Julio Iglesias canta en Malabo al dictador Teodoro Obiang
El artista justifica su actuaci¨®n en Guinea Ecuatorial con argumentos culturales ¡°No me han pagado por detr¨¢s, ni de forma rara¡±, asegura
Un sue?o cumplido, un lavado de imagen y un negocio a 750 euros la entrada. Teodor¨ªn Obiang Nguema Mangue, vicepresidente de Guinea Ecuatorial, ha logrado llevar a Malabo a Julio Iglesias para cantar ante lo m¨¢s granado del clan Momgomo, el que se reparte todos los cargos administrativos y pol¨ªticos del pa¨ªs, uno de los grandes productores de petr¨®leo y gas del ?frica subsahariana. Las entradas m¨¢s exclusivas solo estaban al alcance de los familiares y amigos del dictador, y su precio representa el sueldo de dos a?os de muchos guineanos, que en las zonas m¨¢s pobres del pa¨ªs viven con un d¨®lar al d¨ªa pese a que la renta per capita era de 34.843 d¨®lares en 2010, por encima de Jap¨®n, Francia y Espa?a.
Las advertencias al cantante de las ONG Human Rights ?Wacht y EG Justice sobre el vidrioso pasado y presente de los anfitriones y organizadores no sirvieron de nada. Tampoco la carta que ambas organizaciones le enviaron conmin¨¢ndole a suspender la actuaci¨®n, ni la petici¨®n de informaci¨®n sobre la organizaci¨®n del evento. ¡°Pedimos aclaraciones sobre la fuente de financiaci¨®n del concierto y el papel de Teodor¨ªn en el evento, pero no hemos recibido respuesta¡±, asegura Joseph Kraus, director de EG Justice.
El pasado lunes, el cantante se embot¨® en su ajustado esmoquin negro y cant¨® en el Palacio de Conferencias de Sipopo, a las afueras de Malabo, ante 1.000 personas. La entrada m¨¢s barata cost¨® 80 euros. En un lugar preferente estaba el dictador Teodoro Obiang Nguema Mbasogo; su esposa, Constancia Mangue, y su hijo Teodor¨ªn, de 43 a?os, contra el que la justicia francesa ha dictado una orden de detenci¨®n por desv¨ªo de fondos p¨²blicos, blanqueo, abuso de bienes sociales y abuso de confianza. Junto a ellos, todos sus ministros, las mujeres de los presidentes de Ghana y Zimbabue y representantes de embajadas de 50 pa¨ªses.
Julio Iglesias viaj¨® a Malabo acompa?ado de un equipo de 35 personas, ha vuelto fascinado del cari?o recibido y asegura que nadie le advirti¨® de los problemas judiciales de Teodor¨ªn y de que era su productora, TNO, la que organizaba el evento: ¡°Estuvieron todo el Gobierno y las primeras damas de varios pa¨ªses africanos. Cuando las saludo, yo no les pregunto si sus maridos son unos corruptos. No sab¨ªa que el hijo de Obiang ten¨ªa problemas judiciales. All¨ª hay una embajada espa?ola y muchas empresas de nuestro pa¨ªs. Nunca me plante¨¦ no ir¡±, afirma por tel¨¦fono.
El artista defiende su visita con argumentos hist¨®ricos y culturales. ¡°Desde que baj¨¦ del avi¨®n sent¨ª un gran cari?o. Lo espa?ol es muy apreciado. Sent¨ª que la gente cantaba mis canciones, que hablaba nuestro idioma. Son generos¨ªsimos con los espa?oles. Nosotros dejamos all¨ª un pa¨ªs pobre y miserable, nunca nos mezclamos demasiado con ellos. Tenemos una deuda muy grande con el pueblo guineano¡±.
¨C?Y la pobreza y corrupci¨®n rampante del Gobierno que denuncian todas las ONG internacionales y que investiga la justicia estadounidense, francesa y espa?ola?
¨CHe visto la miseria profunda en toda ?frica. La conozco bien, pero si usted me hubiera acompa?ado, habr¨ªa visto que el pa¨ªs ha mejorado, que se ha desarrollado. Hay una gran inversi¨®n de Espa?a, EE UU y China.
¨CEl Gobierno de Obiang no autoriza la entrada de la prensa cr¨ªtica en su pa¨ªs.
¨CNo lo sab¨ªa. No sab¨ªa que la prensa espa?ola est¨¢ vetada all¨ª. Yo no he ido como investigador, he ido como cantante, y lo he pasado de maravilla. He sentido un espa?olismo especial. No fuimos muy cari?osos con ellos cuando nos fuimos de all¨ª.
¨CPero sabe lo que pasa all¨ª.
¨CSoy un poco periodista, me encanta hablar con toda la gente, preguntar c¨®mo viven y lo que hacen. Mi visita est¨¢ basada en la cultura, en la lengua, en mi inter¨¦s por enterarme de nuestra ¨¦poca colonial en ese pa¨ªs, en las conversaciones con gente pobre y sencilla. Las tres personas que me serv¨ªan en el hotel me dijeron que ganaban 350 euros al mes y que ten¨ªan seguro m¨¦dico.
Pese a los recursos naturales de Guinea Ecuatorial, distintos organismos internacionales aseguran que un 70% de los guineanos (el pa¨ªs tiene unos 700.000 habitantes) vive en la pobreza. La mayor¨ªa de la poblaci¨®n carece de agua y electricidad. La esperanza de vida roza los 50 a?os. El Gobierno niega estas estad¨ªsticas.
La gira de Julio Iglesias aparece detallada en su p¨¢gina web, pero la parada en Malabo no figura. Ha sido Teodor¨ªn el que anunci¨® el evento en su cuenta de Facebook con una fotograf¨ªa de uno de los carteles con los que se empapelaron varias ciudades guineanas y en el que aparece una imagen del cantante bajo el t¨ªtulo I World Tour Julio Iglesias en Malabo. El portal online oficial del Gobierno ha aprovechado la visita del cantante para difundir la visi¨®n positiva del artista sobre el pa¨ªs.
¡°Aclare qu¨¦ pasos han dado o van a dar para asegurarse que el concierto y sus emolumentos no han sido financiados por fondos obtenidos il¨ªcitamente en parte o su totalidad¡±, reclamaron las ONG al cantante en la carta en la que le ped¨ªan que no actuara. ¡°No me han pagado por detr¨¢s ni de forma rara¡±, asegura ahora el cantante.
Teodor¨ªn, el ex ministro de Agricultura y Bosques que cobraba el 10% a los empresarios que exportaban madera de Guinea, es un cantante frustrado. Durante sus primeros a?os en Par¨ªs intent¨® sin ¨¦xito grabar un disco. Su nombre art¨ªstico era Teddy Bear. Entonces viv¨ªa en el hotel Crillon, donde alquil¨® una planta. Ahora la justicia francesa le ha embargado un edificio de 5.000 metros y 101 habitaciones en el n¨²mero 42 de la avenida Foch, junto al Arco del Triunfo, y ha ordenado su detenci¨®n. Desde entonces se ha refugiado en sus mansiones palacios de Bata y Malabo ante el temor de ser detenido.
El cerco judicial a Teodor¨ªn se estrecha en distintas partes del mundo. Dentro de varias semanas, una comisi¨®n rogatoria internacional visitar¨¢ Madrid para interrogar en la sede de la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n a Germ¨¢n Pedro Tomo, de 52 a?os, residente en Espa?a desde 2004 y exdiputado del Partido Democr¨¢tico de Guinea Ecuatorial (PDGE), el partido del dictador Obiang. Tomo asegura que pag¨® comisiones ilegales a Teodor¨ªn ¡°hasta que no pude m¨¢s¡±. ¡°Todos pag¨¢bamos. Si no pagabas, no exportabas¡±.
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