14 de abril
La Rep¨²blica es ese futuro irreal e incontaminado al que, de momento, solo se puede llegar por el camino del romanticismo
La Rep¨²blica se ha convertido en un parque natural de la pol¨ªtica espa?ola. Se trata de un espacio de la memoria colectiva, que habr¨ªa que preservar como se hace con un paisaje muy singular o con las especies biol¨®gicas en peligro de extinci¨®n. Puede que los ciudadanos que vivieron aquel episodio nacional lo recuerden con la nostalgia de un sue?o de libertad, igualdad y fraternidad o con el horror de un mal parto, que termin¨® en la tragedia de una guerra civil. Para muchos espa?oles que no conocimos aquel tiempo sino a trav¨¦s de libros y relatos melanc¨®licos o envenenados, m¨¢s all¨¢ de los t¨®picos en que ha llegado hasta nosotros, la Rep¨²blica es ese futuro irreal e incontaminado al que, de momento, solo se puede llegar por el camino del romanticismo. Los m¨¢s profundos poemas de amor se deben a poetas que han experimentado amores frustrados o prohibidos. Las mejores novelas de aventuras han sido escritas en la mesa camilla imaginando piratas en el ventanuco del patio de luces y, por supuesto, las pasiones m¨¢s morbosas suelen proceder de escritores de vida funcionarial, muy ordenada. Probablemente la Rep¨²blica hoy ser¨ªa otra cosa si se hubiera proclamado un d¨ªa de invierno con niebla, pero lleg¨® un 14 de abril bajo la flor de las acacias y en el sentimiento popular est¨¢ asociada a la primavera y a la Ni?a Bonita, el n¨²mero m¨¢gico en la rueda de la fortuna. En las manifestaciones de protesta en la calle se ve crecer cada vez m¨¢s alta la marea de banderas republicanas enarboladas por j¨®venes, que sue?an con una primavera pol¨ªtica, que limpie la suciedad de estos tiempos en que vivimos. La crisis econ¨®mica unida a la basura de la corrupci¨®n cuyo hedor no cesa de apoderarse de la sociedad, sin respetar siquiera la escalinata de la casa real, hace que en medio del aire irrespirable, la Rep¨²blica se haya convertido en ese parque natural que es necesario proteger, aunque solo sea para purificar la mente de los ciudadanos. No todo est¨¢ perdido. En medio de la frustraci¨®n, cada a?o, cuando se acerca el 14 de abril, muchos espa?oles divisan un espacio limpio por donde asoma el gorro frigio de aquella Ni?a Bonita con un mensaje de armon¨ªa y libertad. Tal vez se trata solo de un sentimiento, pero ah¨ª est¨¢, creciendo m¨¢s cada d¨ªa.
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