La desigualdad creciente

Pocas veces, el mismo d¨ªa, en las p¨¢ginas de un mismo peri¨®dico ( EL PA?S, 9 diciembre) se puede asistir a un contraste de pareceres tan clarificador.

Rajoy, en la entrevista concedida con motivo de su segundo aniversario en La Moncloa, mantiene que no hay que combatir con medidas espec¨ªficas la desigualdad creciente en nuestra sociedad. Piensa que la ¨²nica forma de hacerlo es que haya trabajo para todos, y que sus ¡°reformas estructurales¡±, como la laboral, pensadas para tal fin, ya han logrado una mayor flexibilidad y competitividad en nuestra econom¨ªa. Pero no explica que para ello, fundamentalmente, se han abaratado el despido y los salarios hasta l¨ªmites insoportables, lo que est¨¢ provocando esa desigualdad creciente contra la cual no cree que haya que hacer nada en especial.

El profesor Sandel parece contestarle desde las p¨¢ginas de Econom¨ªa cuando denuncia que los valores del mercado se est¨¢n imponiendo en ¨¢reas como la educaci¨®n o la sanidad, con lo que la desigualdad se est¨¢ agigantando. Todo est¨¢ en venta, nos dice, todo se prostituye si a todo se le pone un precio. As¨ª se perjudica gravemente la vida democr¨¢tica, remacha. Sandel, en definitiva, plantea el tema clave: los gobiernos s¨®lo se preocupan por c¨®mo resolver los problemas t¨¦cnicos del mercado y han olvidado los grandes temas ¨¦ticos como la justicia o el bien com¨²n. Por eso se han distanciado tanto de los ciudadanos.¡ª Luis de Lux¨¢n Mel¨¦ndez.