Las hijas de Ch¨¢vez se hacen fuertes en su casa
El presidente Maduro acepta la ocupaci¨®n de la casa presidencial de Venezuela Las hijas del difunto comandante, una dedicada a las obras caritativas y la otra al mundo de la far¨¢ndula, disfrutan de la cancha de boliche y de la piscina en ese palacio colonial
"Yo le di la orden al vicepresidente de que permaneciera en La Casona [la residencia presidencial de Venezuela]¡±. El presidente venezolano Nicol¨¢s Maduro respondi¨® as¨ª a una pregunta del periodista Vladimir Villegas en la v¨ªspera de las elecciones municipales del pasado 8 de diciembre. El entrevistador le hab¨ªa preguntado por qu¨¦ raz¨®n no viv¨ªa en la morada destinada a los jefes de Estado y sus familiares, donde s¨ª siguen residiendo las hijas del fallecido Hugo Ch¨¢vez.
Ha sido hasta ahora la ¨²nica explicaci¨®n, la hoja de parra que disimula la irregularidad que representa que alguien distinto de Maduro y su familia vivan en ese lugar, una mansi¨®n de estilo colonial rodeada de zaguanes que en el pasado fue la sede de una hacienda azucarera y que tiene entre sus distracciones una cancha de boliche y una piscina. El vicepresidente Jorge Arreaza vive all¨ª con su esposa Rosa Virginia y su cu?ada Mar¨ªa Gabriela, las hijas mayores de Hugo Ch¨¢vez.
La ins¨®lita situaci¨®n ha dado pie a toda clase de especulaciones y a un enardecido reclamo en las redes sociales y en la prensa m¨¢s enfrentada al oficialismo. Once meses despu¨¦s de la muerte del caudillo bolivariano, sus hijas siguen disfrutando de los privilegios como si su padre a¨²n estuviera vivo. A esa voluntad de eternidad contribuye la televisi¨®n oficial. Cada vez que pueden, las autoridades venezolanas dicen que Ch¨¢vez no muri¨®, sino que se sembr¨® entre su gente.
Salvo esa alusi¨®n de Maduro, no es mucho lo que se sabe de los cuatro hijos del comandante (los otros dos son Hugo y Rosin¨¦s).
La hija mayor lidera uno de los programas asistenciales del pa¨ªs m¨¢s apreciados por los pobres. Rosa Virginia fue nombrada recientemente como presidenta de la Misi¨®n Milagro, uno de los tantos convenios suscritos por Cuba y Venezuela para fortalecer su relaci¨®n pol¨ªtica, y debe dar explicaciones sobre su trabajo a su marido. Con el apoyo de la medicina cubana, personas de bajos recursos son intervenidas de problemas en la vista. Son incontables los testimonios agradecidos de los pacientes en las emisoras del Estado.
?Y el presidente Maduro? ?D¨®nde vive?
Es un misterio d¨®nde vive el actual presidente de Venezuela, Nicol¨¢s Maduro. Algunos aseguran que en La Vi?eta, una residencia oficial asignada al vicepresidente y que antes fue un inmueble destinado al hospedaje de jefes de Estado extranjeros. Y otros creen que reside en la vivienda correspondiente al ministro de Defensa dentro de Fuerte Tiuna, la fortaleza militar dentro de la ciudad de Caracas. Le han visto entrar con su coche oficial en el Cuartel de la Monta?a, donde se encuentra el mausoleo de Hugo Ch¨¢vez.
Mucho m¨¢s dada al espect¨¢culo y a la provocaci¨®n es Mar¨ªa Gabriela Ch¨¢vez, de 33 a?os, a quien no se le conoce ocupaci¨®n y es madre de una hija ya adolescente. Que su vida sea la m¨¢s conocida no es algo del azar. Su padre revel¨® hace algunos a?os sus amor¨ªos con Pablo Sep¨²lveda, el nieto del presidente Salvador Allende, quien trabajaba como m¨¦dico en uno de los programas sociales del chavismo. Adem¨¢s, ella siente una compulsi¨®n por documentarlo todo en su perfil de Instagram. Un d¨ªa puede subir im¨¢genes de su padre; otro d¨ªa cuelga instant¨¢neas de sus pies, del momento en el que su madre, Nancy Colmenares, le coloca las medias, sus visitas a la playa o sus amor¨ªos. Poco despu¨¦s de la muerte del presidente, el pasado 5 de marzo, hizo p¨²blico su romance con un actor de culebrones. Manuel Sosa fue el primer gal¨¢n de la malograda actriz y ex Miss Venezuela M¨®nica Spear en la telenovela Mi prima Ciela, que transmiti¨® Radio Caracas Televisi¨®n, y forma parte del minoritario pero ruidoso grupo de talentos locales que apoyan a la autodenominada revoluci¨®n bolivariana.
Pero todas esas im¨¢genes que la relacionaban con Sosa, a quien se le vio muy compungido en el funeral de Spear, ya no est¨¢n colgadas en la Red. La nueva pareja de Mar¨ªa Gabriela es el empresario Roberto Leyba. Juntos aparecen fotografiados en la playa con el tel¨®n de fondo de un atardecer caribe?o, o abrazados en medio de una reuni¨®n entre amigos. En Twitter ella escribi¨®: ¡°No es perfecto, mas se acerca a lo que yo simplemente so?¨¦¡±, una cita textual de un verso de la canci¨®n El breve espacio en que no est¨¢s, del cantautor cubano Silvio Rodr¨ªguez.
Toda esa compulsi¨®n farandulera contrasta con el perfil de l¨ªder pol¨ªtica que cierta prensa entregada al chisme pol¨ªtico alguna vez trat¨® de construirle. En 2010, el semanario Las Verdades de Miguel public¨® en su noticia principal que ella ser¨ªa la sucesora de su padre en la presidencia. ¡°Miguel, yo te conozco bien. Deja quieta a Mar¨ªa¡±, le respondi¨® Ch¨¢vez en su programa dominical Al¨®, Presidente para despachar cualquier posibilidad. Pero hab¨ªa algunas razones para considerarlo. Cuando en 2002 Ch¨¢vez fue depuesto mediante un golpe de Estado, Mar¨ªa Gabriela Ch¨¢vez fue la encargada de comunicarle a Fidel Castro que su padre estaba detenido contra su voluntad. La primicia ofrecida por ella a la televisi¨®n cubana permiti¨® al chavismo recuperar posiciones y aprovechar la confusi¨®n entre los militares para retomar el poder tres d¨ªas despu¨¦s. Adem¨¢s, a falta de primera dama ¡ªCh¨¢vez se divorci¨® de Marisabel Rodr¨ªguez en 2004¡ª, Mar¨ªa Gabriela cumpl¨ªa con ese papel en algunos actos de Estado.
De Leyba se sabe muy poco. La prensa del coraz¨®n asegura que es medio hermano de Sosa. La menci¨®n puede leerse como una maliciosa manera de elaborar un perfil de Mar¨ªa Gabriela m¨¢s acorde con una protagonista de telenovela. Los ingredientes est¨¢n: el amor de dos hermanos, la permanencia en una casa que no le pertenece, la prematura muerte de un padre que era un gran l¨ªder pol¨ªtico. Y el p¨²blico que, como ocurre en la vida real, est¨¢ pendiente de la vida de sus artistas.
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