Crisis en el mar del buen rollo

Las campa?as veraniegas de Estrella Damm deben de ser la poluci¨®n nocturna de cualquier publicitario. Para m¨ª representan todo a lo que yo aspirar¨ªa si me dedicara a la noble profesi¨®n de incitar a la compra: est¨¢n rodadas a todo trapo, aparecen en muchos medios por la patilla porque se consideran noticia o pseudonoticia, se difunden como pocas por las redes sociales y, con los a?os, han construido una tradici¨®n que las convierte en aviso prevacacional.

Sin embargo, intuyo que algo empieza a enturbiar las l¨ªmpidas aguas color turquesa del Mediterr¨¢neamente. No hablo de la calidad t¨¦cnica de los anuncios, siempre excelente, ni del retrato que hacen del Mare Nostrum, que sigue siendo tan falso como apropiado: todos preferimos so?ar con cervecitas heladas en pinares impolutos y calas semidesiertas que encarar la cruda realidad de una costa anegada en cemento y atiborrada de turistas, m¨¢s cercana simb¨®licamente a la litrona.

Me refiero a que la serie puede haber llegado a cierto punto de agotamiento, y que el entusiasmo inicial del p¨²blico est¨¦ torn¨¢ndose poco a poco en irritaci¨®n. Miren si no la micropol¨¦mica internetera con el arroz que prepara el grupo protagonista del anuncio, Love of Lesbian. No s¨¦ si los barceloneses han calibrado con qui¨¦n se est¨¢n enfrentando, pero los gastroortodoxos est¨¢n on fire porque le echan no s¨¦ qu¨¦ y no s¨¦ cual, lo que en su nada humilde opini¨®n constituye un insulto a la aut¨¦ntica paella valenciana. ?En alg¨²n momento se dice que es paella valenciana? No. Pero el personal est¨¢ tan de u?as que ni permite a estos se?ores elegir para su arroz los ingredientes que les salgan del azafr¨¢n.

Desde una visi¨®n m¨¢s c¨®mica y menos plasta, pero igual de cr¨ªtica, algunos tuiteros se burlan del argumento del spot, una comida campestre con amigos guap¨ªsimos y superenrollados que deriva en fiestuqui nocturna, actuaci¨®n, baile, besos ¡ªtodos heteros salvo uno timid¨ªsimamente l¨¦sbico¡ª y el inevitable ba?o en bolas de ¨²ltima hora. Para agrupar sus comentarios han creado una de las etiquetas m¨¢s brillantes del a?o, que interpreta el anuncio en clave qu¨ªmica: #EstrellaMDMA.

Al final puede que Damm acierte, que los esc¨¦pticos sean minor¨ªa y el consumidor medio contin¨²e encantado con estas fantas¨ªas de cielo azul. Pero no s¨¦ yo si est¨¢ el ambiente para tanta alegr¨ªa, tanta holganza y tanto buen rollito, en un a?o en el que el veraneo espa?ol, para el que lo tenga, ser¨¢ m¨¢s austericida que nunca. Y con mal tiempo.