China censura otra vez

El primer ministro de China, Wen Jiabao, ha sido descrito a menudo como populista y reformista e incluso se lo ha llamado el Abuelo Wen, por su af¨¢n de conectar con la gente corriente. Una de sus consignas ha sido la de que todos los funcionarios deb¨ªan declarar sus bienes, y los de sus familias, para combatir as¨ª la corrupci¨®n. Sugiri¨®, adem¨¢s, que esa informaci¨®n deb¨ªa hacerse p¨²blica.

El pasado viernes, The New York Times le tom¨® la palabra al se?or Wen y public¨® un reportaje en el que mostraba los activos que controla su familia, valorados en 2.700 millones de d¨®lares y que incluyen intereses en bancos, joyer¨ªas, centros tur¨ªsticos, empresas de telecomunicaciones y proyectos de infraestructuras. (...)

En cuanto el art¨ªculo fue publicado, los censores chinos de Internet olvidaron los deseos de transparencia del se?or Wen. Se bloquearon de inmediato las p¨¢ginas web del Times, tanto en chino como en ingl¨¦s, para que millones de ciudadanos no pudieran acceder al informe. Tambi¨¦n se bloquearon los comentarios sobre el tema en redes sociales como Weibo, el equivalente chino de Twitter. (...)

M¨¢s all¨¢ del desconcierto del se?or Wen, los l¨ªderes chinos est¨¢n sentados en un barril de p¨®lvora. La c¨®lera popular crece d¨ªa a d¨ªa por la cada vez mayor diferencia entre ricos y pobres y la corrupci¨®n oficial. (...)

M¨¢s que desconectar Internet, el se?or Wen deber¨ªa ratificar sus deseos de transparencia. A largo plazo, es el ¨²nico camino para ganarse la confianza del pueblo chino y la ¨²nica manera de convertirse en una verdadera superpotencia en el mundo de hoy

Washington, 27 de octubre