Michelin 2013 ?a qui¨¦n intentan enga?ar?
Al final lo que iba a ser una supuesta lluvia de estrellas, seg¨²n me hab¨ªa comentado ?ngel Pardo, jefe de relaciones externas de la casa, se qued¨® en un simple chaparroncillo. M¨¢s de lo mismo. La verg¨¹enza de siempre.En total 20 estrellas nuevas que si se restan las 8 suprimidas se quedan en 12 raqu¨ªticos galardones. Ese es el balance de 2013.
No cuestiono las que han otorgado a Espa?a. Nada. Sus criterios de valoraci¨®n son respetables. En lo que yo vuelvo a insistir -- una edici¨®n m¨¢s -- es en su mezquina cicater¨ªa y en el ultraje que Michelin hace a nuestro pa¨ªs en relaci¨®n con otros europeos. Convicci¨®n a la que llega por s¨ª solo todo aficionado que viaje con frecuencia.
Si en Italia con 60.340.000 millones de habitantes hab¨ªa 295 estrellas, en Espa?a con 47 millones tendr¨ªa que haber 229. Como en 2012 solo ten¨ªamos 139 el d¨¦ficit real era de 90. Es decir, a igualdad de condiciones los inspectores italianos de Michelin habr¨ªan otorgado a Espa?a 90 estrellas m¨¢s de las que tuvimos en la edici¨®n pasada. Suponiendo que el nivel gastron¨®mico de Espa?a fuera tan bajo como el de Alemania sus inspectores nos habr¨ªan otorgado 50 estrellas m¨¢s. Los holandeses nos habr¨ªan dado 149 adicionales y los suizos, aplicando los criterios de su pa¨ªs, que tiene pocos habitantes y muchas estrellas, nos habr¨ªan regalado la friolera de 428 estrellas adicionales. Diferencias que al parecer se siguen acentuando con las ediciones 2013 que se est¨¢n presentando estos d¨ªas y las noticias que me llegan de otros pa¨ªses.
O en Espa?a se come mucho peor que en ning¨²n lugar de Europa, cosa incierta, o los inspectores espa?oles, Benito Lamas y su equipo, desconocen por completo su oficio. El asunto no pasar¨ªa de anecd¨®tico si no fuera porque esta gu¨ªa orienta a muchos de los turistas que nos visitan. El quebranto econ¨®mico que causan a la hosteler¨ªa espa?ola es brutal, desmesurado.
Un ¨²ltimo detalle: en la banda de los tres estrellas, que al parecer supervisan inspectores franceses, s¨ª estamos a la altura de otros pa¨ªses. Conclusi¨®n: no hay complot contra nuestro pa¨ªs, sino torpeza infinita de los inspectores espa?oles. Hasta que llegue el momento de que Lamas se jubile me brindo a descubrirle las decenas de estrellas que nos faltan. Por s¨ª solo nunca van a saber donde se encuentran. Lo primero que deber¨ªa hacer la nueva directora de Michelin, Mayte Carre?o, es ponerlo a viajar por Europa. En twiter:@JCCapel
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