Perros de presa

Ha sido muy celebrada la ocurrencia del Ayuntamiento de Brunete de empaquetar y reenviar los excrementos de las mascotas al domicilio de sus due?os, con la advertencia de multa en caso de reincidir. En otros muchos lugares estudian la aplicaci¨®n de esta medida tan persuasiva ya conocida como Caca Express. Yo me acord¨¦ del Fondo Monetario Internacional. Fue una asociaci¨®n autom¨¢tica, instant¨¢nea e inmediata. ?C¨®mo podemos devolverle todas las ruinas al FMI ahora que sus portavoces reconocen que sus informes sobre Grecia eran una mierda precipitada? Al parecer, le fallaron los ¡°multiplicadores¡±. Es una pena que estos grandes expertos no sepan contar con los dedos. Ignoran que para tratar con personas hay que contar de una en una. Las bocas tienen hambre de una en una. Pero ellos aplican el ¡°multiplicador¡± y, claro, a veces se les confunde el parque automovil¨ªstico con la caba?a bovina o con el censo de poblaci¨®n. Tendr¨ªamos que empaquetar los informes del FMI y reenviarlos al Departamento de Culpas como Caca Express, una vez revisados con el ojo trasero. Tambi¨¦n me he acordado mucho estos d¨ªas de las mascotas del se?or Oscuro. ?Qu¨¦ fue de Moody¡¯s, Standard & Poor¡¯s y Fitch? Dejaron las calles, las playas y las esperanzas del Sur de Europa hechas un asco. D¨ªa tras d¨ªa, en los informativos, en directo, o¨ªamos aterrados c¨®mo los perros de presa acud¨ªan a la llamada del se?or Oscuro, excitado por las econom¨ªas desnudas, s¨²bitamente expuestas e indefensas. ?Mooooody¡¯s! ?Fitch, Fitch, Fitch! Con qu¨¦ velocidad, con qu¨¦ eficacia trituradora convert¨ªan valores en despojos. Uno tambi¨¦n siente una insana nostalgia del miedo, de la magia deconstructiva de las agencias de calificaci¨®n. ?D¨®nde andar¨¢n? Puedo oler su mierda esparcida como los bonos basura. Tal vez no est¨¦n muy lejos y esperan el silbido. O simplemente las mascotas ya son el amo. Y gobiernan con los fant¨¢sticos informes del FMI.

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