Locura inmobiliaria y desahucios
Conservo n¨ªtidamente en mi memoria las im¨¢genes y los sonidos de la especulaci¨®n y la locura inmobiliaria. Recuerdo las urbanizaciones que surg¨ªan como hongos por doquier, las ciudades repletas de gigantescas y escu¨¢lidas gr¨²as girando por encima de nuestras cabezas. Los camiones hormigonera volteando incansables en su eterno trasiego. El sonido met¨¢lico de las paletas de los alba?iles asentando ladrillos y a las familias alborozadas visitando el piso piloto y firmando hipotecas tramposas y abusivas en los bancos.
Hoy, aquella euforia colectiva provocada por el dinero f¨¢cil y barato, aquella burbuja inmobiliaria que a todos nos envolvi¨® en mayor o menor grado, se ha convertido en pesadilla, en desamparo, l¨¢grimas y tristeza. Es una tragedia para miles de familias desahuciadas. Hoy, aquellas gr¨²as que anta?o coronaban las ciudades como s¨ªmbolo de progreso y que serv¨ªan para construir torres de babel que pretend¨ªan alcanzar el cielo, se han convertido en pat¨ªbulos donde crucificar a quienes, ingenuamente, se creyeron que la vivienda era un derecho constitucional que amparaba tambi¨¦n a los pobres.¡ª Pedro Serrano Mart¨ªnez
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