7 fotosLos que tiemblan ante DiosHoy son minor¨ªa. Pero la fuerza que les da su fanatismo y su imparable crecimiento demogr¨¢fico permite a los ultraortodoxos poner en jaque la modernizaci¨®n de Israel 09 ene 2014 - 00:00CETWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceUnos ultraortodoxos se manifiestan en la calle lanzando piedras.Ariel JerozolimskiTres veces al d¨ªa. El movimiento repetitivo facilita la concentraci¨®n.Ariel JerozolimskiMeir Hirsh, en la imagen en su domicilio, es miembro del grupo antisionista Neturei Karta, radicado en Mea Shearim, que rechaza la vocaci¨®n modernizadora impuesta en Israel por grupos que niegan su anclaje en las tradiciones radicales. En su casa hay un cartel que reza: "Aqu¨ª vive un jud¨ªo, no un sionista".Ariel JerozolimskiUn grupo de j¨®venes en una manifestaci¨®n ultraortodoxa.Ariel JerozolimskiViven en la ciudad de Betar Illit, una colonia ultraortodoxa en Cisjordania, y son padres de 11 hijos, ejemplo de la imparable revoluci¨®n demogr¨¢fica de una comunidad que, de seguir as¨ª, con un crecimiento del 5% anual entre sus miembros frente al 1,8% del resto, alcanzar¨¢ el 40% de la poblaci¨®n israel¨ª en cinco d¨¦cadas.Ariel JerozolimskiJud¨ªos ortodoxos residentes en Jerusal¨¦n, con dos de sus hijos, Shmuel, de 18 a?os, y Yehuda, de 8. Han casado ya a todas sus hijas a temprana edad. Ambos han fundado una facultad para jared¨ªes, estrictamente segregada.Ariel JerozolimskiSe practica antes del Yom Kippur, el d¨ªa m¨¢s sagrado del a?o dentro del calendario jud¨ªo. En el barrio de Mea Shearim, un hombre dice una oraci¨®n mientras da tres vueltas con un pollo sobre la cabeza, para limpiar simb¨®licamente los pecados. El pollo es despu¨¦s sacrificado y donado a los pobres antes de la comida de celebraci¨®n.Ariel Jerozolimski