tanto da?o ha hecho en Am¨¦rica Latina. Un contubernio entre gobierno y gran empresa para restringir competencia, obtener licencias exclusivas de negocios y favorecimientos de toda clase¡±.
Pero para la mayor¨ªa los Santo Domingo son, simplemente, multimillonarios, fil¨¢ntropos y amantes del arte; aquellos que prefieren Nueva York para vivir, pero realizan constantes viajes a Bogot¨¢, Cartagena, Barranquilla o Par¨ªs, principalmente. Que aparecen una y otra vez en las listas de los m¨¢s guapos, los solteros m¨¢s codiciados, los m¨¢s elegantes, los m¨¢s h¨¢biles inversionistas o los m¨¢s solidarios.
Discreci¨®n hipermedi¨¢tica
¡°Cuando vamos a un desfile y hay tantos fot¨®grafos, pienso: Dios m¨ªo, s¨ª que deben estar qued¨¢ndose sin ¡®celebrities¡¯¡¡±, explicaba sobre su propia fama Tatiana Santo Domingo en una de sus rar¨ªsimas entrevistas, concedida a la edici¨®n espa?ola de ¡®Vanity Fair¡¯ en marzo. Pese a frecuentar los c¨ªrculos de la ¡®jet-set¡¯ internacional, la heredera aborrece los flases y cultiva un estilo alejado de la pomposidad propia de otras medi¨¢ticas herederas, como Paris Hilton. ¡°Sea como sea, ?Paris tambi¨¦n trabaja!¡±, defend¨ªa en la misma revista. ¡°A todo el mundo le gusta inventarse cuentos de hadas sobre princesitas que pueden hacer lo que les d¨¦ la gana, cuando hay gente privilegiada que incluso as¨ª lucha por encontrar algo que le apasione, construir sobre ello y no tirar por la borda el dinero que sus padres le han dejado¡±.
El patriarca, Julio Mario Santo Domingo, form¨® un emporio industrial que en su mejor ¨¦poca lleg¨® a tener 140 empresas, como Bavaria ¡ªuna de las mayores cerveceras del mundo¡ª, la aerol¨ªnea Avianca, la aseguradora Colseguros, el canal Caracol Televisi¨®n, el diario El Espectador y la operadora Orbitel. Lo tachaban de ¡°dandi mujeriego¡± hasta que un d¨ªa sent¨® la cabeza y se cas¨® con Edyala Braga, una socialite brasile?a, cercana al dictador Getulio Vargas. Tuvieron un hijo, Julio Mario Santo Domingo Braga ¨Cbanquero y promotor cultural, padre de Tatiana, muerto en 2009¨C. Al poco tiempo se divorciaron.
El patriarca volvi¨® a casarse con otra socialite, pero esta vez colombiana: Beatrice D¨¢vila. Se fueron a vivir a Nueva York, al d¨¦cimo piso del m¨ªtico edificio marcado con el n¨²mero 740 de Park Avenue ¨Cque tambi¨¦n fue hogar de los Rockefeller, los Vanderbilt o los Guggenheim¨C, entre cuadros de Picasso, Dal¨ª y Magritte, mirando al sur de Manhattan. Y ah¨ª falleci¨® el pasado mes de octubre, a los 87 a?os de edad. Tuvo tiempo, sin embargo, de inaugurar un a?o antes el colosal centro cultural que lleva su nombre en la zona norte de Bogot¨¢. Siempre se ufan¨® de ser uno de los que ve¨ªa en la cultura el remedo para la violencia que durante a?os ha aquejado a la sociedad colombiana.
Muerto su primog¨¦nito ¨Cque, adem¨¢s de Tatiana, tuvo otro hijo, y a ambos les corresponde su parte del legado¨C, los herederos de la fortuna, el prestigio y la labor de los Santo Domingo son los dos hijos que tuvo con Beatrice: Alejandro y Andr¨¦s.
Hace unos meses, cuando Alejandro Santo Domingo D¨¢vila asumi¨® las riendas del grupo empresarial de su familia, se convirti¨®, con 35 a?os de edad, en el segundo hombre m¨¢s rico de Colombia (despu¨¦s del banquero Luis Carlos Sarmiento Angulo). Con 9.500 millones de d¨®lares, es el millonario n¨²mero 97 del mundo, seg¨²n Forbes. Estudi¨® historia en la Universidad de Harvard y se form¨®, animado por su padre, como banquero de inversi¨®n en Nueva York, donde hoy es miembro de la junta directiva del Museo Metropolitano de Arte. Elegante y atractivo, desde hace a?os es un asiduo del papel cuch¨¦. Ha salido con Amanda Hearst, heredera del emporio de prensa que lleva su apellido, y las modelos Eugenia Silva, Karen Larrain y Julie Henderson, despertando la envidia de montones de chicas colombianas.
Hace unos meses, cuando Alejandro Santo Domingo D¨¢vila asumi¨® las riendas del grupo empresarial de su familia, se convirti¨®, con 35 a?os de edad, en el segundo hombre m¨¢s rico de Colombia
Andr¨¦s Santo Domingo D¨¢vila le deja las decisiones financieras a su hermano para centrarse en el mundo del arte y la m¨²sica. En enero de 2008 se cas¨® con Lauren Davis, antigua estilista de la edici¨®n estadounidense de Vogue. La boda fue en Cartagena de Indias y cont¨® con 400 invitados; entre ellos, Barbara Bush, hija del expresidente George Bush, e Ivanka Trump. Andr¨¦s y Lauren han tenido un hijo y viven en Gramercy Park (Nueva York). Ella vende ropa de grandes firmas de moda a trav¨¦s de la exitosa web Moda Operandi y ¨¦l tiene una productora de m¨²sica, Kemao.
Tatiana y Julio III son los hijos de Julio Mario Santo Domingo Braga y la brasile?a Vera Rechulski. Julio III tiene 27 a?os, es el menor de toda la familia y es dj desde 2008.
Desde que inici¨® su noviazgo con Andrea Casiraghi, Tatiana ¨Ccari?osamente, Tats¨C ha globalizado su apellido como ning¨²n otro miembro del clan. Se critica el hecho de que se la considere una de las ¡°colombianas m¨¢s famosas¡± a pesar de que no naci¨® en el pa¨ªs, solo lo visite unos d¨ªas al a?o y no pueda ocultar cierto deje estadounidense al hablar espa?ol. Junto a su novio forman un blanco predilecto de paparazis y rumores: ?han roto?, ?est¨¢ embarazada? Se conocieron en Francia cuando iban al instituto y a?os despu¨¦s se reencontraron gracias a Carlota Casiraghi, hermana de Andrea. Tatiana y su amiga Dana Alikhani han recorrido varios pa¨ªses hasta confeccionar un cat¨¢logo de ¡°ropa multicultural¡± (para gypsetters como ellas: miembros n¨®madas de la jet-set) que venden como Muzungu Sisters. Andrea es el segundo en la l¨ªnea sucesoria al Principado de M¨®naco, despu¨¦s de su t¨ªo Alberto. Ambos, por fin, se casar¨¢n el pr¨®ximo a?o, seg¨²n lo anunci¨® a principios de este mes la princesa Carolina de M¨®naco. Tal vez la pr¨®xima Nochevieja Andrea y su madre vuelvan a la arena blanca de la isla de Bar¨² para planear entre familias los detalles de la boda.
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