La vida privada de los famosos deja de serlo
Estrasburgo sentencia que los hijos extraconyugales de Alberto de M¨®naco son un ¡°asunto de inter¨¦s¡±
La justicia en Francia siempre es muy sensible a las reclamaciones que los personajes p¨²blicos presentan para preservar su vida privada ante la curiosidad de los medios de comunicaci¨®n. Hay muchos ejemplos que lo avalan y varios de ellos tienen como protagonista a la familia Grimaldi. Pero este jueves el Tribunal Europeo de Derechos Humanos dej¨® en evidencia a los jueces franceses, que hab¨ªan defendido desde 2005 que Alberto de M¨®naco ten¨ªa derecho a mantener en el ¨¢mbito de su privacidad la existencia de su hijo Alexander, nacido de una relaci¨®n con una azafata togolesa. Desde que comenz¨® la batalla legal contra Paris Match, publicaci¨®n que revel¨® la existencia del ni?o, el pr¨ªncipe obtuvo varias sentencias a su favor. Pero la revista mantuvo el pulso y llev¨® el asunto hasta Estrasburgo, que ahora le acaba de dar la raz¨®n. Una decisi¨®n sin precedentes que marca un punto de inflexi¨®n en materia de privacidad de los personajes p¨²blicos.
La Corte europea considera que la existencia del peque?o ¡°interesa a la sociedad y especialmente a los ciudadanos de M¨®naco¡±. Y en la sentencia sostiene que ¡°hab¨ªa un inter¨¦s p¨²blico leg¨ªtimo en conocer la existencia de este ni?o, ya que permitir¨ªa discutir su posible impacto en la vida pol¨ªtica del principado de M¨®naco¡±.
Paris Match, perteneciente a la editorial Hachette Filipacchi, public¨® el 5 de mayo de 2005 fotos del ni?o con el pr¨ªncipe, dos d¨ªas despu¨¦s de que el tabloide brit¨¢nico The Daily Mail lo avanzara. Alberto envi¨® entonces un escrito a la redacci¨®n del semanario franc¨¦s para impedir la publicaci¨®n de la noticia, pero sus peticiones fueron ignoradas. As¨ª que el pr¨ªncipe llev¨® a la revista a los tribunales de Nanterre, quienes dictaminaron que la publicaci¨®n deb¨ªa indemnizarlo con 50.000 euros y, adem¨¢s, publicar la sentencia en su portada. A juicio de los jueces franceses, la revista caus¨® ¡°un da?o irreversible, ya que la paternidad se hab¨ªa mantenido en secreto desde el nacimiento hasta la publicaci¨®n¡±.
Un mes despu¨¦s, el heredero monegasco reconoci¨® p¨²blicamente la paternidad de Alexander, que en la actualidad tiene 11 a?os. El peque?o naci¨® fruto de una relaci¨®n que mantuvo su padre con la azafata de Togo Nicole Coste. Fue ella quien revel¨® al semanario la existencia del ni?o. Simult¨¢neamente, la revista alemana Bunte public¨® la misma informaci¨®n que Paris Match y tambi¨¦n fue llevada ante el juez por el pr¨ªncipe. Sin embargo, en Alemania el caso no prosper¨®.
La Corte europea considera que la existencia del ni?o "interesa a la sociedad y especialmente a los ciudadanos de M¨®naco"
Alberto de M¨®naco es padre tambi¨¦n de una joven, Jazmine Grace, de 22 a?os, nacida de su relaci¨®n con Tamara Rotolo, a la que conoci¨® cuando trabajaba como camarera. El pr¨ªncipe reconoci¨® a su hija mayor en 2006 y aunque mantiene contacto con ella, esta no acudi¨® al enlace de su padre con Charlene en 2011. Jazmine Grace estudia en la Universidad de Fordham, en Nueva York. Ninguno de estos dos hijos, nacidos fuera del matrimonio, tienen derechos sucesorios. Alberto y Charlene esperan ahora un hijo, o quiz¨¢ dos s¨ª se confirman las noticias aparecidas en algunos medios cercanos a la familia real monegasca que aseguran que la princesa espera gemelos.
Carolina de M¨®naco y su hija Carlota tambi¨¦n han acudido a los tribunales de Francia para proteger su vida privada. Pero el caso reciente m¨¢s sonado al que se ha enfrentado la justicia francesa es la demanda de Julie Gayet contra la revista Closer por revelar su relaci¨®n amorosa con el presidente Fran?ois Hollande. Val¨¦rie Trierweiler, la expareja del pol¨ªtico, tambi¨¦n demand¨® a la misma publicaci¨®n por airear su vida lejos del El¨ªseo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.