Diez razones para no cambiar la ley del aborto
El Gobierno no puede legislar para agradar a su electorado m¨¢s conservador
Cada d¨ªa nos acercamos m¨¢s a un cambio en sentido restrictivo de la actual ley de salud sexual y reproductiva y de la interrupci¨®n voluntaria del embarazo, aprobada por amplia mayor¨ªa en 2010, que el Partido Popular quiere modificar desde el mismo momento en que lleg¨® al Gobierno. Sin duda hay razones para cambiarla o mejorarla, pero el momento social, econ¨®mico y pol¨ªtico no parece el m¨¢s apropiado para empeorarla. Espa?a pasa por malos momentos y utilizar el aborto, por el que tanto sufren las mujeres, como moneda de cambio para contentar a los sectores m¨¢s conservadores de su electorado, no es justo con las mujeres ni con la sociedad.
Tras casi dos a?os de reiterados, y a veces contradictorios, anuncios por parte del ministro de Justicia, se?or Gallard¨®n, la principal raz¨®n esgrimida para este cambio es el compromiso adoptado en su programa electoral. Argumento poco consistente, no solo por los evidentes incumplimientos de la pr¨¢ctica totalidad de los compromisos electorales del actual Gobierno, sino porque ni siquiera se ajusta a la letra de lo comprometido. Entre introducir algunos cambios en la actual legislaci¨®n, especialmente en lo relativo a las j¨®venes de 16 y 17 a?os, y los dr¨¢sticos cambios que se avecinan, hay un gran trecho. Ni siquiera el sector m¨¢s aperturista del PP pod¨ªa presagiar que van a echar por tierra 28 a?os de legislaciones razonables.
En el caso del aborto, como en casi todo, hay razones para actuar de una u otra manera. Unas para imponer las propias creencias y deseos a los dem¨¢s y otras para respetar la autonom¨ªa de las mujeres para decidir sobre su cuerpo y su vida.
Nuestras razones para defender el mantenimiento de la actual ley son:
Una. Porque funciona. No se han cumplido las profec¨ªas de un incremento notable del n¨²mero de abortos ni se han producido en sus tres a?os de vigencia denuncias ni complicaciones sanitarias de ning¨²n tipo. Ha resuelto, pues, gran parte de los problemas de inseguridad jur¨ªdica que aquejaban a la ley anterior. Dos. Porque respeta a las mujeres. El reconocimiento de un plazo en el que las mujeres puedan decidir libremente sobre si quieren seguir adelante o no con su embarazo es la ¨²nica manera de no atropellar los derechos fundamentales de las mujeres embarazadas. Tres. Porque es conforme a la Constituci¨®n. Contrariamente a lo que se argumenta, la actual legislaci¨®n no es contraria a la doctrina del Tribunal Constitucional que nunca se ha pronunciado sobre una ley de plazos. Cuatro. Porque respeta mejor la vida en formaci¨®n. Establecer l¨ªmites y ofrecer a las mujeres informaci¨®n y recursos alternativos ha demostrado ser la mejor manera de conciliar los derechos de las mujeres a decidir con el deber del Estado de proteger la vida en formaci¨®n. Cinco. Porque es la mayoritaria en Europa. La legislaci¨®n de plazos es la m¨¢s establecida entre los pa¨ªses del entorno europeo, especialmente en el contexto de los Estados con quienes compartimos tradici¨®n pol¨ªtica y constitucional. En una Europa sin fronteras no es razonable que una mujer espa?ola sea tratada, en sus derechos b¨¢sicos, de modo diferente a una francesa, portuguesa o alemana. Seis. Porque no distingue entre pobres y ricas. Las leyes restrictivas no disminuyen el n¨²mero de abortos, solo provocan que las mujeres que no tienen recursos econ¨®micos lo hagan en peores condiciones, por lo que a la discriminaci¨®n por raz¨®n de sexo se une la discriminaci¨®n por clase o condici¨®n social. Siete. Porque la poblaci¨®n est¨¢ conforme. La mayor¨ªa de la poblaci¨®n espa?ola no se reconoce en el marco de una legislaci¨®n restrictiva o prohibicionista en materia de aborto. Seg¨²n la ¨²ltima encuesta de Metroscopia, una mayor¨ªa, el 53%, apoya una ley de plazos como la actual mientras que el 37% prefiere una ley de indicaciones m¨¦dicas. Ocho. Porque hace la pr¨¢ctica del aborto m¨¢s segura y equitativa. Facilitar los tr¨¢mites hace que los abortos se realicen, como ahora sucede, en periodos muy tempranos de la gestaci¨®n, disminuyendo los riesgos asociados a los abortos tard¨ªos. Facilita tambi¨¦n que las mujeres sean tratadas igualitariamente independientemente de la comunidad aut¨®noma donde vivan. Nueve. Porque es una ley eminentemente preventiva. La actual legislaci¨®n no solo aborda la interrupci¨®n voluntaria del embarazo, sino la prevenci¨®n y educaci¨®n afectiva y sexual de toda la poblaci¨®n, en especial de la poblaci¨®n m¨¢s joven, el mecanismo m¨¢s eficaz para disminuir el n¨²mero de abortos. Diez. Porque derogarla supone un retroceso social de d¨¦cadas. Hoy vivimos mejor porque podemos decidir en lo que concierne a nuestra vida sexual y reproductiva sin que nos persigan. Perder en tres a?os lo que tardamos 30 en conseguir nos lleva a un pasado de dif¨ªcil retorno.
Diez razones frente a una. El Partido Popular cuenta, por supuesto, con una mayor¨ªa parlamentaria suficiente para aprobar la reforma que desee, se ajuste o no a sus compromisos electorales. Pero tambi¨¦n tiene el compromiso social y democr¨¢tico de gobernar para la mayor¨ªa. Ser¨ªa un buen momento para darse un ba?o de realidad y favorecer el entendimiento entre los sectores que opinan de distinta manera sin hac¨¦rselo pagar a las mujeres que se enfrentan a una interrupci¨®n del embarazo y que, con la nueva norma, ganar¨¢n sufrimiento y perder¨¢n libertad.
No es bueno legislar contra algo que funciona. No es justo desconfiar de la responsabilidad de las mujeres. No es democr¨¢tico obligar a una mujer a ser madre contra su voluntad. Entonces, ?por qu¨¦ castigar a las mujeres? ?Estamos a¨²n a tiempo de pensar en ellas y dejar las cosas como est¨¢n?
Isabel Serrano Fuster es ginec¨®loga y portavoz de la Plataforma Decidir Nos Hace Libres, y Mar¨ªa Luisa Soleto ?vila es directora de la Fundaci¨®n Mujeres.
Firman tambi¨¦n este art¨ªculo: Mar¨ªa del Puy Zat¨®n (Enclave Feminista), Francisca Garc¨ªa Guerrero (Asociaci¨®n de Cl¨ªnicas Acreditadas para la Interrupci¨®n del Embarazo-ACAI), Mar Grandal (Cat¨®licas por el Derecho a Decidir), M? Concepci¨®n Torres D¨ªaz (Red Feminista de Derecho Constitucional), Marciano Sanchez Bayle (Federaci¨®n de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad P¨²blica-FADSP), Luis Enrique S¨¢nchez Acero (Federaci¨®n de Planificaci¨®n Familiar Estatal-FPFE), Carmen Flores Rodr¨ªguez (Federaci¨®n de Asociaciones de Madres Solteras-FAMS), Empar Pineda (Otras Voces Feministas), Ana Alcalde (Alianza por la Solidaridad), Montserrat Boix (Mujeres en Red), Yolanda Besteiro de la Fuente (Federaci¨®n de Mujeres Progresistas), Francisca Tarazaga (Mujeres por Europa), Tina Alarc¨®n (Asociaci¨®n Asistencia a V¨ªctimas de Agresiones Sexuales), Teresa L¨®pez (Federaci¨®n de Asociaciones de Mujeres Rurales-FADEMUR), Paz Martin (AMALTEA), Beatriz Sagrado Roberto (M¨¦dicos del Mundo Espa?a), Silvia Calurano (Federaci¨®n Mujeres J¨®venes), Paloma Gil De La Calle (Asociaci¨®n de Mujeres para un Envejecimiento Saludable), Elvira M¨¦ndez (Asociaci¨®n Salud y Familia), Pilar Vicente de Foronda (Asociaci¨®n Igualdad de G¨¦nero en la Cultura), Mar¨ªa Pato Rodriguez (Asociaci¨®n Eleanor Roosevelt), Silvia Carizo (Asociaci¨®n de Mujeres Inmigrantes Malen Etxea, Pa¨ªs Vasco), M? Isabel A. Gonz¨¢lez (Colectivo por la Diversidad Rosa Luxemburgo), Maria Ferrero Barrio (Associaci¨® de Planificaci¨® Familiar de Catalunya i Balears), Amparo Antu?a Asenjo (Federaci¨®n Mujeres Progresistas de Asturias), Elena ?lvarez L¨®pez (Asociaci¨®n Mujeres Opa?el), Sara D¨ªaz Hern¨¢ndez (Asociaci¨®n de Mujeres de Nosotras Mismas de Chamber¨ª), Elena de Le¨®n Criado (Asociaci¨®n Derechos Humanos de las Mujeres y Desarrollo-DEHMUDE), Rebeca Juli¨¢n Ruiz (Federaci¨®n Estatal de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales-FELGTB), Montserrat Santos Lorenzo (Asociaci¨®n Galega para a Sa¨²de Sexual-AGasEx), Celia Arenas Casas (Federaci¨®n de Asoc. Mujeres Mar¨ªa Laffitte), Gloria Garc¨ªa-Nieto (Colectivo Escuela No-Sexista, Asturias), Bego?a S¨¢nchez Gonz¨¢lez (Asociaci¨®n Feminista de Asturias-AFA, Esther Mart¨ªnez Dom¨ªnguez (STEA, Zaragoza), Antonia Jes¨²s Burgos Garc¨ªa (Asociaci¨®n de Mujeres Nerea, M¨¢laga), Carmen Caparr¨®n Crespo (Asociaci¨®n de Mujeres Rosa Chacel), Carmen Caparr¨®n (Federaci¨®n de Mujeres del Poniente por la Igualdad, Almer¨ªa), Rosa G¨®mez Torralbo (Federaci¨®n Feminista Gloria Arenas), Lourdes Mu?oz (Plataforma Nosatres Decidim, Catalunya), Mar Vicent, (XATEBA - Asociaci¨®n por la igualdad y contra la violencia de g¨¦nero, X¨¤tiva, Valencia), Lola Oltra G¨®mez (Asociaci¨®n Eleanor Roosevelt), Concha Alarc¨®n Gonz¨¢lez (Asociaciones por la Igualdad de G¨¦nero Guadalhorce Equilibra, M¨¢laga), Amanda Rodr¨ªguez Pinto (Arc¨®poli, asociaci¨®n LGTB+H, Universidades Polit¨¦cnica y Complutense, Madrid), Mar¨ªa Ferraz Dobarro, (Asociaci¨®n Contramarea, Canarias), F¨¢tima Arranz Lozano (Red Ecofeminista), Angustias Bertomeu Mart¨ªnez (Asociaci¨®n E-Mujeres), Anabel Santos Castro (Asociaci¨®n de Mujeres Puntos Subversivos, Andaluc¨ªa), Mercedes Ruiz-Gimenez Aguilar (Asociaci¨®n de Investigaci¨®n y Especializaci¨®n sobre Temas Iberoamericanos- AIETI), Natalia Salvo (Organizaciones Feministas de Zaragoza), M? Encina Guti¨¦rrez Ib¨¢n (Asociaci¨®n Leonesa Simone de Beauvoir), Andrea Castillo D¨ªaz (Asociaci¨®n Ecuestre entre la Vega y la Nieve), Concepci¨®n D¨ªaz Rodr¨ªguez (Asociaci¨®n SARAE), Patricia Rodr¨ªguez Calvi?o (Igualdad de las Juventudes Socialistas de Espa?a -JSE), Pilar Rodr¨ªguez (Partido Socialista, Madrid), Teresa Guti¨¦rrez ?lvarez (Igualdad del PSL- PSOE), Laura Nu?o G¨®mez (?reas Transversales IU-CM), C¨¢ndida Barroso Chulia (CCOO, Valenci¨¤), Francisca L¨®pez Garc¨ªa, (Confederaci¨®n Intersindical), Esperanza Montero (Colectivo de gays, lesbianas, transexuales y bisexuales, Madrid) y Nirvana Gonz¨¢lez Rosa (Movimiento Amplio de Mujeres de Puerto Rico, MAMPR).
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