Los nuevos Reyes Magos
G¨¢lvez, Sobera y Bonet son lo m¨¢s parecido a Melchor, Gaspar y Baltasar en tiempos de crisis Los presentadores reparten dinero en sus concursos para tapar muchos agujeros
Una mel¨¦ de viandantes. Es el resultado inmediato de plantar a Carlos Sobera (Atrapa un mill¨®n, que emite Antena 3), a Juanra Bonet (Lo sabe, no lo sabe, en Cuatro) y a Christian G¨¢lvez (Pasapalabra, de Telecinco) en un puesto de casta?as en mitad de la calle de Alcal¨¢ de Madrid. Tres presentadores televisivos queridos y populares. Juntos y al alcance de la c¨¢mara del m¨®vil. La tentaci¨®n es demasiado grande para la multitud que se agolpa y les grita ¡°guapos¡±, y ¡°majetes¡±, y ¡°?qu¨¦ fotog¨¦nicos que sois, leche!¡±. Ellos bromean e interact¨²an con el improvisado auditorio. Bonet, que ya est¨¢ acostumbrado porque sol¨ªa provocar estos peque?os tumultos callejeros cuando se ha pateado las ciudades ¨Csolo le ha quedado alguna isla por visitar¨C buscando gente que sepa, o que no sepa, sus preguntas, termina dirigiendo al p¨²blico durante la sesi¨®n de fotos: ¡°Vamos a contar todos hasta tres y lanzamos las serpentinas¡±.
Los hemos reunido para la portada del extra Regalos de 2013 de EL PA?S porque son lo m¨¢s parecido a los Reyes Magos que hemos podido encontrar en los tiempos que corren. Unos tipos encantadores que dan dinero a gente de a pie desde sus respectivos concursos. Y eso, cuando la crisis arrecia, se agradece. ¡°Yo m¨¢s que Rey Mago me considero paje; en realidad, tengo sensaci¨®n de ser un Mister Marshall al que se le cala el coche y se queda clavado en una ciudad todo el d¨ªa¡±, lo de?ne el presentador de Lo sabe, no lo sabe, que seguir¨¢ ligado a Cuatro y a Mediaset tras el ¡°hasta luego¡± de su programa. Christian G¨¢lvez en ocasiones se ve como una especie de Robin Hood; en cualquier caso, ¡°no soy rey y m¨¢s que mago soy ilusionista¡±, matiza. Pues Carlos Sobera s¨ª que se siente un Rey Mago cuando personas que acuden a su concurso para cubrir necesidades econ¨®micas graves ganan 10.000 euros o cualquier cantidad y lloran de alegr¨ªa.
¡°Ahora vemos la presencia del drama entre los concursantes. Se te abren las carnes. Porque al fin y al cabo somos un juego, un divertimento¡±, dice Sobera
El problema es la otra cara, cuando pierden. ¡°Lo que est¨¢ ocurriendo, que antes no pasaba, es la presencia del drama. Ya no es la hipoteca, es la ejecuci¨®n de la hipoteca, o una operaci¨®n que cuesta 18.000 euros y no hay dinero para pagarla. Y de repente, como no ven esperanzas por ning¨²n lado, ponen todas sus ilusiones en un concurso de televisi¨®n¡±, se pone serio el conductor de Atrapa un mill¨®n. ¡°Se te abren las carnes. Porque al ?n y al cabo somos un juego, un divertimento, no un mecanismo para solucionar problemas. No nos corresponde hacerlo a nosotros¡±, acota.
¨C?Y por qu¨¦ los que tendr¨ªan que hacerlo no lo hacen? ¨Cmete baza la maquilladora.
¨CPuf ¨CSobera pone los ojos en blanco y pide un caf¨¦.
Abordamos a Christian G¨¢lvez mientras se pone su elegant¨ªsima indumentaria: traje negro, camisa blanca y capa real. El hombre que m¨¢s palabras encadena por minuto de Espa?a ¨C¡°El m¨¦rito no es hablar r¨¢pido, sino que quien escucha entienda y tenga la capacidad de responder inmediatamente¡±¨C opina que ¡°la gran diferencia de unos a?os a esta parte es que hemos pasado de gente que ven¨ªa a concursar para costearse el viaje, o alg¨²n capricho, a concursantes que acuden para cubrir una necesidad¡±. Tambi¨¦n ¨¦l tiene historias con ?nal feliz que contar, como la de Juan Pedro, un gruista de 42 a?os en paro y con dos hijos que gan¨® 1.674.000 euros acumulados en el bote, el premio m¨¢s alto de la historia de la cadena. ¡°Lo que me gust¨® mucho de Juanpe es que ten¨ªa un sue?o y se esforz¨® y persever¨® para alcanzarlo; tardaron un a?o en llamarlo para el casting y durante ese tiempo estuvo prepar¨¢ndose¡±.
Atenci¨®n aspirantes a concursar en Lo sabe, no lo sabe: el truco para que te elijan es no querer que te elijan. Nadie dijo que fuera f¨¢cil. ¡°Siempre se nos acerca alguien preguntando qu¨¦ ha de hacer para participar y en 20 segundos te sintetiza su drama; es duro decirle que no, pero se trata de hacer un programa divertido y no convertirlo en una competici¨®n de a ver qui¨¦n nos convence con una historia m¨¢s dura¡±, re?exiona Bonet, que selecciona a los participantes buscando la variedad, la sorpresa. El objetivo es l¨²dico. Las an¨¦cdotas dar¨ªan para escribir un libro bastante gordo.
¡ª?La ?or t¨ªpica de Holanda?
¡ªLa marihuana.
¡ª?Qu¨¦ sentido le falta al cantante puertorrique?o Jos¨¦ Feliciano?
¡ªEl amor.
?Lo m¨¢s destacable? Ver c¨®mo se desmoronan los prejuicios de la gente. ¡°Eso de preguntarle a un inmigrante sobre geograf¨ªa espa?ola para que no lo sepa y el t¨ªo se la sabe porque recorre no s¨¦ cu¨¢ntas provincias con su furgoneta de reparto¡±, recuerda entre risas. Para los amantes de las estad¨ªsticas (absurdas), digamos que en a?o y medio de concurso, a Bonet solo le ha cagado una vez una paloma encima. ¡°Soy de la calle, como ellas, me respetan¡±. Y en otra sufri¨® un subid¨®n de az¨²car por culpa de un atrac¨®n de gominolas, su gran debilidad. ¡°Ni Pocholo¡±. El equipo ha vivido momentos muy tiernos, como el del se?or que confes¨® que era analfabeto, pero que procurar¨ªa contestar correctamente para ayudar al concursante.
¡ª?C¨®mo se conoce a una persona a la que le falta pigmentaci¨®n en la piel?
¡ªCon respeto, con cari?o, poco a poco.
¡ªS¨ª, pero, ?c¨®mo se le llama?
¡ªDe usted.
Juanra Bonet
Barcelona, 1974. Fue uno de los reporteros del 'Caiga quien caiga' de Manel Fuentes y desde 2011 presenta el programa de humor 'El mundo today' en la SER. Desde julio de 2012 y hasta este mes ha conducido 'Lo sabe, no lo sabe'.
Nuestras Majestades de Oriente saludan al casta?ero que les ha prestado su puesto de trabajo y observa la escena divertido. Juegan con los regalos, est¨¢n a punto de quemarse el gorro con las brasas y hacen un poco el payaso para regocijo del p¨²blico cada vez m¨¢s numeroso que los rodea. Es un poco tarde para plantearles esta cuesti¨®n, pero ?les gusta a ellos la Navidad? Christian G¨¢lvez la vive consciente de los claroscuros. ¡°Tiene su punto bonito y su punto feo, como el yin y el yang¡±, concede. ¡°Me encanta la ilusi¨®n con la que la viven los ni?os¡±, agrega el presentador, que se form¨® como profesor de educaci¨®n primaria. ¡°Pero siempre echas de menos a gente¡±. Le gusta regalar y, seg¨²n para qui¨¦n, programa con antelaci¨®n. ¡°Lo de mi mujer ya est¨¢ todo comprado¡±. Un 10 en previsi¨®n, teniendo en cuenta que esta entrevista tiene lugar a principios de diciembre. ¡°Pero, como buen espa?olito, tambi¨¦n busco presentes en el ¨²ltimo minuto; gracias a Dios, mi trabajo me permite ir a una tienda un martes a las 10 de la ma?ana. Tengo mis truquillos¡±, concluye.
¡°En Navidad, la gente se acuerda de ti, te hace regalos, te besa, te quiere, te desea lo mejor; el resto del a?o est¨¢ deseando que te la pegues¡±, tira de cinismo Sobera, aunque al ?nal ¨¦l tambi¨¦n se deja llevar por el ambiente festivo, celebra y regala como el que m¨¢s. ¡°Ya sabes, siembra y recoger¨¢s¡±, apostilla socarr¨®n. Aunque no le gusta nada cuando lo que recibe es ropa. ¡°Me hacen un hombre muy desgraciado¡±. O colonia: ¡°Es algo muy personal, me gusta comprarla a m¨ª¡±. Bol¨ªgrafos, estilogr¨¢?cas, productos de librer¨ªa, eso s¨ª le hace feliz. Y m¨²sica. ¡°Como el resto de los espa?oles, me acuerdo de mi gente justo cuando llega Navidad; est¨¢ tan en la calle¡ No me preguntes por la fecha de cumplea?os de nadie; mi madre me llama todos los 25 de mayo rega?¨¢ndome por no acordarme del suyo. ?Por qu¨¦ los grandes comercios, en vez de promocionar las Navidades, no promocionan el d¨ªa en el que mi madre cumple a?os para que yo me acuerde?¡±, pide con su caracter¨ªstico arqueo de ceja.
Christian G¨¢lvez
Madrid, 1980. Otro de los reporteros del 'Caiga quien caiga' de Manel Fuentes. Acaba de renovar con Telecinco para continuar en 'Pasapalabra' hasta 2015. En abril presentar¨¢ su cuarto libro (su primera novela hist¨®rica), sobre Leonardo da Vinci.
De ni?o le gustaban los Reyes Magos, pero por puro ego¨ªsmo. ¡°Siendo tres, las probabilidades de un buen regalo son mayores; Pap¨¢ Noel es uno y est¨¢ muy gordo, no es seguro que vaya a caber por la chimenea, y adem¨¢s, si hay comida, ?jo que se la come. No me f¨ªo de ¨¦l¡±, razonaba, fr¨ªo, el peque?o Carlos. Su preferido era Baltasar, por ser negro. ¡°Me solidarizo con ¨¦l, tiene todo mi apoyo, odio el racismo por encima de todas las cosas¡±, sentencia. A¨²n recuerda el a?o en el que le trajeron el castillo de Exin. ¡°Estaba obsesionado por tenerlo¡±. Pronto descubri¨® que se trataba de un caramelo envenenado. ¡°No ten¨ªa forma de montarlo, era un ni?o torpe, he de confesarlo. Nunca consegu¨ª construir todas las almenas y siempre me sobraban piezas. La culminaci¨®n de mis ansiedades e ilusiones fue un castillo cojo, como la infancia de los a?os sesenta, en un pa¨ªs en blanco y negro¡±, se pone ?los¨®?co.
Juanra vivi¨® un ?asco parecido siendo ni?o, seg¨²n cuenta tras consultar a su madre v¨ªa m¨®vil. Es su llamada del comod¨ªn, avisa mientras marca. ¡°Hubo un juego de construcci¨®n, con ladrillitos peque?itos, un saquito de cemento, las tejas¡ Todo era funcional, estaba pensado para edi?car, pero a peque?a escala. Me qued¨¦ frustrado, no ten¨ªa vocaci¨®n de constructor. De repente, los Reyes pensaron que ten¨ªa alma de lanzar piropos, aunque el juego no inclu¨ªa ninguna se?orita a quien soltarle: ¡°D¨®ooondeeee ?vaaaaas¡±. Pone voz de con?dencias: ¡°Siempre quise el barco pirata de los Clicks. Nunca lo tuve. El fuerte s¨ª. Piensa en el subtexto. La forti?caci¨®n s¨ª, pero no el barco, y un juego de construcci¨®n, pero no el barco. ?Qu¨¦ quiere decir eso? Que los Reyes, de alguna manera, me quer¨ªan quieto, no me quer¨ªan n¨®mada. ?C¨®mo lo ves? Cuadra¡±. Absolutamente.
Carlos Sobera
Barakaldo, Bizkaia, 1960. Lleva desde 1999 repartiendo dinero en distintos concursos. Desde 2011 presenta 'Atrapa un mill¨®n', de Antena 3. Como productor teatral est¨¢ detr¨¢s de 'C¨®mo est¨¢n ustedes 2.0' y 'El jefe de todo esto, de Lars von Trier'.
Bonet tambi¨¦n era de sus Majestades, pero no ten¨ªa preferencias entre Melchor, Gaspar o Baltasar. Le iba ¡°el concepto de equipo¡±. A priori no le gusta la Navidad y cada diciembre tiene el mismo impulso: este a?o no. ¡°Por un lado te hace ilusi¨®n, pero por otro, la obligaci¨®n me disgusta mucho. Me encanta estar paseando un 14 de noviembre, ver algo que le pueda gustar a mi hermana y compr¨¢rselo¡±.
Pero ya no se enga?a; al ?nal termina enganch¨¢ndose al esp¨ªritu general. ¡°Te dejas llevar, no puedes evitarlo, eliges papel, a ver c¨®mo lo envuelvo. Y ya est¨¢. Ya te l¨ªas¡±. El 24, el 31, los d¨ªas se?alados, marcha a Barcelona, a celebrarlos con la familia. Con sus amigos de Madrid, esa suerte de microfamilias que se forman cuando ¡°casi todo el mundo es de fuera¡±, organiza comidas navide?as. ¡°Empiezas refunfu?ando y acabas metido hasta el ?nal, un poco como el matrimonio¡±.
Hace tres o cuatro Navidades, el presentador de Lo sabe, no lo sabe decidi¨® pasar solo la velada en Madrid. Se cocin¨®, eligi¨® el vino, vio el programa de gags que tocaba. ¡°Hasta ah¨ª, todo muy moderno y vanguardista por mi parte¡±. A eso de las 0.15 se pregunt¨® a s¨ª mismo (a qui¨¦n si no): ¡°?Y ahora qu¨¦?¡±. El plan se le empezaba a caer y se puso a llamar a sus amigos: ¡°Hola, ?qu¨¦ hac¨¦is?¡±. Eso es algo que no le ocurrir¨¢ nunca a Christian G¨¢lvez, que suele viajar en A?o Nuevo. Apunta que tiene pendiente Nueva York y Laponia, aunque no suelta prenda sobre cu¨¢l ser¨¢ su destino navide?o de 2013-2014. ¡°Lo cuento cuando vuelvo, nunca antes¡±, se excusa.
Por lo pronto, la pr¨®xima escapada de Christian, de Juanra y de Carlos va a consistir en salir del puesto de casta?as y recorrer los 200 metros hasta el hotel, donde continuar¨¢ la sesi¨®n de fotos, sin perder el resto de la ma?ana ?rmando aut¨®grafos y saludando admiradores. Y as¨ª lo hacen, sin grandes aspavientos, mezcl¨¢ndose con la gente, como los tres Reyes Magos simp¨¢ticos, cercanos y callejeros que son.
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