¡®Auf wiedersehen¡¯, espa?ol

Sorprende que, coincidiendo con los fastos del VI Congreso Internacional de la Lengua Espa?ola en Panam¨¢, llegara tambi¨¦n la noticia de la supresi¨®n de profesores y reducci¨®n del n¨²mero de horas de ense?anza presencial en las Aulas de Lengua y Cultura Espa?ola (ALCE) a los hijos de los emigrantes espa?oles, que tiene en un clamor a toda la Espa?a exterior, mientras sigue sin o¨ªrse ni nada aqu¨ª, de fronteras para adentro.

Medito las palabras del se?or Vargas Llosa en la apertura del congreso de que tener el privilegio de una lengua de estas caracter¨ªsticas implica una obligaci¨®n, que al igual que la amistad y el amor, esas grandes experiencias de vida, necesita ser cuidada para ayudarla a crecer; y que necesitamos defender y cuidar nuestra lengua, no cerr¨¢ndonos a lenguas extranjeras, sino abriendo las ventanas de nuestro idioma para enriquecernos de otros lenguajes. Pienso despu¨¦s en los hijos de los espa?oles emigrados, a quienes se les reduce el 50% de las clases presenciales ¡ªno hay dinero para tantos profesores¡ª y me bulle en la cabeza el eco del se?or Vargas Llosa: necesitamos defender y cuidar nuestra lengua.

Me duele imaginar que con lo que, supuestamente, se le habr¨¢ pagado a don Mario por pontificar obviedades en ese congreso, se habr¨ªa garantizado para dos d¨¦cadas el mantenimiento de las aulas de espa?ol para los hijos de los emigrados. Piden solo una palabra c¨¢lida y sabedora, y una presencia personal de maestro frente ¡ªo junto¡ª a la fr¨ªa sabidur¨ªa online. Mejorar lo que hab¨ªa, no echarlo a perder. Su derecho a mantener el arraigo con Espa?a est¨¢ siendo abiertamente lesionado. ?Necesitamos defender y cuidar nuestra lengua! Con decisiones de estas, auf wiedersehen, espa?ol¡­ ?Vivan los congresos!¡ª Heliodoro Fuente Moral.