?Qui¨¦n es Bob Colacello?
El peri¨®dista que escribi¨® sobre el rey Juan Carlos y la princesa Corinna explica c¨®mo ella le cont¨® c¨®mo se distribuyeron las caba?as de Botsuana: "El Rey, en la suya; no hubo "hanky-panky"
Bob Colacello se ha hecho repentinamente conocido en nuestro pa¨ªs como el prestigioso periodista americano que ha escrito un art¨ªculo en la edici¨®n internacional de Vanity Fair sobre el rey Juan Carlos, Espa?a y la conflictiva princesa Corinna.
Colacello est¨¢ entre los mitos fundacionales de mi generaci¨®n. Sus cr¨®nicas sociales del Nueva York de finales de los setenta y principios de los ochenta, publicadas en la revista Interview de Andy Warhol, cimentaron el mito de Studio 54 como mucho m¨¢s que una discoteca y transformaron el lenguaje gacetillero, una retah¨ªla de nombres que danzan siempre en los mismos bailes, en una reflexi¨®n sobre su tiempo y su pa¨ªs despu¨¦s de la debacle de Vietnam y durante una profunda recesi¨®n econ¨®mica. Colacello tambi¨¦n form¨® parte del n¨²cleo de personas que colaboraron en hacer de Warhol una poderosa empresa art¨ªstica. La monta?a rusa que fueron sus a?os al lado del pintor est¨¢n vivamente analizados en su libro Holy terror: Andy Warhol up close, que ser¨¢ reeditado (¡°y actualizado, no deja de morirse gente¡±) la pr¨®xima primavera.
Desde los a?os ochenta, Bob Colacelllo es una de las firmas estrella del Vanity Fair americano. Legendarias son sus cr¨®nicas sobre la princesa Gloria von Thurn und Taxis cuando era alocada y celebraba su cumplea?os vestida de Mar¨ªa Antonieta. O los solitarios ¨²ltimos d¨ªas de Sao Schlumberger, una sofisticada millonaria del petr¨®leo. Su visita a Madrid fue durante un receso de su pr¨®ximo libro: la biograf¨ªa de Nancy Reagan.
Dentro del extenso reportaje sobre nuestro Monarca, que es tambi¨¦n una radiograf¨ªa hecha en Estados Unidos sobre la salud actual de Espa?a, su conversaci¨®n con Corinna no ha parado de dar titulares. C¨®mo se preocupa por la salud de su amigo el Rey o que ¨¦l le llame con frecuencia para preguntarle por sus hijos. Es muy del estilo Colacello cuando explica c¨®mo se distribu¨ªan las caba?as en la expedici¨®n a Botsuana: ¡°El Rey en su caba?a, mi primer marido y mi hijo en otra, yo en la m¨ªa. No hubo hanky-panky¡±, una expresi¨®n muy cowboy para referirse al cachondeo. Resulta igualmente muy americano su inter¨¦s por saber c¨®mo se amas¨® la discreta fortuna de ¡°2.000 millones de d¨®lares¡± del Monarca.
Desde los a?os ochenta, Bob Colacelllo es una de las firmas estrella del 'Vanity Fair' americano.
En su visita a Madrid, Colacello y yo nos reunimos en el hotel Ritz. Con traje oscuro, el pelo perfecto, una peque?a libreta en vez de grabadora y sus ojos protegidos por espesas gafas. Se expresa con un s¨®lido acento neoyorquino, voz grave y el deleite de disfrutar con el idioma. Tomaba notas con parsimonia al mismo tiempo que atend¨ªa su m¨®vil, que no es smartphone. Le interesaba saber si era cierto que B¨¢rbara Rey hubiera visto invadida su intimidad por unos supuestos v¨ªdeos secretos. Y encontraba hilarantes sus contenidos, que le hab¨ªan relatado en cenas tanto en Manhattan como Madrid. Se entusiasm¨® cuando le cont¨¦ que en Madrid se supo de Corinna porque se llevaba a la mejor manicurista de la alta sociedad local en sus viajes. ¡°Siempre pasa as¨ª, ?no?, lo gordo empieza por las cosas m¨¢s peque?as¡±, dijo.
El art¨ªculo que ha escrito a prop¨®sito del esc¨¢ndalo que sobrevuela a la Corona es, en efecto, un warhol agoyescado sobre el pa¨ªs que vivimos cada d¨ªa. Y me apena que no use WhatsApp porque no puedo enviarle la canci¨®n del momento: Caf¨¦ con leche Remix. En la exitosa microcan-ci¨®n el acento de la alcaldesa de Madrid suena como el de nuestras madres cuando quieren parecer mundanas. Pero el resultado es muy pegadizo y bailable. Cuando ella dice en su ingl¨¦s ¡°Madrid es lo m¨¢s maravilloso en the world¡±, el ritmo enloquece repitiendo in the wol, in the wol... es una risa. A la alcaldesa le han venido genial estas clases de ingl¨¦s, la han hecho no solo m¨¢s popular sino tambi¨¦n m¨¢s discotequera. Aunque confirma que la que paga todo el desaguisado es ella mientras que a los dem¨¢s les sale gratis el caf¨¦ con leche. No ha pasado tanto ¡ªel martes de la semana pasada¡ª desde que los peri¨®dicos dedicaran portadas a la alcaldesa y el Pr¨ªncipe caminando maravillosos en Buenos Aires. Ahora ella es la ¨²nica solista de la canci¨®n de verano, cuando este se apaga, igual que su carrera pol¨ªtica.
Quiz¨¢s por eso ha vuelto a sonar la canci¨®n del retorno de Esperanza Aguirre a la pol¨ªtica, pero insinuando que a ella puede quedarle peque?o el traje que a Botella le quedaba grande y, finalmente, mal ante el COI. Tambi¨¦n de repente Corinna ha vuelto a cantar, esta vez en la entrevista de Colacello. Pareciera que a pesar de la facilidad con la que se ocult¨® durante a?os, ahora costar¨¢ much¨ªsimo alejarla de los titulares y del coraz¨®n de Madrid. Pero estas canciones no deber¨ªan silenciar la gran balada de septiembre: Cristiano y Gareth. En la foto est¨¢n salud¨¢ndose cual superh¨¦roes con sus respectivos neceseres bien sujetos bajo el brazo. El de Gareth Bale es de chico casado, m¨¢s cargado de ilusiones que de desodorantes. El de Cristiano, que combina varios tipos de piel, es m¨¢s abultado, repleto de experiencia, hidratantes, trucos y solter¨ªa. Frente a la pujanza latinoamericana del d¨²o Neymar-Messi, los reyes del Real Madrid son la demostraci¨®n de que, por maltrecha que est¨¦ Europa, su dominio est¨¦tico en cualquier campo es siempre caro pero irresistible.
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